Presentación
Virtudes no le faltan a este pueblo norteño, del que se dice que es el más bonito de España: en un mínimo territorio –apenas 28,46 km2- reúne uno de los cascos antiguos más importantes de la Península. Santillana del Mar es un pequeño municipio que aloja la villa del mismo nombre. Está situado a unos 30 km de Santander, en la costa occidental de la comunidad autónoma de Cantabria, y es famoso por su belleza medieval (fue declarado conjunto histórico-artístico en 1889), por su magnífico entorno natural y por su tesoro arqueológico: muy cerca de Santillana se encuentra la "Capilla Sixtina" del arte prehistórico, las famosas cuevas de Altamira. Pero, por si fueran pocos los reclamos turísticos mencionados, Santillana es un punto de obligado paso en la ruta que por el norte recorre el Camino de Santiago. ¿Cómo resistirse a tantos encantos?
Visitas destacadas
Para entender la importancia de Santillana hay que retroceder hasta el siglo VIII, cuando un grupo de monjes que portaban las reliquias de la mártir Juliana construyeron una ermita junto al monte Vispieres. Con el asentamiento comenzó la expansión de sus tierras, gracias a donaciones y privilegios concedidos por el reino asturleonés, que trajo consigo una repoblación de la zona y la creación de una abadía en torno a la cual nació la villa de Sancta Iuliana (Santillana). Durante los siglos posteriores la abadía experimentó un enorme crecimiento económico, edificándose en el XII el templo actual, una Colegiata románica que sigue arquitectónicamente el modelo de Frómista (Palencia). Esta época de esplendor se refleja también en la importancia jurídica y administrativa ganada por la villa, que culmina con la concesión por parte del rey del Fuero de Santillana.
A partir del siglo XV la Casa de los Mendoza pasa a detentar un gran poder y la villa adquiere su marcado carácter señorial, de lo que dan muestra las diferentes casonas y palacios que jalonan todo el casco antiguo.
De estilo románico, es la más grande de la cornisa cantábrica. Cuenta con tres ábsides y tres naves. La fachada principal está orientada al sur y precedida de un amplio atrio y un arco con un friso con la imagen del Pantocrátor. Otra de estas representaciones realizadas en el año 1200 se puede ver también en la capilla bautismal. Santa Juliana, a quien está dedicado el templo, se encuentra reflejada en una hornacina del friso; su sepulcro, en el interior de La Colegiata, preside el crucero. Mención aparte merece el retablo mayor, realizado entre los siglos XV y XVI, que mezcla elementos del gótico flamígero y el plateresco. Es obra de estilo hispano-flamenco, y contiene extraordinarias pinturas renacentistas, así como ricas esculturas. Asimismo, el frontal del altar es una bella joya realizada en plata mexicana repujada y cincelada. En cuanto al claustro, adosado a la fachada norte, posee los capiteles con los conjuntos escultóricos considerados como los mejores de todo el románico cántabro.
Información: Tel. 639 830 520
La estructura de Santillana tiene forma de Y. Se recorre a pie en una caminata tranquila que permite hacerse una idea del significado y la importancia de este precioso pueblo a lo largo de los siglos. En la misma Plaza Mayor, antigua plaza del mercado, se concentran muchos de los edificios sobresalientes de la villa. Pero para conocer mejor el conjunto artístico y monumental, nada como recorrer las dos rutas propuestas a continuación, la Santillana medieval y la Santillana renacentista y barroca. En la primera cabe destacar las torres góticas de carácter militar del Merino y Don Borja, ambas levantadas en el siglo XIV. La Torre del Merino, o La Torrona, fue la sede del merino, representante del rey desde que en 1209 se concediera a Santillana la capitalidad de las Asturias de Santillana (toda la zona occidental de la actual Cantabria, excepto Liébana). La Torre de Don Borja está formada por dos cuerpos unidos por un patio interior y en ella se aloja en la actualidad La Fundación Santillana. Otro edificio iniciado en esta época es la Casa de Leonor de la Vega, madre del primer Marqués de Santillana.
