Presentación
Rothenburg ob der Tauber es la imagen típica de la Baviera medieval y romántica. Esta localidad alemana de casi 11.000 habitantes, situada junto al río Tauber, es un modelo tantas veces repetido en los cuentos centroeuropeos. Con sus encantadores edificios de entramado de madera, sus calles empedradas, su casco histórico rodeado de una muralla y lleno de plazas, torres, fuentes y bellos jardines, bien podría ser la ciudad natal de Hänsel y Gretel. De hecho, Rothenburg ob der Tauber ha sido el escenario de varias producciones de cine, además de servir como fuente de inspiración a la factoría Disney para la recreación del pueblo donde vivía Pinocho. Pertecene al distristo de Ansbach, en el estado federado de Baviera, Alemania, y hasta el año 1803 fue una Ciudad Imperial Libre. En la actualidad es un importante centro turístico, cuya mayor atracción es un centro histórico que nos remite al pasado.
La localidad de Rothenburg ob der Tauber pertenece (de mayor a menor) al estado Bayern, al condado Mittelfranken y al distrito Ansbach.
La localidad de Rothenburg ob der Tauber cubre 41,45 km². La altitud media es de 430 m.
El actual alcade de Rothenburg ob der Tauber es Walter Hartl (Für Rothenburg).
La página web de Rothenburg ob der Tauber es http://www.rothenburg.de
Visitas destacadas
"Ob der Tauber" significa sobre el río Tauber. Al antiguo castillo -hoy inexistente- de Grafenburg oberhalb der Tauberde debe el topónimo la ciudad. La fortaleza fue destruida por un terremoto en 1356; sin embargo, el resto de la ciudad se conserva en perfectas condiciones. Un recorrido por su centro histórico nos devuelve la estampa de la Edad Media y el Renacimiento, con un pintoresco trazado urbanístico en el que destacan las torres de las iglesias, los baluartes y el “empaque” de sus casas. La plaza triangular de Plönlein es uno de los sitios más fotografiados de Alemania, con la Torre de Sieber situada tras ella está. Cada rincón del burgo antiguo se ha cuidado con mimo y hay cientos de edificios en un magnífico estado de conservación. La Baumeisterhaus es una hermosa mansión privada del Renacimiento. Aquí construyó su casa y trabajó el famoso arquitecto y escultor Leonard Weidmann. La casa Hegereiter, situada en medio de Spitalhofs - verdadero punto de atracción-, compone también un bello conjunto. Reconocible por su característica cúpula puntiaguda y su torre circular anexa: una de las postales de visita de Rothenburg... y esto solo es el aperitivo.
Son las dos plazas principales de la ciudad. La Plaza del Mercado es el centro neurálgico y lugar de referencia. Aquí se encuentra el ayuntamiento, un hermoso edificio de estilo gótico en la parte trasera y renacentista en su fachada delantera. El arquitecto local Leonhard Weidmann lo diseñó entre 1572-1578. Es probablemente el edificio más impresionante de esta época al norte de los Alpes. Subiendo por una escalera a 60 metros de altura se puede disfrutar de una panorámica completa de Rothenburg. En la Plaza del Mercado también se halla la Taberna de los Concejales, que estaba exclusivamente reservada a estas personalidades. Destaca el carrillón del reloj del edificio, una verdadera joya artesanal que muestra la historia de la cámara llamada Meistertrunk. La Hauptmarkt es una deliciosa plaza adornada con la fuente de San Jorge. En la plaza hay un conjunto de edificios, entre los que se encuentran das Fleisch-Und Tanzhaus (Casa de la Carne y el baile) y la Marienapotheke, una preciosa farmacia antigua. Aquí se celebra el día de Pascua un festival de múscia y danza -El día de los pastores- que recuerda la importante labor de estos durante la Edad Media, cuando el pueblo era un floreciente centro en el comercio de lana y de ganado ovino.
