Presentación
La ciudad china de Suzhou es uno de las más turísticas del país. Y no es extraño, ya que se trata de una urbe tranquila, cuya antigua historia la dota de numerosos lugares de interés que visitar. Se localiza en la provincia de Jiangsu, junto al río Yangzi, y tiene unos 10 millones de habitantes contabilizados en el año 2010. La mejor época para visitar la ciudad es en primavera u otoño, ya que los inviernos son extremadamente fríos y los veranos muy calurosos. Uno de los mayores encantos de Suzhou son sus impresionantes jardines clásicos, que fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.
La localidad de Suzhou City pertenece (de mayor a menor) a la provincia Jiangsu y al condado Suzhou City.
Visitas destacadas
Son varios los templos interesantes que posee Suzhou, algunos de ellos muy importantes. Como la Pagoda del Norte, muy conocida en la ciudad. Data de los tiempos de la dinastía Song y tiene una altura de 76 metros repartidos en nueve pisos. Está rodeada de un precioso jardín. Pero el templo más relevante desde un punto de vista turístico es el Templo Hanshan, que fue edificado entre los años 502 y 519. Debe su nombre a Han Shan, un monje de la dinastía Tan. Sin embargo, el templo que puede verse en la actualidad es el resultado de los muchos procesos de destrucción y reconstrucción que ha sufrido la construcción a lo largo de los siglos. Además de los templos ya mencionados, merece la pena visitar la Pagoda de la Colina del Tigre, de 47 metros de altura, construida en la cima de esta colina en el siglo X. Cuenta la leyenda que en ese lugar está enterrado el rey He Lu, al que se atribuye la fundación de la ciudad de Suzhou. Se dice que, al poco tiempo de dar sepultura al rey, un tigre blanco apareció en la colina, quizás para proteger la tumba.
Una de las características que define a la ciudad de Suzhou es la gran cantidad de jardines que posee, y lo maravillosos que son éstos. De hecho, la Unesco los declaró Patrimonio de la Humanidad en 1997. Se trata de jardines chinos de arquitectura clásica, en los que están presentes elementos como las rocas, el agua, la vegetación y pequeñas construcciones tradicionales. Uno de los más destacados, si no el que más, es el Jardín del Administrador Humilde o Zhuoizheng Yuan, con cerca de 5 hectáreas de terreno (localizado en la calle del Noroeste, 170). Fue construido en el siglo XVI durante la dinastía Ming y pertenecía a un alto funcionario. Además de una gran cantidad de plantas, incluye lagos y algunos pabellones de arquitectura tradicional. Está formado por el parque Oriental, el Occidental y el Central, siendo este último el sector principal del jardín, con una gran piscina llena de flores de loto y rodeada de pabellones y torres. Hay recorridos guiados gratuitos por el jardín cada 10 minutos, aunque sólo están disponibles en chino.
Horario: todos los días, de 7:00 a 17:30 h.
Precio: entradas, de 6 a 8,50 €.
El encanto de una ciudad como Suzhou nos asalta a cada paso que damos. Por eso, además de visitar sus monumentos y lugares de interés, resulta muy interesante recorrer sus calles, sobre todo las más emblemáticas y pintorescas. Una de ellas es Ping Jiang Road, uno de los lugares de la ciudad más agradables para pasear. Merece la pena recorrerla admirando sus edificios de arquitectura tradicional. Se trata de un camino empedrado con siglos de antigüedad, en el que parece haberse detenido el tiempo. Las tiendas que lo flanquean también conservan ese estilo del pasado, aunque también hay establecimientos actuales. Otra de las calles que hay que recorrer sin falta en Suzhou es Shan Tang Jie, que hace gala de tener más de 1.500 años de antigüedad. Es una calle que discurre junto a uno de los canales de la ciudad, repleta de edificios antiguos muchos de los cuales han sido restaurados. Resulta realmente encantador recorrerla de arriba a abajo, parándose en alguno de sus cafés y tiendas recoletas. Al llegar al tramo que se extiende al suroeste, se advierte un gran aumento en la cantidad de turistas, pero el resto de la calle es más tranquilo y agradable.