Detrás de La Colegiata, en la plaza de Las Arenas, se halla el Palacio de Velarde. De estilo renacentista, es de segunda mitad de siglo XVI, posteriormente reformado en el periodo barroco. A caballo entre los siglos XVI y XVII se levantaron a las afueras de Santillana dos conventos, uno para monjes y otro para religiosas. El Convento de Regina Coeli fue edificado siguiendo la tradición gótica, aunque ya hay influencias del estilo renacentista herreriano, su claustro es la mejor muestra. En cuanto al convento de las dominicas de San Ildefonso, ya se considera plenamente barroco. Además de la arquitectura religiosa, numerosas casonas y palacios se pueden admirar en las calles de Santillana. Con sus escudos de armas en las fachadas y sus lemas relativos al honor, muchos de ellos se construyeron gracias a la riqueza que los indianos hicieron en América. La Casa de los Sánchez de Tagle, o la de Los Peredo-Barreda (Casa de Bemeejís) son dos ejemplos. Esta última, además de ser una de las más elegantes, está rodeada de un bonito jardín. También cabe mencionar la Casa de los Villa, conocida por la “de los hombrones” por estar sostenido el enorme blasón de la fachada por dos "fortachones". La Casa de los Barreda-Bracho aloja en la actualidad el Parador Nacional Gil Blas.
El Museo Diocesano Regina Coeli, situado en el convento dominico del mismo nombre, conserva y expone el patrimonio artístico y religioso de la orden: colecciones de imaginería en madera policromada, platería, esmaltes... Su Taller de restauración es muy prestigioso, así como el Archivo Documental Diocesano.
Información: www.santillanamuseodiocesano.com
Casas del Águila y La Parra. En estos dos edificios que presiden la Plaza Mayor se organizan exposiciones temporales de temática variada.
Información: www.culturadcantabria.com
Museo Jesús Otero. Reúne medio centenar de esculturas de este artista nacido en Santillana. También se pueden ver muestras de obras de artistas actuales.
Tel.: 942 840 198.
Fundación Santillana. Con sede en la Torre de Don Borja, está consagrada a promocionar el arte y la cultura mediante exposiciones temporales.
Tel: 942 818 075.
Palacio Peredo Barreda de Caja Cantabria. Moderno centro cultural que acoge una programación expositiva estable. Alberga biblioteca, artes decorativas y plásticas.
Información: www.cajacantabria.com.
Museo de Tortura El Solar. Exposición permanente dedicada a los diversos instrumentos de tortura, castigo, humillación y pena capital utilizados durante el periodo en el que actuaba la inquisición.
Información: 942 840 273.
Rodeado de un entorno de alto valor natural, el propio pueblo de Santillana ofrece zonas verdes que merecen una visita. En el Palacio de Peredo Barreda de Caja Cantabria se puede disfrutar de un jardín de tipo francés. No hay que dejar de ver el ginko más famoso de toda la provincia, un excepcional fósil viviente, así como un eucalipto de 35 metros de altura y 10 de perímetro. Durante el verano, en el jardín se exponen conjuntos escultóricos.
En cuanto a las fuentes históricas, en el casco antiguo hay cuatro, un lavadero y un abrevadero. Están repartidos entre la Plaza Mayor, el muro del actual museo de la tortura, la casa de Quevedo, el campo Revolgo y junto a La Colegiata.
A dos kilómetros de Santillana se encuentra lo que se ha llamado La Capilla Sixtina del arte prehistórico. Un yacimiento con 150 pinturas policromadas a base de pigmentos naturales que se han conservado desde el cuaternario. Altamira ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y no admite visitas turísticas desde 2002 con el fin de preservar este importante legado. Sí se puede visitar la Neocueva, una fiel recreación de la original. La exposición permanente de las salas del Museo ofrece una de las mejores colecciones de objetos originales del Paleolítico de España.
