Visitas destacadas
Un parque lleno de tesoros
Cuando el turista llega a Kassel y comienza a descubrir sus muchos alicientes, queda especialmente impresionado al conocer el parque Bergpark Wihelmshöhe, del que se dice que es el más grande de Europa. Ocupa toda una ladera de una montaña e incluye numerosos monumentos, museos y lugares de interés de la ciudad, entre ellos la famosa estatua de Hércules. Allí está el museo Schloss, una de sus mayores atracciones. En los meses de verano se celebran formidables juegos de agua en sus fuentes, con maravillosas cascadas que encantan a los visitantes. Y es que el parque es toda una belleza que la Unesco ha declarado en 2013 Patrimonio de la Humanidad. Concretamente se ha incluido la impresionante estatua de Hércules y las magníficas fuentes, que se consideran un ejemplo magistral de la arquitectura del agua en Europa. Además de estos muchos tesoros con los que cuenta el Bergpark Wilhelmshöhe, el parque destaca también por su riqueza vegetal y sus magníficos ejemplares de plantas y árboles.
Hércules, todo un símbolo
En lo más alto del parque Bergpark Wilhelmshöhe, vigilando toda la ciudad desde su privilegiado emplazamiento, se alza la estatua de Hércules, desde el año 1717. Se trata de un monumento especialmente emblemático en Kassel, diseñado por Giovanni Francesco Guerniero, que está encaramado a lo más alto de una pirámide que, a su vez, se alza sobre un curioso edificio de forma octogonal. La altura del conjunto monumental es de 71 metros. Cuenta con una plataforma de observación situada a 28,5 metros del suelo, y a la que los visitantes tienen acceso por una escalera. Desde esta plataforma se pueden contemplar, sin duda, las mejores vistas de todo Kassel. No es extraño que el colosal Hércules, una imponente figura de 8,30 metros de altura realizada en cobre, haya sido incluido en 2013 en la lista de lugares Patrimonio de la Humanidad.
El casco antiguo de Kassel y el Museo de los Hermanos Grimm
Si bien la ciudad poseía un bello casco histórico, la mayor parte del mismo fue destruido durante la Segunda Guerra Mundial, que tantos monumentos se llevó por delante. Sin embargo, aún conserva algunos edificios de interés que merece la pena descubrir. La iglesia medieval de San Martín, del siglo XIV, es uno de ellos. Del siglo XVIII perdura un palacio barroco muy especial, la Orangerie, ubicado en el parque de Karlsaue. Pero de entre todos los edificios que forman el centro histórico de Kassel, muchos de los cuales destilan influencia francesa, el palacio más especial es el Bellevue, que alberga el Museo de los Hermanos Grimm, creado en 1959, donde se guardan las obras originales de los geniales escritores, que ostentan el título de Patrimonio de la Humanidad. En el jardín se puede ver una estatua de los dos hermanos. Acercarse a este museo es una de las visitas más especiales que pueden hacerse en la ciudad, ya que nos sumerge en un mundo mágico que nos descubre cómo recopilaron los geniales escritores sus historias y cuáles fueron sus fuentes de inspiración.
Horario: de martes a domingo, de 10:00 a 17:00 h., excepto el miércoles que abre de 10:00 a 20:00 h. Lunes cerrado.
Tel.: +49 561 103235.
Precio: entrada general, 3 €. Menores de 18 años, gratis.
Museo Schloss en el palacio Wilhelmshöhe
En el parque Bergpark Wihelmshöhe se alza el palacio Wilhelmshöhe que comenzó a construirse a partir de 1786 por orden del príncipe Wilhelm I (reinó de 1785 a 1821). El proyecto del edificio fue muy controvertido y no estuvo terminado hasta muchos años después. Finalmente, se decidió realizar un palacio monumental, con un cuerpo central que se elevase por encima de las dos alas laterales y una gran cúpula. Desgraciadamente, la parte central del palacio fue destruida por una bomba en 1945. Años después, cuando fue reconstruido en torno a 1968, ya no se levantó la cúpula original. En aquel momento se decidió albergar en el palacio un museo de arte, aunque volvió a cerrarse en 1994 debido a importantes defectos en la construcción del edificio. No fue reabierto hasta el año 2000, después de que las salas de exposición del museo experimentasen una importante restauración. Hoy el palacio alberga tres museos diferenciados: en la Galería de Pintura, con estupendas obras de Rembrandt y Frans Hals, entre otros. En el sótano y la planta baja se puede ver una interesante colección de antigüedades, que incluye incluso esculturas griegas y cerámica romana. Y, por último, el museo alberga una gran colección de Artes Gráficas. Además, es posible visitar en la parte más antigua del palacio las suntuosas dependencias reales de finales del siglo XIX.