Otro de los parques emblemáticos de Suzhou es el Jardín del Pescador o Wangshi Yuan, construido durante la dinastía Song. Aunque no es demasiado grande (ocupa un terreno de 0,6 hectáreas), resulta espectacular gracias a su belleza y a sus proporciones perfectas. Incluye un estanque decorado con una gran variedad de plantas, rocas y puentes de piedra. Se trata de un jardín privado, que incluye también el edificio residencial. Por la noche, el Jardín del Pescador se ilumina con un sinfín de faroles que crean una atmósfera mágica. Suelen celebrarse actuaciones de Ópera Kunqu, tradicional de Suzhou, que consiste en un espectáculo de canto y baile popular. Estos espectáculos tienen lugar al caer la tarde, en los meses de primavera y verano, y son un auténtico reclamo para los turistas que desean conocer el jardín. Visitarlo por la noche cobra, de este modo, una relevancia especial.
Y para completar nuestro periplo por la ciudad, nada como programar una visita cultural al Museo Suzhou. Es uno de los más relevantes y posee una interesante colección de obras de arte. El edificio, en sí mismo, ya merece la pena, puesto que mezcla la arquitectura tradicional con elementos modernos y grandes jardines. Después, ya en el interior, es posible contemplar numerosas piezas antiguas, desde pinturas, artesanía e incluso, documentos antiguos de artística caligrafía. El museo consta de dos edificios diferenciados: la Mansión del Príncipe, o Zhoing Wang Fu, y el Edificio Nuevo, que se proyectó como una ampliación del museo y que hoy tiene una gran importancia. La Mansión del Príncipe es un ejemplo de la mejor arquitectura del periodo de la Rebelión Taiping (que tuvo lugar entre 1851 y 1864). Allí se guardan más de 400 pinturas, nueve de las cuales son impresionantes murales, y un gran número de paneles tallados. Está rodeado por un magnífico jardín en el que no faltan las corrientes de agua y los puentes, las rocas y las plantas, tal y como es tradicional en los jardines de Suzhou.
Horario: de martes a domingo, de 9:00 a 17:00 h. Lunes cerrado.
Precio: entrada gratuita.
Situada entre Shanghai y Suzhou (a 51 km. de ésta última), la antigua ciudad de Zhouzhuang se localiza en la provincia de Jiangsu, y es famosa por la gran abundancia de ríos y lagos que posee. Tiene más de nueve siglos de antigüedad, con numerosos edificios que datan de las dinastías Ming y Oing, lo que hace muy interesante su visita. Pero lo que realmente dota a Zhouzhuang de una belleza inusual son las magníficas vistas de sus lagos, de sus vías acuáticas y de los puentes de piedra que se han construido sobre ellas, algunos realmente antiguos. Destacan los Puentes Gemelos, el puente Fu’an, el Zhenfeng y el Fuhong.
Es otra de las ciudades antiguas que merece la pena conocer. Resulta muy interesante programar una excursión desde Suzhou, ya que Tongli está a tan solo 18 km., en la orilla este del lago Taihu. Resulta el lugar perfecto para descubrir la cultura tradicional china. Y es que esta ciudad, antiguamente llamada Fushi, posee una historia de más de 1.000 años. Allí se pueden encontrar verdaderos tesoros, como sus 49 puentes de piedra, cada uno en un estilo diferente, que se diseminan por toda la ciudad y que conectan las diferentes islas creadas por los ríos (unos 15, nada menos) y lagos (son cinco) que posee Tongli. Así, el paisaje de la ciudad queda profundamente marcado por el agua.
Al sur del río Yangtze se localiza la ciudad antigua de Mudu, al suroeste de Suzhou (y a una distancia de 8 km.). Es un enclave en el que se pueden admirar maravillosos paisajes naturales, en un terreno de cerca de 35 kilómetros cuadrados. Con una larga historia de muchísimos siglos, Mudu es una población muy interesante, que posee una arquitectura tradicional especial, además de muchísimos jardines de destacado valor paisajístico como el Jardín de Yan o Xian Yuan, que posee varias construcciones arquitectónicas destacadas.
Este pintoresco lago se sitúa al sureste de Suzhou (a una distancia de 8 km.) y es un buen lugar para planear una excursión, si lo que se desea es disfrutar de un entorno natural especial, repleto de hermosos paisajes. Se localiza junto a la Montaña Shangfang, un Parque Forestal Nacional. En la antigüedad el lago Shihu era una especie de bahía del lago Taihu, aunque el paso de los siglos lo ha convertido en el lago que es actualmente. Recibe su nombre de la característica cama de piedra que posee el lago. Uno de sus encantos reside en que está rodeado por templos antiguos, torres, enterramientos y tumbas que hacen mucho más interesante su visita.