A pesar de su pequeño tamaño, Rothenburg tiene un buen número de museos. Entre ellos son especialmente recomendables: Museo medieval del crimen. Muestra en toda su extensión la crueldad empleada en La Edad Media para castigar "delitos y faltas" con todo tipo de instrumentos de tortura. Además reúne importantes documentos sobre sentencias y penas aplicadas. Por ejemplo a panaderos que escatimaban en el peso del pan, mujeres adúlteras, enfermos mentales... Un lugar que pone los pelos de punta.
www.kriminalmuseum.rothenburg.de
El Museo de la Ciudad Imperial está en un antiguo convento de monjas dominicas. El edificio en sí mismo merece la pena, pero el interior muestra coleccione muy valiosas. Destaca La Pasión de Rothenburg, de finales del siglo XV, doce figuras que muestran el martirio de Jesús, y las pinturas del inglés Arthur Wasse. La Colección Baumann es una importante muestra de armas y armaduras.
www.reichsstadtmuseum.info
El Museo de la Navidad Alemana. Está compuesto de cinco casas unidas entre sí, y en el centro de una plaza nevada que reproduce la de un Mercado de Franconia se eleva un abeto gigante. Las salas exponen multitud de artículos relacionados con la Navidad hechos en los más diversos materiales. www.weihnachtsmuseum.de Museo de Muñecas y Juguetes. Reúne una de las mejores exposiciones de juguetes de toda Europa. Dos siglos de la historia del juguete.
www.spielzeugmuseum.rothenburg.de
La Iglesia gótica de San Jacobo es la más importante de la ciudad. Comienza a construirse en 1311 y, dato curioso, el edificio se levanta mirando a la calle, en vez de hacerlo a una amplia plaza como es habitual. Cuenta con impresionantes altares de madera tallada, como el de San Luis de Tolosa, el de los Doce Nuncios, de Friedrich Herlin y, especialmente, el altar de la Santa Sangre de Tilman Riemenschneider. De este autor es también el altar de San Francisco, que se halla en la Iglesia de los Franciscanos. Otra de las joyas de Rothenburg y el templo más antiguo de la ciudad. Fue edificado en 1285, en los inicios del gótico. No se puede dejar de mencionar la Iglesia de Kobellzeller, que pertenece ya al gótico tardío. Está situada junto al Puente Doble, llamado así por su dos niveles de arcadas. Construido en el siglo XIV, asemeja a un acueducto romano. Esta junto al río, fuera de las murallas. La vista del conjunto arquitectónico desde aquí es impresionante.
El casco antiguo está rodeado por una muralla circular transitable con cuarenta y dos torres y numerosas puertas. El muro tiene nueve metros de altura, pero su longitud también se prolonga bajo tierra para evitar en el pasado el acceso al burgo mediante tuneles subterráneos enemigos. La primera fortificación fue construida en 1172 después de que Rothenburg recibiera los derechos de ciudad. Durante la II Guerra Mundial los bombardeos la dañaron gravemente. Su reconstrucción ha supuesto una importante financiación por parte del Estado alemán y también por las donaciones de particulares. Además de la muralla en sí, hay que mencionar los bastiones defensivos de la ciudad, baluartes pentagonales entre los que destacan el Bastión Klingen, junto a la Iglesia de San Wolfgang o de los Pastores. La Iglesia es una construcción defensiva con casamatas subterráneas y adarves. www.schaefertanzrothenburg.de El Bastión del Hospital es la más importante fortaleza de la ciudad, del siglo XVII, dispone de almenas y siete puertas. También se conserva su gran foso.
La muralla estaba guardada por infinidad de puertas-torre de las que se conservan muchas. Torre del Castillo. Por la puerta exterior, ornada con escudos de armas, se echaba brea contra el enemigo a través de la boca de una máscara decorativa -y como se puede ver- muy funcional. Puerta de Roeder. De principios de siglo XIV, se puede transitar y tiene pequeñas dependencias de los funcionarios de aduana y guardias. Arco de Roeder/ Torre de San Marcos. Construidos en la misma época que las primeras murallas de la ciudad, en torno al año 1200.
