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Deporte, bienestar y arte escultórico junto al lago
Millstatt está situada en un lugar muy bello: en península que se adentra en las aguas del lago Millstätter See. Muchos viajeros acuden a este lugar en invierno, con el objetivo de disfrutar de su pasión por la nieve y el deporte; desde Millstatt se accede rápidamente a las mejores estaciones de esquí de la región de Carintia. Muy cerca del centro de la ciudad se encuentra el barrio de Obermillstatt, con una pequeña pista de esquí perfecta para iniciarse en este vertiginoso deporte. Sin embargo, los esquiadores veteranos buscarán las ventajas que les ofrecen las áreas de Bad Kleinkirchheim, Katchsberg, Gerlitze, Nassfeld o Goldeck, todas ellas cerca de la localidad. Además, en Millstatt también hay una excelente oferta de entretenimiento y deporte para otras temporadas: la localidad dispone de un fantástico balneario-spa (Kärnten Badehaus, Kaiser-Franz-Josef-Str. 334) y de un campo de golf con preciosas vistas sobre el lago, situado en la Golfplatz, 1 (tarifa de green: 70 €). Por último, el proyecto Mille Statue ha llenado la ciudad de esculturas creadas por artistas de toda Europa, inspiradas en la leyenda del Duque Dominico, de quien se dice que arrojó al lago mil iconos paganos.
Un lago para admirar, caminar y nadar
Como tantos lagos alpinos, el Millstätter See ofrece muchas posibilidades de diversión a lo largo de todo el año. Esta extensión de agua cristalina tiene una profundidad máxima de 147 metros, que la convierte en el lago más hondo de la región de Carintia. Cubre una extensión de 1.328 hectáreas y es el origen de la famosa leyenda de la región que dio nombre a Millstatt y a los alrededores. Millstatt deriva del latín “mille statue”, mil estatuas. Cuenta la leyenda que el duque Dominico prometió convertirse al cristianismo si lograba encontrar el cuerpo de su hijo, ahogado en el lago. Tras drenar las aguas, el cadáver apareció y el duque cumplió su promesa. Tras convertirse arrojó a las aguas mil ídolos paganos, esculpidos en piedra, que poseía. Además de para recordar leyendas y mitos, las aguas del Millstätter See también son estupendas para bañarse durante el verano, ya que alcanzan temperaturas que rondan los 25 grados. Los amantes de la adrenalina pueden realizar esquí acuático, vela, windsurf…
El lago incluso cuenta con una zona nudista: la playa de Pesenthein (tel.: +43 (0)4766 2665).
Precio de entrada a la zona de baños: General, 5 €. Niños entre 14 y 17 años, 5 €. Niños de 6 a 13 años, 3 €.
Más información: Infocenter Millstätter See. www.millstaettersee.com
La espectacular abadía y los conciertos de verano
La ciudad de Millstatt es fácilmente reconocible por la estampa que ofrecen sus casas, con la impresionante abadía elevándose sobre ella. La Abadía de Millstatt (Stift Millstatt) se fundó allá por el siglo XI, siendo sus fundadores los monjes benedictinos. Actualmente el edificio conserva importantes estructuras de época románica pero también partes de épocas posteriores, como las torres coronadas por las clásicas cúpulas bulbosas (de estilo barroco). Entre los restos románicos que conserva el complejo religioso destaca sin duda su claustro, situado al sur de la iglesia. Algunos de los capiteles de este lugar datan del siglo XII. Las estructuras y las arcadas ubicadas al oeste y al sur del patio se edificaron en tiempos renacentistas. De la abadía parte un paseo que lleva por nombre El Camino de la Cruz, y que conduce a una bella capilla barroca: la Capilla de la Colina de la Caballería, construida por los jesuitas. Durante el verano, la Abadía de Millstatt acoge un importante evento musical: las Musikwochen Millstatt (Semanas Musicales de Millstatt), con numerosos conciertos que se celebran en la iglesia y que incluyen música sacra, coral, clásica, jazz y música de cámara.
Horario de apertura: Visitas guiadas a las 10:30 horas los miércoles y viernes. De mediados de septiembre a mayo no hay visitas guiadas.
Precios: Visita guiada en alemán: general, 5 €. Niños, 2,50 €.
El Museo de la Abadía, una colección histórica
La Abadía de Millstatt no solo es interesante por su impresionante arquitectura, su ubicación o los conciertos que ofrece durante el verano. En ella también hay un magnífico museo que merece una visita. Se trata del Millstatt Stiftsmuseum (Stiftgasse, 1), en cuyo interior se puede realizar un completo recorrido por la historia de la ciudad y de la región, admirando al mismo tiempo todo tipo de piezas relacionadas con ella. En la colección se exhiben objetos hallados en excavaciones, que datan de tiempos prehistóricos; concretamente, de los siglos que van desde el Neolítico a la época paleocristiana. El monasterio también conserva manuscritos procedentes de su scriptorium y piezas de la época jesuita. La ruta por el museo contempla además la visita a una cárcel del siglo XVI. Y por si fuera poco, una de las salas se puede visitar una exposición sobre la industria de la minería de la Alta Carintia, con una amplia muestra de minerales.