¿Cómo llegar?
- Por carretera: en función del punto de partida, puede resultar práctico llegar a Suzhou por carretera. La ciudad está conectada a la autopista Nanjing-Shanghai, aunque otra alternativa es llegar por la autopista Yangtze.
- En avión: el Aeropuerto Internacional Sunan Shuofang, compartido por las ciudades de Suzhou y Wuxi, se localiza a tan solo 22 km. del centro. Dada su cercanía, se convierte en la mejor alternativa para llegar a Suzhou, en especial si se viaja desde el extranjero. Otras opciones son el Aeropuerto Internacional de Pudong (a 120 km.) y el Aeropuerto de Hongqiao - Shanghai (a 86 km.).
- En autobús: la ciudad cuenta con tres estaciones de autobús: la Estación Sur, la más grande y moderna; la Estación del Norte y la Estación del Oeste. Desde cualquiera de ellas Suzhou queda perfectamente conectada por autobús con las ciudades más importantes del país.
- En tren: Suzhou se localiza en plena línea Shanghai-Nanjing. Cuenta con una gran estación de tren al norte de la ciudad, donde también tiene una parada la línea de alta velocidad Beijing-Shanghai. Desde Shanghai los trenes tardan 25 minutos en llegar a Suzhou (el billete cuesta 8,75 €).
- Transporte público y taxis: la ciudad cuenta con un buen sistema de metro, inaugurado en el año 2012, que cuenta únicamente con dos líneas, aunque se pretende ampliar en el futuro. La mejor opción para moverse por la ciudad es utilizar la red de autobuses, ya que son baratos y eficaces (el billete cuenta entre 0,15 y 0,25 €). Los taxis son otra opción (el precio inicial es de 1,21 € por los primeros 3 km., más 0,22 € por cada 3 km. de trayecto). Alquilar una bicicleta es otra idea, pues es un medio de transporte muy común en Suzhou (desde 3,60 € al día).
Presentación
La ciudad china de Suzhou es uno de las más turísticas del país. Y no es extraño, ya que se trata de una urbe tranquila, cuya antigua historia la dota de numerosos lugares de interés que visitar. Se localiza en la provincia de Jiangsu, junto al río Yangzi, y tiene unos 10 millones de habitantes contabilizados en el año 2010. La mejor época para visitar la ciudad es en primavera u otoño, ya que los inviernos son extremadamente fríos y los veranos muy calurosos. Uno de los mayores encantos de Suzhou son sus impresionantes jardines clásicos, que fueron declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1997.
La localidad de Suzhou City pertenece (de mayor a menor) a la provincia Jiangsu y al condado Suzhou City.
Visitas destacadas
Son varios los templos interesantes que posee Suzhou, algunos de ellos muy importantes. Como la Pagoda del Norte, muy conocida en la ciudad. Data de los tiempos de la dinastía Song y tiene una altura de 76 metros repartidos en nueve pisos. Está rodeada de un precioso jardín. Pero el templo más relevante desde un punto de vista turístico es el Templo Hanshan, que fue edificado entre los años 502 y 519. Debe su nombre a Han Shan, un monje de la dinastía Tan. Sin embargo, el templo que puede verse en la actualidad es el resultado de los muchos procesos de destrucción y reconstrucción que ha sufrido la construcción a lo largo de los siglos. Además de los templos ya mencionados, merece la pena visitar la Pagoda de la Colina del Tigre, de 47 metros de altura, construida en la cima de esta colina en el siglo X. Cuenta la leyenda que en ese lugar está enterrado el rey He Lu, al que se atribuye la fundación de la ciudad de Suzhou. Se dice que, al poco tiempo de dar sepultura al rey, un tigre blanco apareció en la colina, quizás para proteger la tumba.