Horario: de martes a domingo, de 10:00 a 17:00 h., excepto los miércoles que cierra a las 20:00 h. Lunes cerrado.
Tel.: +49 (0) 561 31 68 00.
Web: www.museum-kassel.de
E-mail: info@museum-kassel.de
Precio: entrada general, 6 € Menores de 18 años, gratis.
El parque Karlsaue y el palacio de Orangerie
En el centro de la ciudad, junto al río Fulda, se enclava el maravilloso parque Karlsaue, con unos 1.500 metros cuadrados de extensión. Fue restaurado en 1785 como un bello jardín en el que se mezclaron partes de estilo barroco con otras zonas de inspiración más natural. Hoy es uno de los lugares estrella de la ciudad. En la parte suroeste se localizan algunas de las instalaciones deportivas más importantes de Kassel, como la Auestadion y la pista de patinaje sobre hielo. El parque incluye un gran número de estanques y fuentes que le dotan de una frescura sorprendente. En el interior se localiza el maravilloso palacio de Orangerie, construido entre 1701 y 1710, y que fue rodeado de numerosos naranjos y laureles. El imponente edificio acoge desde 1992 el Museo de Astronomía e Historia Técnica, conocido hoy como el Gabinete de Astronomía y Física.
Horario: de martes a domingo, de 10:00 a 17:00 h., excepto el jueves que cierra a las 20:00 h. Lunes cerrado.
Tel.: 49 (561) 31680 500.
Hofgeismar y el castillo de la Bella Durmiente
Son muchos los pueblos y ciudades de gran belleza que pueden visitarse tomando como punto de partida a Kassel. Uno de ellos, situado a unos 29 km. en dirección norte, es Hofgeismar, un precioso pueblo medieval. Se localiza muy cerca del bosque de Reinhard, en el que se enclava la fortaleza de Sababurg. Se dice que este fue el castillo en el que la Bella Durmiente permaneció dormida esperando el beso del príncipe. Toda la zona posee un encanto increíble, un aire de cuento que la convierte en el destino perfecto para una excursión turística.
Una visita al centro histórico de Marburg
Pintoresca donde las haya, la ciudad de Marburg se localiza no demasiado lejos de Kassel, a 91 km., y posee un centro histórico de gran belleza. Un intrincado conjunto de callejuelas y escaleras, flanqueadas por casas medievales, por las que resulta todo un placer perderse. Y dominando la ciudad, destaca el castillo en el que residieron los príncipes de la región de Hesse del siglo XIII al XVII. Pero no es el único monumento de relevancia en Marburg. También destaca la iglesia de Santa Isabel, del siglo XIII, y la Universidad, que fue fundada en 1527 y es universidad protestante más antigua del mundo.
La ciudad medieval más bella del país
La bella población de Alsfeld, situada a 92 km. de Kassel, es para muchos la más bonita de toda Alemania. Y no es de extrañar que despierte pasiones, ya que cuenta con un gran número de tesoros arquitectónicos que causan admiración entre los visitantes, como el Ayuntamiento de estilo gótico, uno de los más espectaculares de todo el país, y el palacio renacentista de Hochzeitshaus. También puede verse en Alsfeld la casita en la que vivía Caperucita Roja, uno de los cuentos más famosos de los Hermanos Grimm.
El Parque Nacional Kellerwald-Edersee
Este maravilloso entorno natural se localiza al sur de Alemania, en la región de Hesse, relativamente cerca de Kassel. Con una superficie de más de 57 kilómetros cuadrados, el parque merece una visita, dada la gran belleza natural del paisaje repleto de antiguos bosques de gran valor natural. De hecho, en el año 2011 la Unesco incluyó a los “antiguos bosques de hayas de Alemania” en la lista de lugares Patrimonio de la Humanidad.
Redactor :
Anne Chabot