La Torre Blanca es del siglo XII. Junto a ella se encuentra lo que fue en el pasado el Salón de baile de la comunidad Judía.
La Puerta Kobolzeller es parte de una de las más interesantes construcciones defensivas de la ciudad, cuenta con almenas y antiguamente con cuatro puertas. Por último, la puerta del patíbulo da acceso al casco antiguo... y el resto ya se puede imaginar.
En el lugar que un día ocupo el castillo se extiende una maravillosa área ajardinada con distintos tipos de jardines. No hay que perderse los de estilo geométrico del siglo XVII-XVIII con estatuas que representan las cuatro estaciones y los cuatro elementos. Además, desde esta zona de la ciudad, se pueden disfrutar de unas vistas panorámicas de excepción: el valle del Tauber con el Puente Doble y la Iglesia Kobolzeller. Al fondo destaca una torre pintada de azul brillante, la Mansión del famoso Toppler, en su día poderoso alcalde de Rothenburg... Todo un espectáculo.
Rothenburg es la ciudad de las fuentes: hoy decoran plazas, pero en su día fueron importantes sistemas de suministro de agua en una ciudad con mucho movimiento comercial. Una de las más conocidas es la de San Jorge, construida en 1446. Tiene una enorme capacidad y desde hace más de 400 años está ornamentada con una columna coronada por San Jorge y el drágón... De ahí su nombre. Durante la Pascua de Semana Santa, se engalana con flores y huevos de colores, reviviendo una antigua tradición de la zona.
Extramuros de la ciudad, el río Tauber está jalonado por nada menos que 50 molinos, que dan fe de la importancia del agua desde el punto de vista económico durante la Edad Media y el Renacimiento. Se puede visitar el molino de piedra más antiguo, datado en el siglo XII, el Fuchsmühler, el romántico molino de agua que todavía está en funcionamiento o el Rossmuhler, el molino-fábrica que en la actualidad se ha reconvertido en moderno hotel. Una ruta para conocer estas interesantes construcciones es más que recomendable.
Más información: www.taubermuehlenweg.de
¿Cómo llegar?
En avión: Todos los aeropuertos están a más de 100 Km, con lo cual es obligado coger transporte público hasta Rothenburg, o mejor aún coche de alquiler. Aeropuerto de Múnich: Es el aeropuerto más lejano a Rothenburg, concretamente a 239 Km y más de 2 horas en coche. Pero aún así es el que más conexiones tiene desde España. Vuelan varias compañías como Vueling, Airberlin, Lufthansa o Iberia.
Aeropuerto de Stuttgart: A 1 hora y media y 167 Km de Rothenburg.Vuela Germanwings desde ciudades como Barcelona, Bilbao, Palma, Ibiza o Málaga.
Aeropuerto de Memmingen: Pequeño aeropuerto secundario a 177 Km y hora y media de camino de Rothenburg. Prácticamente todos los vuelos son de Ryanair que ha reflotado este antiguo aeropuerto militar. Se puede llegar desde Barcelona, Girona, Málaga, Palma, Valencia y Alicante.
En tren:
Desde Munich, con el Deutsch Bahn se tardan alrededor de 3 horas y cuarto y haciendo 3 transbordos. Desde Memmingen: 4 horas. Desde Stuttgart, 2:30 horas. Más información: http://www.raildude.com/ reiseauskunft.bahn.de
En coche: Ruta por carretera más corta por la A9 y A6 desde Múnich a Rothenburg ob der Tauber, la distancia es de 254 Km y la duración aproximada del viaje de 2 horas y 25 minutos.
Ruta por carretera más corta por la A6 desde Stuttgart a Rothenburg ob der Tauber, la distancia es de 149 Km y la duración aproximada del viaje de 1 hora y 32 minutos.