Horario: De principios de mayo hasta septiembre, de 10:00 a 12:00 y de 14:00 a 18:00 horas.
Precio de la entrada: General, 2,5 €. Niños, 1,5 €.
Tel.: +43 6246 750 35
Más información: www.stifsmuseum.at
Un paisaje salpicado de iglesias románicas
La región de Carintia fue un punto muy importante para la religión cristiana, durante la Edad Media. Prueba de ello es la presencia de templos tan impresionantes como la Abadía de Millstatt, pero también de muchas pequeñas iglesias distribuidas por toda la región. Sin ir más lejos, en el distrito de Obermillstatt (que significa “sobre Millstatt”) se encuentra la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista, que fue edificada por primera vez en el siglo XIII. El templo actual data del año 1614 y muestra un estilo plenamente barroco. La iglesia llama la atención por su alta torre, coronada por la clásica cúpula bulbosa. Saliendo de Millstatt, muy cerca (en Matzelsdorf) se encuentra la Iglesia de Peregrinación de Maria Schnee, que conserva una impresionante bóveda de estilo gótico tardío, así como frescos del siglo XVIII y una talla de principios del siglo XVI. Además, cerca de Laubendorf todavía se pueden visitar los restos de una pequeña iglesia paleocristiana del siglo V; en el lugar donde estuvo el altar hay un antiguo relicario, cubierto por una tumba de época romana. Probablemente, esta iglesia fue el escondite donde se refugió la diócesis de la cercana Tiburnia durante los últimos años del Imperio Romano.
Spittal an der Drau: de todo y para todos
La ciudad de Spittal an der Drau es la más importante de la región, pero no por ello ha perdido su carácter rural y pintoresco. Lo mejor de esta localidad es que tiene una enorme oferta de ocio para todos los gustos: desde los que buscan historia y arte, hasta quienes adoran el deporte. Desde Spittal an der Drau se llega rápidamente hasta las pistas de esquí del Goldeck y otras magníficas estaciones, pero en su casco urbano también se puede nadar en invierno y en verano gracias a su piscina cubierta, así como disfrutar de los deportes de hielo en su centro deportivo. Tiendas de todo tipo, cines y una gastronomía fantástica (representativa de la región de Carintia) esperan al visitante en esta animada localidad.
La mejor panorámica, desde una antigua capilla
Los alrededores de Millstatt ofrecen multitud de posibilidades de admirar los paisajes alpinos más hermosos. Por ejemplo, podemos acercarnos hasta Maria in Hohenburg, una pequeña iglesia de color blanco que se alza sobre el valle de Lurnfeld, entre Spittal an der Drau y Möllbrücke. La ubicación de este templo, a 974 metros sobre el nivel del mar, hace que desde su emplazamiento se divisen las panorámicas más espectaculares. La iglesia data del siglo XVII y su estética es barroca. Su nombre, “María del Castillo Alto”, se debe a que en el mismo paraje se conservan las ruinas de unas antiguas fortificaciones.
Monte Mirnock, una cumbre mística y sagrada
El Monte Mirnock es un pico venerado por su tradición sagrada y legendaria, que se remonta a épocas anteriores a la cristianización. El monte tiene una altitud de 2.116 metros sobre el nivel del mar y es conocido como “La Montaña Mística”, ya que se cree que está cruzado por dos líneas de energía o líneas geománticas: la Kloster y la Kult. A lo largo de la ruta que asciende a su cima se pasa por un árbol sagrado con siete troncos, un jardín de hierbas y un menhir paleolítico; también se puede escuchar el “órgano de viento” situado en el cercano Monte Palnock.
Möllbrücke y Lurnfeld: iglesias y castillos
Cerca de Millstatt hay dos pequeños pueblos en los que se pueden encontrar interesantes vestigios del pasado. Por ejemplo, en Möllbrücke podemos visitar la iglesia parroquial dedicada a San Leonardo, que data de finales del siglo XVI. Además, en la localidad de Lurnfeld se alza el Castillo Drauhofen, una fortificación de tres plantas construida entre los siglos XVI y XVII. En la actualidad, el castillo acoge una institución de enseñanza. En su interior destaca la capilla de la torre norte, cuyos techos están decorados con estucos del siglo XVII que representan a los Evangelistas, la Anunciación y un escudo de armas.
Redactor :
Anne Chabot