Una de las características que define a la ciudad de Suzhou es la gran cantidad de jardines que posee, y lo maravillosos que son éstos. De hecho, la Unesco los declaró Patrimonio de la Humanidad en 1997. Se trata de jardines chinos de arquitectura clásica, en los que están presentes elementos como las rocas, el agua, la vegetación y pequeñas construcciones tradicionales. Uno de los más destacados, si no el que más, es el Jardín del Administrador Humilde o Zhuoizheng Yuan, con cerca de 5 hectáreas de terreno (localizado en la calle del Noroeste, 170). Fue construido en el siglo XVI durante la dinastía Ming y pertenecía a un alto funcionario. Además de una gran cantidad de plantas, incluye lagos y algunos pabellones de arquitectura tradicional. Está formado por el parque Oriental, el Occidental y el Central, siendo este último el sector principal del jardín, con una gran piscina llena de flores de loto y rodeada de pabellones y torres. Hay recorridos guiados gratuitos por el jardín cada 10 minutos, aunque sólo están disponibles en chino.
Horario: todos los días, de 7:00 a 17:30 h.
Precio: entradas, de 6 a 8,50 €.
El encanto de una ciudad como Suzhou nos asalta a cada paso que damos. Por eso, además de visitar sus monumentos y lugares de interés, resulta muy interesante recorrer sus calles, sobre todo las más emblemáticas y pintorescas. Una de ellas es Ping Jiang Road, uno de los lugares de la ciudad más agradables para pasear. Merece la pena recorrerla admirando sus edificios de arquitectura tradicional. Se trata de un camino empedrado con siglos de antigüedad, en el que parece haberse detenido el tiempo. Las tiendas que lo flanquean también conservan ese estilo del pasado, aunque también hay establecimientos actuales. Otra de las calles que hay que recorrer sin falta en Suzhou es Shan Tang Jie, que hace gala de tener más de 1.500 años de antigüedad. Es una calle que discurre junto a uno de los canales de la ciudad, repleta de edificios antiguos muchos de los cuales han sido restaurados. Resulta realmente encantador recorrerla de arriba a abajo, parándose en alguno de sus cafés y tiendas recoletas. Al llegar al tramo que se extiende al suroeste, se advierte un gran aumento en la cantidad de turistas, pero el resto de la calle es más tranquilo y agradable.
Otro de los parques emblemáticos de Suzhou es el Jardín del Pescador o Wangshi Yuan, construido durante la dinastía Song. Aunque no es demasiado grande (ocupa un terreno de 0,6 hectáreas), resulta espectacular gracias a su belleza y a sus proporciones perfectas. Incluye un estanque decorado con una gran variedad de plantas, rocas y puentes de piedra. Se trata de un jardín privado, que incluye también el edificio residencial. Por la noche, el Jardín del Pescador se ilumina con un sinfín de faroles que crean una atmósfera mágica. Suelen celebrarse actuaciones de Ópera Kunqu, tradicional de Suzhou, que consiste en un espectáculo de canto y baile popular. Estos espectáculos tienen lugar al caer la tarde, en los meses de primavera y verano, y son un auténtico reclamo para los turistas que desean conocer el jardín. Visitarlo por la noche cobra, de este modo, una relevancia especial.
Y para completar nuestro periplo por la ciudad, nada como programar una visita cultural al Museo Suzhou. Es uno de los más relevantes y posee una interesante colección de obras de arte. El edificio, en sí mismo, ya merece la pena, puesto que mezcla la arquitectura tradicional con elementos modernos y grandes jardines. Después, ya en el interior, es posible contemplar numerosas piezas antiguas, desde pinturas, artesanía e incluso, documentos antiguos de artística caligrafía. El museo consta de dos edificios diferenciados: la Mansión del Príncipe, o Zhoing Wang Fu, y el Edificio Nuevo, que se proyectó como una ampliación del museo y que hoy tiene una gran importancia. La Mansión del Príncipe es un ejemplo de la mejor arquitectura del periodo de la Rebelión Taiping (que tuvo lugar entre 1851 y 1864). Allí se guardan más de 400 pinturas, nueve de las cuales son impresionantes murales, y un gran número de paneles tallados. Está rodeado por un magnífico jardín en el que no faltan las corrientes de agua y los puentes, las rocas y las plantas, tal y como es tradicional en los jardines de Suzhou.
Horario: de martes a domingo, de 9:00 a 17:00 h. Lunes cerrado.
Precio: entrada gratuita.