Información: Tel. 942 818 815/005. museodealtamira.mcu.es.
Santa Justa es la playa más cercana a Santillana del Mar. No es muy grande ni dispone de los servicios habituales en otras playas vecinas, se trata de una cala situada muy cerca de la villa marinera de Suances y que recibe su nombre de la ermita que tiene enfrente. La curiosidad radica en la ubicación de la ermita, en el interior de una cueva a la que solo se puede acceder cuando el mar está en calma y ha bajado la marea, ya que en caso contrario queda todo cubierto por el agua.
Costa occidental. Esta ruta pasa por la villas marineras más importantes, visitando monumentos tan conocidos como el Capricho de Gaudí, la Universidad de Comillas y el castillo de San Vicente de la Barquera.
Parque Natural de Oyambre - Monte Corona. Bello paisaje con un ecosistema en el que las rías de San Vicente de la Barquera y La Rabía, sus playas, dunas, acantilados y la masa forestal de Monte Corona combinan la calidad paisajística de la costa y los estuarios con el gran valor de las zonas de prados y los bosques de frondosas autóctonas.
¿Cómo llegar?
Aeropuerto de Santander. A 34 km de Santillana está el aeropuerto de Parayas. Vuelos diarios de Madrid y Barcelona y semanales desde diferentes capitales españolas y europeas. www.aena.es
RENFE. Se puede acceder a Santander y Torrelavega a través de los trenes de largo recorrido. Santillana del Mar no cuenta con estación de ferrocarril, existen estaciones de FEVE en las localidades vecinas de Barreda, Puente San Miguel y Torrelavega. www.feve.es/ www.renfe.es
Servicio de autobuses. Dos estacionesson referencia para el acceso a Santillana: Torrelavega y Santander.
Líneas interregionales y línea Santander - Torrelavega - Santillana del Mar:
www.alsa.es
Líneas domésticas: www.transportedecantabria.es/web/guest/home
Presentación
Virtudes no le faltan a este pueblo norteño, del que se dice que es el más bonito de España: en un mínimo territorio –apenas 28,46 km2- reúne uno de los cascos antiguos más importantes de la Península. Santillana del Mar es un pequeño municipio que aloja la villa del mismo nombre. Está situado a unos 30 km de Santander, en la costa occidental de la comunidad autónoma de Cantabria, y es famoso por su belleza medieval (fue declarado conjunto histórico-artístico en 1889), por su magnífico entorno natural y por su tesoro arqueológico: muy cerca de Santillana se encuentra la "Capilla Sixtina" del arte prehistórico, las famosas cuevas de Altamira. Pero, por si fueran pocos los reclamos turísticos mencionados, Santillana es un punto de obligado paso en la ruta que por el norte recorre el Camino de Santiago. ¿Cómo resistirse a tantos encantos?
Visitas destacadas
Para entender la importancia de Santillana hay que retroceder hasta el siglo VIII, cuando un grupo de monjes que portaban las reliquias de la mártir Juliana construyeron una ermita junto al monte Vispieres. Con el asentamiento comenzó la expansión de sus tierras, gracias a donaciones y privilegios concedidos por el reino asturleonés, que trajo consigo una repoblación de la zona y la creación de una abadía en torno a la cual nació la villa de Sancta Iuliana (Santillana). Durante los siglos posteriores la abadía experimentó un enorme crecimiento económico, edificándose en el XII el templo actual, una Colegiata románica que sigue arquitectónicamente el modelo de Frómista (Palencia). Esta época de esplendor se refleja también en la importancia jurídica y administrativa ganada por la villa, que culmina con la concesión por parte del rey del Fuero de Santillana.
A partir del siglo XV la Casa de los Mendoza pasa a detentar un gran poder y la villa adquiere su marcado carácter señorial, de lo que dan muestra las diferentes casonas y palacios que jalonan todo el casco antiguo.