Presentación
Rothenburg ob der Tauber es la imagen típica de la Baviera medieval y romántica. Esta localidad alemana de casi 11.000 habitantes, situada junto al río Tauber, es un modelo tantas veces repetido en los cuentos centroeuropeos. Con sus encantadores edificios de entramado de madera, sus calles empedradas, su casco histórico rodeado de una muralla y lleno de plazas, torres, fuentes y bellos jardines, bien podría ser la ciudad natal de Hänsel y Gretel. De hecho, Rothenburg ob der Tauber ha sido el escenario de varias producciones de cine, además de servir como fuente de inspiración a la factoría Disney para la recreación del pueblo donde vivía Pinocho. Pertecene al distristo de Ansbach, en el estado federado de Baviera, Alemania, y hasta el año 1803 fue una Ciudad Imperial Libre. En la actualidad es un importante centro turístico, cuya mayor atracción es un centro histórico que nos remite al pasado.
La localidad de Rothenburg ob der Tauber pertenece (de mayor a menor) al estado Bayern, al condado Mittelfranken y al distrito Ansbach.
La localidad de Rothenburg ob der Tauber cubre 41,45 km². La altitud media es de 430 m.
El actual alcade de Rothenburg ob der Tauber es Walter Hartl (Für Rothenburg).
La página web de Rothenburg ob der Tauber es http://www.rothenburg.de
Visitas destacadas
"Ob der Tauber" significa sobre el río Tauber. Al antiguo castillo -hoy inexistente- de Grafenburg oberhalb der Tauberde debe el topónimo la ciudad. La fortaleza fue destruida por un terremoto en 1356; sin embargo, el resto de la ciudad se conserva en perfectas condiciones. Un recorrido por su centro histórico nos devuelve la estampa de la Edad Media y el Renacimiento, con un pintoresco trazado urbanístico en el que destacan las torres de las iglesias, los baluartes y el “empaque” de sus casas. La plaza triangular de Plönlein es uno de los sitios más fotografiados de Alemania, con la Torre de Sieber situada tras ella está. Cada rincón del burgo antiguo se ha cuidado con mimo y hay cientos de edificios en un magnífico estado de conservación. La Baumeisterhaus es una hermosa mansión privada del Renacimiento. Aquí construyó su casa y trabajó el famoso arquitecto y escultor Leonard Weidmann. La casa Hegereiter, situada en medio de Spitalhofs - verdadero punto de atracción-, compone también un bello conjunto. Reconocible por su característica cúpula puntiaguda y su torre circular anexa: una de las postales de visita de Rothenburg... y esto solo es el aperitivo.
Son las dos plazas principales de la ciudad. La Plaza del Mercado es el centro neurálgico y lugar de referencia. Aquí se encuentra el ayuntamiento, un hermoso edificio de estilo gótico en la parte trasera y renacentista en su fachada delantera. El arquitecto local Leonhard Weidmann lo diseñó entre 1572-1578. Es probablemente el edificio más impresionante de esta época al norte de los Alpes. Subiendo por una escalera a 60 metros de altura se puede disfrutar de una panorámica completa de Rothenburg. En la Plaza del Mercado también se halla la Taberna de los Concejales, que estaba exclusivamente reservada a estas personalidades. Destaca el carrillón del reloj del edificio, una verdadera joya artesanal que muestra la historia de la cámara llamada Meistertrunk. La Hauptmarkt es una deliciosa plaza adornada con la fuente de San Jorge. En la plaza hay un conjunto de edificios, entre los que se encuentran das Fleisch-Und Tanzhaus (Casa de la Carne y el baile) y la Marienapotheke, una preciosa farmacia antigua. Aquí se celebra el día de Pascua un festival de múscia y danza -El día de los pastores- que recuerda la importante labor de estos durante la Edad Media, cuando el pueblo era un floreciente centro en el comercio de lana y de ganado ovino.