Situada entre Shanghai y Suzhou (a 51 km. de ésta última), la antigua ciudad de Zhouzhuang se localiza en la provincia de Jiangsu, y es famosa por la gran abundancia de ríos y lagos que posee. Tiene más de nueve siglos de antigüedad, con numerosos edificios que datan de las dinastías Ming y Oing, lo que hace muy interesante su visita. Pero lo que realmente dota a Zhouzhuang de una belleza inusual son las magníficas vistas de sus lagos, de sus vías acuáticas y de los puentes de piedra que se han construido sobre ellas, algunos realmente antiguos. Destacan los Puentes Gemelos, el puente Fu’an, el Zhenfeng y el Fuhong.
Es otra de las ciudades antiguas que merece la pena conocer. Resulta muy interesante programar una excursión desde Suzhou, ya que Tongli está a tan solo 18 km., en la orilla este del lago Taihu. Resulta el lugar perfecto para descubrir la cultura tradicional china. Y es que esta ciudad, antiguamente llamada Fushi, posee una historia de más de 1.000 años. Allí se pueden encontrar verdaderos tesoros, como sus 49 puentes de piedra, cada uno en un estilo diferente, que se diseminan por toda la ciudad y que conectan las diferentes islas creadas por los ríos (unos 15, nada menos) y lagos (son cinco) que posee Tongli. Así, el paisaje de la ciudad queda profundamente marcado por el agua.
Al sur del río Yangtze se localiza la ciudad antigua de Mudu, al suroeste de Suzhou (y a una distancia de 8 km.). Es un enclave en el que se pueden admirar maravillosos paisajes naturales, en un terreno de cerca de 35 kilómetros cuadrados. Con una larga historia de muchísimos siglos, Mudu es una población muy interesante, que posee una arquitectura tradicional especial, además de muchísimos jardines de destacado valor paisajístico como el Jardín de Yan o Xian Yuan, que posee varias construcciones arquitectónicas destacadas.
Este pintoresco lago se sitúa al sureste de Suzhou (a una distancia de 8 km.) y es un buen lugar para planear una excursión, si lo que se desea es disfrutar de un entorno natural especial, repleto de hermosos paisajes. Se localiza junto a la Montaña Shangfang, un Parque Forestal Nacional. En la antigüedad el lago Shihu era una especie de bahía del lago Taihu, aunque el paso de los siglos lo ha convertido en el lago que es actualmente. Recibe su nombre de la característica cama de piedra que posee el lago. Uno de sus encantos reside en que está rodeado por templos antiguos, torres, enterramientos y tumbas que hacen mucho más interesante su visita.
¿Cómo llegar?
- Por carretera: en función del punto de partida, puede resultar práctico llegar a Suzhou por carretera. La ciudad está conectada a la autopista Nanjing-Shanghai, aunque otra alternativa es llegar por la autopista Yangtze.
- En avión: el Aeropuerto Internacional Sunan Shuofang, compartido por las ciudades de Suzhou y Wuxi, se localiza a tan solo 22 km. del centro. Dada su cercanía, se convierte en la mejor alternativa para llegar a Suzhou, en especial si se viaja desde el extranjero. Otras opciones son el Aeropuerto Internacional de Pudong (a 120 km.) y el Aeropuerto de Hongqiao - Shanghai (a 86 km.).
- En autobús: la ciudad cuenta con tres estaciones de autobús: la Estación Sur, la más grande y moderna; la Estación del Norte y la Estación del Oeste. Desde cualquiera de ellas Suzhou queda perfectamente conectada por autobús con las ciudades más importantes del país.
- En tren: Suzhou se localiza en plena línea Shanghai-Nanjing. Cuenta con una gran estación de tren al norte de la ciudad, donde también tiene una parada la línea de alta velocidad Beijing-Shanghai. Desde Shanghai los trenes tardan 25 minutos en llegar a Suzhou (el billete cuesta 8,75 €).
- Transporte público y taxis: la ciudad cuenta con un buen sistema de metro, inaugurado en el año 2012, que cuenta únicamente con dos líneas, aunque se pretende ampliar en el futuro. La mejor opción para moverse por la ciudad es utilizar la red de autobuses, ya que son baratos y eficaces (el billete cuenta entre 0,15 y 0,25 €). Los taxis son otra opción (el precio inicial es de 1,21 € por los primeros 3 km., más 0,22 € por cada 3 km. de trayecto). Alquilar una bicicleta es otra idea, pues es un medio de transporte muy común en Suzhou (desde 3,60 € al día).