Visitas destacadas
Una ciudad a ritmo lento
Al oeste de Palma de Mallorca, la actual Palmanova ocupa la zona conocida como Son Caliu, pensada allá por 1934 como ciudad-jardín. El proyecto urbanístico se retomó en los años 70 edificando la zona residencial que es hoy y que colinda con la localidad de Magaluf -una calle separa una localidad de la otra-. Estas dos, como el resto de las que forman el municipio, están perfectamente comunicadas con la capital mediante un servicio de autobuses que pasan con mucha frecuencia. El Paseo Calviá, construido hace unos diez años, es un amplio carril peatonal que también conecta las distintas zonas de Calviá con la ciudad de Palma. Este verdadero anillo verde permite a caminantes, corredores y ciclistas hacer deporte sin el ruido del tráfico cercano y de manera relajada. La población de Palmanova es de unos 7.000 habitantes (censo de 2011), pero este número se triplica durante los meses de verano, aunque sigue siendo un lugar tranquilo, con un turismo familiar. Sin embargo en Magaluf concentra cientos de jóvenes llegados de muchos puntos de Europa en busca de sol, playa y juerga, que situan su zona de acción principalmente en la denominada Punta Ballena. No hay problema: tanto si se desea paz y sosiego, como si se prefiere marcha nocturna basta con cruzar la calle.
Playas con Bandera Azul
Tres son las playas con que cuenta Palmanova. Magníficas playas de arena blanca y fina que han merecido por su calidad y servicios ser distinguidas con Bandera Azul. Todas tienen duchas, WC y lavapiés. Es Carregador: Está al este del Paseo del Mar de la ciudad, entre el Club Náutico y Punta Marroig. Palmanova: Se extiende desde este lugar -Punta Marroig- hasta Punta Nadala. Es la única playa de la costa balear distinguida con la Q de Calidad. Su oferta de servicios es muy completa y dispone de una zona de 100 m2 para facilitar el acceso a personas con problemas de movilidad o discapacitación: pasarelas, sillas anfibias, muletas, todos, WC adaptados, etc. Son Matias: Es la playa más abierta. Desde la Punta Nadala y la península de Torrenova. En cuanto a la vecina Magaluf, su playa es la más larga y animada de la zona. Ya fuera de ambos núcleos de población están las pequeñas calas Son Caliu, a unos 3 km de Palmanova, y Cala Viñas, a 1 km de Magaluf. Siguiendo la carretera costera hasta Santa Ponsa se llega a tres calitas de aguas cristalinas. En una de ella, La Playa del Mago, se practica el turismo.
El paseo marítimo y Puerto Portals
El paseo marítimo sigue la línea paralela a lo largo de la playa y es, sin duda, el centro neurálgico de la ciudad. Es un recorrido que invita al relax, al paseo sosegado entre zonas verdes y bulevares. También es un fantástico lugar de encuentro, de observación de la gente que va y viene, de charla con amigos y familia. En cuanto al Puerto Portals, es un lugar mundialmente famoso por ser importante centro de la práctica de deportes naúticos. Cuenta con nada menos que 639 amarres donde se pueden ver yates de gran calado, veleros, catamaranes, lanchas motoras... Está a poco más de diez minutos del centro de Palmanova y alrededor del mismo hay gran cantidad de restaurantes que ofrecen la sabrosa gastronomía de la isla y muchas de las especialidades internacionales. Nada hay más placentero que comer o cenar en una de las terrazas al aire libre con los barcos anclados reflejándose en el agua.
Los pueblos del municipio
Illetas, Portals Nous, Palmanova, Magaluf, Santa Ponsa y Paguera son algunas de las localidades más turísticas del municipio de Calviá. Illetas es un pequeño resort cerca de Portals Nous, considerada como una de las mejores zonas de Mallorca. Un lugar bastante exclusivo, cuya apariencia recuerda a la pequeña Montecarlo y sus precios, también. El encanto de Illetas radica en que sigue siendo un lugar poco masificado con una playa de arena y rocas ideal para practicar el snorkel.