A pesar de su pequeño tamaño, Rothenburg tiene un buen número de museos. Entre ellos son especialmente recomendables: Museo medieval del crimen. Muestra en toda su extensión la crueldad empleada en La Edad Media para castigar "delitos y faltas" con todo tipo de instrumentos de tortura. Además reúne importantes documentos sobre sentencias y penas aplicadas. Por ejemplo a panaderos que escatimaban en el peso del pan, mujeres adúlteras, enfermos mentales... Un lugar que pone los pelos de punta.
www.kriminalmuseum.rothenburg.de
El Museo de la Ciudad Imperial está en un antiguo convento de monjas dominicas. El edificio en sí mismo merece la pena, pero el interior muestra coleccione muy valiosas. Destaca La Pasión de Rothenburg, de finales del siglo XV, doce figuras que muestran el martirio de Jesús, y las pinturas del inglés Arthur Wasse. La Colección Baumann es una importante muestra de armas y armaduras.
www.reichsstadtmuseum.info
El Museo de la Navidad Alemana. Está compuesto de cinco casas unidas entre sí, y en el centro de una plaza nevada que reproduce la de un Mercado de Franconia se eleva un abeto gigante. Las salas exponen multitud de artículos relacionados con la Navidad hechos en los más diversos materiales. www.weihnachtsmuseum.de Museo de Muñecas y Juguetes. Reúne una de las mejores exposiciones de juguetes de toda Europa. Dos siglos de la historia del juguete.
www.spielzeugmuseum.rothenburg.de
La Iglesia gótica de San Jacobo es la más importante de la ciudad. Comienza a construirse en 1311 y, dato curioso, el edificio se levanta mirando a la calle, en vez de hacerlo a una amplia plaza como es habitual. Cuenta con impresionantes altares de madera tallada, como el de San Luis de Tolosa, el de los Doce Nuncios, de Friedrich Herlin y, especialmente, el altar de la Santa Sangre de Tilman Riemenschneider. De este autor es también el altar de San Francisco, que se halla en la Iglesia de los Franciscanos. Otra de las joyas de Rothenburg y el templo más antiguo de la ciudad. Fue edificado en 1285, en los inicios del gótico. No se puede dejar de mencionar la Iglesia de Kobellzeller, que pertenece ya al gótico tardío. Está situada junto al Puente Doble, llamado así por su dos niveles de arcadas. Construido en el siglo XIV, asemeja a un acueducto romano. Esta junto al río, fuera de las murallas. La vista del conjunto arquitectónico desde aquí es impresionante.
El casco antiguo está rodeado por una muralla circular transitable con cuarenta y dos torres y numerosas puertas. El muro tiene nueve metros de altura, pero su longitud también se prolonga bajo tierra para evitar en el pasado el acceso al burgo mediante tuneles subterráneos enemigos. La primera fortificación fue construida en 1172 después de que Rothenburg recibiera los derechos de ciudad. Durante la II Guerra Mundial los bombardeos la dañaron gravemente. Su reconstrucción ha supuesto una importante financiación por parte del Estado alemán y también por las donaciones de particulares. Además de la muralla en sí, hay que mencionar los bastiones defensivos de la ciudad, baluartes pentagonales entre los que destacan el Bastión Klingen, junto a la Iglesia de San Wolfgang o de los Pastores. La Iglesia es una construcción defensiva con casamatas subterráneas y adarves. www.schaefertanzrothenburg.de El Bastión del Hospital es la más importante fortaleza de la ciudad, del siglo XVII, dispone de almenas y siete puertas. También se conserva su gran foso.
La muralla estaba guardada por infinidad de puertas-torre de las que se conservan muchas. Torre del Castillo. Por la puerta exterior, ornada con escudos de armas, se echaba brea contra el enemigo a través de la boca de una máscara decorativa -y como se puede ver- muy funcional. Puerta de Roeder. De principios de siglo XIV, se puede transitar y tiene pequeñas dependencias de los funcionarios de aduana y guardias. Arco de Roeder/ Torre de San Marcos. Construidos en la misma época que las primeras murallas de la ciudad, en torno al año 1200.