De estilo románico, es la más grande de la cornisa cantábrica. Cuenta con tres ábsides y tres naves. La fachada principal está orientada al sur y precedida de un amplio atrio y un arco con un friso con la imagen del Pantocrátor. Otra de estas representaciones realizadas en el año 1200 se puede ver también en la capilla bautismal. Santa Juliana, a quien está dedicado el templo, se encuentra reflejada en una hornacina del friso; su sepulcro, en el interior de La Colegiata, preside el crucero. Mención aparte merece el retablo mayor, realizado entre los siglos XV y XVI, que mezcla elementos del gótico flamígero y el plateresco. Es obra de estilo hispano-flamenco, y contiene extraordinarias pinturas renacentistas, así como ricas esculturas. Asimismo, el frontal del altar es una bella joya realizada en plata mexicana repujada y cincelada. En cuanto al claustro, adosado a la fachada norte, posee los capiteles con los conjuntos escultóricos considerados como los mejores de todo el románico cántabro.
Información: Tel. 639 830 520
La estructura de Santillana tiene forma de Y. Se recorre a pie en una caminata tranquila que permite hacerse una idea del significado y la importancia de este precioso pueblo a lo largo de los siglos. En la misma Plaza Mayor, antigua plaza del mercado, se concentran muchos de los edificios sobresalientes de la villa. Pero para conocer mejor el conjunto artístico y monumental, nada como recorrer las dos rutas propuestas a continuación, la Santillana medieval y la Santillana renacentista y barroca. En la primera cabe destacar las torres góticas de carácter militar del Merino y Don Borja, ambas levantadas en el siglo XIV. La Torre del Merino, o La Torrona, fue la sede del merino, representante del rey desde que en 1209 se concediera a Santillana la capitalidad de las Asturias de Santillana (toda la zona occidental de la actual Cantabria, excepto Liébana). La Torre de Don Borja está formada por dos cuerpos unidos por un patio interior y en ella se aloja en la actualidad La Fundación Santillana. Otro edificio iniciado en esta época es la Casa de Leonor de la Vega, madre del primer Marqués de Santillana.
Detrás de La Colegiata, en la plaza de Las Arenas, se halla el Palacio de Velarde. De estilo renacentista, es de segunda mitad de siglo XVI, posteriormente reformado en el periodo barroco. A caballo entre los siglos XVI y XVII se levantaron a las afueras de Santillana dos conventos, uno para monjes y otro para religiosas. El Convento de Regina Coeli fue edificado siguiendo la tradición gótica, aunque ya hay influencias del estilo renacentista herreriano, su claustro es la mejor muestra. En cuanto al convento de las dominicas de San Ildefonso, ya se considera plenamente barroco. Además de la arquitectura religiosa, numerosas casonas y palacios se pueden admirar en las calles de Santillana. Con sus escudos de armas en las fachadas y sus lemas relativos al honor, muchos de ellos se construyeron gracias a la riqueza que los indianos hicieron en América. La Casa de los Sánchez de Tagle, o la de Los Peredo-Barreda (Casa de Bemeejís) son dos ejemplos. Esta última, además de ser una de las más elegantes, está rodeada de un bonito jardín. También cabe mencionar la Casa de los Villa, conocida por la “de los hombrones” por estar sostenido el enorme blasón de la fachada por dos "fortachones". La Casa de los Barreda-Bracho aloja en la actualidad el Parador Nacional Gil Blas.
El Museo Diocesano Regina Coeli, situado en el convento dominico del mismo nombre, conserva y expone el patrimonio artístico y religioso de la orden: colecciones de imaginería en madera policromada, platería, esmaltes... Su Taller de restauración es muy prestigioso, así como el Archivo Documental Diocesano.
Información: www.santillanamuseodiocesano.com
Casas del Águila y La Parra. En estos dos edificios que presiden la Plaza Mayor se organizan exposiciones temporales de temática variada.