Santa Ponsa es un popular centro vacacional para familias gracias a su abrigada bahía de aguas poco profundas. De gran importancia en la historia de Mallorca, aquí el rey Jaime I inició la reconquista de la isla a manos de los musulmanes, que la habían ocupado durante más de 300 años. De Portals, lo más destacado es su puerto, del que ya se ha hablado, y en cuanto a Peguera, hay que hacer mención a sus tres maravillosas playas y su cercanía al lujoso puerto deportivo de Andratx. Las localidades de interior también merecen una visita. Aún conservan el encanto de las pequeñas poblaciones e interesantes monumentos y restos arqueológicos.
Ocio de invierno
Todo el municipio de Calviá basa su economía en el sector turístico y apenas sobreviven algunos pocos reductos de producción agrícola o ganadera. La infraestrutura turística es una de las más importantes en Europa, lo que permite ofrecer una amplia oferta en cuanto a instalaciones hoteleras y servicios complementarios, como el ocio o el deporte. Ciclismo, golf, fútbol, tenis se pueden practicar en las instalaciones de Palmanova-Magaluf, que cuenta con tres campos de golf, además de pistas de atletismo, campos de fútbol de césped natural, campo de rugby, etc. Si no se es muy deportista, también hay posibilidad de realizar actividades culturales o al aire libre, incluso en invierno. La asociación de hoteleros de Palmanova y Magaluf pone en marcha el programa “Calviá Invierno Europeo”, dirigido especialmente a los “más mayores”, en el que se ofrece al turismo que se aloja en sus establecimientos una variada y completa oferta para el tiempo libre totalmente gratuita. El programa no puede ser más apetecible: visitas a los distintos pueblos, museos, santuarios y monasterios, bodegas... así como excursiones por los alrededores de Palmanova para conocer su entorno natural, con sencillas rutas de senderismo, observación de aves, etc.
Un crucero en catamarán
Surcar las aguas de un mar tranquilo y cálido como el Mediterráneo es un lujo al alcance de cualquiera que disfrute con el mar y la navegación. En Palmanova hay distintos embarcaderos desde los que operan empresas que ofrecen excursiones en barco para disfrutar en familia con el paseo y conocer mejor la zona, sus fondos marinos y su rica variedad ornitológica. Pero, si se prefiere más independencia para navegar varios días, también se puede alquilar un barco (con o sin patrón).
En las oficinas de turismo y en el club náutico de Palmanova facilitan información y contactos.
Mercados típicos
No hay mayor colorido que el de un mercadillo al aire libre. Puestos de ropa, de frutas y verduras, de flores, calzado, artesanía, cuero... El mercado más típico y de mayor antigüedad se celebra cada lunes en Calviá pueblo. Otro mercado semanal es el de la zona de Son Ferrer los viernes. Y también merecen una visita los de la cercana Andratx y el de Sóller, una pintoresca localidad a pocos kilómetros de Palmanova que se puede visitar en un día. No hay que dejar de subir en el tren antiguo, que hace un recorrido turístico hasta Palma atravesando espectaculares paisajes serranos.
Fiestas y festivales
El alma mediterránea es expansiva y alegre y eso se demuestra en su cultura popular, en su música y en sus distintas celebraciones. Durante todo el año hay infinidad de ellos, pero las más populares tienen lugar en los meses más cálidos.
En mayo se celebra el Festival de Primavera de Palmanova-Magaluf, con fuego y color a cargo de los “Correfocs” y en los que se dan cita la pólvora, la música y los demonios.
El día del turista es en septiembre. El programa de eventos abarca un interesante abanico de propuestas culturales y musicales.
Palma de Mallorca
Bien comunicada y a menos de 20 km, Palma de Mallorca es una ciudad llena de vida, de actividades culturales y joyas artísticas. En un breve resumen destacan:
El castillo de Bellver, uno de sus edificios emblemáticos. De estilo gótico y único de planta circular. La Catedral (La Seu), también gótica, edificada sobre el solar de una mezquita. Integra un gran mural cerámico de Miquel Barceló. El Palacio de la Almudaina -Museo del Patrimonio Nacional- y el Palacio Episcopal; La Lonja, situada frente al mar y precedida de palmeras; los patios señoriales.. Y tantas cosas... ¡Palma bien merece una visita!
Redactor :
Marion Rouillot