La Torre Blanca es del siglo XII. Junto a ella se encuentra lo que fue en el pasado el Salón de baile de la comunidad Judía.
La Puerta Kobolzeller es parte de una de las más interesantes construcciones defensivas de la ciudad, cuenta con almenas y antiguamente con cuatro puertas. Por último, la puerta del patíbulo da acceso al casco antiguo... y el resto ya se puede imaginar.
En el lugar que un día ocupo el castillo se extiende una maravillosa área ajardinada con distintos tipos de jardines. No hay que perderse los de estilo geométrico del siglo XVII-XVIII con estatuas que representan las cuatro estaciones y los cuatro elementos. Además, desde esta zona de la ciudad, se pueden disfrutar de unas vistas panorámicas de excepción: el valle del Tauber con el Puente Doble y la Iglesia Kobolzeller. Al fondo destaca una torre pintada de azul brillante, la Mansión del famoso Toppler, en su día poderoso alcalde de Rothenburg... Todo un espectáculo.
Rothenburg es la ciudad de las fuentes: hoy decoran plazas, pero en su día fueron importantes sistemas de suministro de agua en una ciudad con mucho movimiento comercial. Una de las más conocidas es la de San Jorge, construida en 1446. Tiene una enorme capacidad y desde hace más de 400 años está ornamentada con una columna coronada por San Jorge y el drágón... De ahí su nombre. Durante la Pascua de Semana Santa, se engalana con flores y huevos de colores, reviviendo una antigua tradición de la zona.
Extramuros de la ciudad, el río Tauber está jalonado por nada menos que 50 molinos, que dan fe de la importancia del agua desde el punto de vista económico durante la Edad Media y el Renacimiento. Se puede visitar el molino de piedra más antiguo, datado en el siglo XII, el Fuchsmühler, el romántico molino de agua que todavía está en funcionamiento o el Rossmuhler, el molino-fábrica que en la actualidad se ha reconvertido en moderno hotel. Una ruta para conocer estas interesantes construcciones es más que recomendable.
Más información: www.taubermuehlenweg.de
¿Cómo llegar?
En avión: Todos los aeropuertos están a más de 100 Km, con lo cual es obligado coger transporte público hasta Rothenburg, o mejor aún coche de alquiler. Aeropuerto de Múnich: Es el aeropuerto más lejano a Rothenburg, concretamente a 239 Km y más de 2 horas en coche. Pero aún así es el que más conexiones tiene desde España. Vuelan varias compañías como Vueling, Airberlin, Lufthansa o Iberia.
Aeropuerto de Stuttgart: A 1 hora y media y 167 Km de Rothenburg.Vuela Germanwings desde ciudades como Barcelona, Bilbao, Palma, Ibiza o Málaga.
Aeropuerto de Memmingen: Pequeño aeropuerto secundario a 177 Km y hora y media de camino de Rothenburg. Prácticamente todos los vuelos son de Ryanair que ha reflotado este antiguo aeropuerto militar. Se puede llegar desde Barcelona, Girona, Málaga, Palma, Valencia y Alicante.
En tren:
Desde Munich, con el Deutsch Bahn se tardan alrededor de 3 horas y cuarto y haciendo 3 transbordos. Desde Memmingen: 4 horas. Desde Stuttgart, 2:30 horas. Más información: http://www.raildude.com/ reiseauskunft.bahn.de
En coche: Ruta por carretera más corta por la A9 y A6 desde Múnich a Rothenburg ob der Tauber, la distancia es de 254 Km y la duración aproximada del viaje de 2 horas y 25 minutos.
Ruta por carretera más corta por la A6 desde Stuttgart a Rothenburg ob der Tauber, la distancia es de 149 Km y la duración aproximada del viaje de 1 hora y 32 minutos.