Información: www.culturadcantabria.com
Museo Jesús Otero. Reúne medio centenar de esculturas de este artista nacido en Santillana. También se pueden ver muestras de obras de artistas actuales.
Tel.: 942 840 198.
Fundación Santillana. Con sede en la Torre de Don Borja, está consagrada a promocionar el arte y la cultura mediante exposiciones temporales.
Tel: 942 818 075.
Palacio Peredo Barreda de Caja Cantabria. Moderno centro cultural que acoge una programación expositiva estable. Alberga biblioteca, artes decorativas y plásticas.
Información: www.cajacantabria.com.
Museo de Tortura El Solar. Exposición permanente dedicada a los diversos instrumentos de tortura, castigo, humillación y pena capital utilizados durante el periodo en el que actuaba la inquisición.
Información: 942 840 273.
Rodeado de un entorno de alto valor natural, el propio pueblo de Santillana ofrece zonas verdes que merecen una visita. En el Palacio de Peredo Barreda de Caja Cantabria se puede disfrutar de un jardín de tipo francés. No hay que dejar de ver el ginko más famoso de toda la provincia, un excepcional fósil viviente, así como un eucalipto de 35 metros de altura y 10 de perímetro. Durante el verano, en el jardín se exponen conjuntos escultóricos.
En cuanto a las fuentes históricas, en el casco antiguo hay cuatro, un lavadero y un abrevadero. Están repartidos entre la Plaza Mayor, el muro del actual museo de la tortura, la casa de Quevedo, el campo Revolgo y junto a La Colegiata.
A dos kilómetros de Santillana se encuentra lo que se ha llamado La Capilla Sixtina del arte prehistórico. Un yacimiento con 150 pinturas policromadas a base de pigmentos naturales que se han conservado desde el cuaternario. Altamira ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y no admite visitas turísticas desde 2002 con el fin de preservar este importante legado. Sí se puede visitar la Neocueva, una fiel recreación de la original. La exposición permanente de las salas del Museo ofrece una de las mejores colecciones de objetos originales del Paleolítico de España.
Información: Tel. 942 818 815/005. museodealtamira.mcu.es.
Santa Justa es la playa más cercana a Santillana del Mar. No es muy grande ni dispone de los servicios habituales en otras playas vecinas, se trata de una cala situada muy cerca de la villa marinera de Suances y que recibe su nombre de la ermita que tiene enfrente. La curiosidad radica en la ubicación de la ermita, en el interior de una cueva a la que solo se puede acceder cuando el mar está en calma y ha bajado la marea, ya que en caso contrario queda todo cubierto por el agua.
Costa occidental. Esta ruta pasa por la villas marineras más importantes, visitando monumentos tan conocidos como el Capricho de Gaudí, la Universidad de Comillas y el castillo de San Vicente de la Barquera.
Parque Natural de Oyambre - Monte Corona. Bello paisaje con un ecosistema en el que las rías de San Vicente de la Barquera y La Rabía, sus playas, dunas, acantilados y la masa forestal de Monte Corona combinan la calidad paisajística de la costa y los estuarios con el gran valor de las zonas de prados y los bosques de frondosas autóctonas.
¿Cómo llegar?
Aeropuerto de Santander. A 34 km de Santillana está el aeropuerto de Parayas. Vuelos diarios de Madrid y Barcelona y semanales desde diferentes capitales españolas y europeas. www.aena.es
RENFE. Se puede acceder a Santander y Torrelavega a través de los trenes de largo recorrido. Santillana del Mar no cuenta con estación de ferrocarril, existen estaciones de FEVE en las localidades vecinas de Barreda, Puente San Miguel y Torrelavega. www.feve.es/ www.renfe.es
Servicio de autobuses. Dos estacionesson referencia para el acceso a Santillana: Torrelavega y Santander.
Líneas interregionales y línea Santander - Torrelavega - Santillana del Mar:
www.alsa.es
Líneas domésticas: www.transportedecantabria.es/web/guest/home