Visitas destacadas
Las playas de Torremolinos
Playas soleadas de arena oscura que se extienden en un total de 7 kilómetros de costa. Ese es el verdadero aliciente por el que Torremolinos se convirtió, hace ya décadas, es uno de los destinos turísticos más res del país. Y el motivo por el que aún hoy continúa atrayendo a numerosos visitantes, en especial en la temporada estival. Sus playas maravillosas que, además, tienen un acceso cómodo desde la propia ciudad, son uno de los atractivos turísticos de esta ciudad malagueña. Sus aguas tranquilas, de suave oleaje, son perfectas para toda la familia, en especial las que acuden con niños pequeños. De entre las playas más especiales de Torremolinos destacan las de El Bajoncillo y La Carihuela (ambas situadas en el núcleo urbano), y también las de Los Álamos, Playamar, Montemar y El Saltillo. La playa de La Carihuela se localiza en lo que era el antiguo barrio de pescadores de la ciudad, y es una de las más famosas y reconocidas del pueblo.
La Casa de los Navajas
De entre todos los lugares interesantes que posee Torremolinos, destaca este curioso palacete residencial que fue mandado construir en 1925 por un empresario llamado Antonio Navajas, con el fin de hacer de él su residencia familiar. Su importancia arquitectónica queda patente desde el momento en que fue declarado un edificio de Interés Histórico en el año 1991. Localizado sobre un acantilado junto a la playa de El Bajoncillo, la Casa de los Navajas es un edificio imponente de estilo neomudéjar, una corriente arquitectónica que vivió su momento álgido entre finales del siglo XIX y principios del XX. La casa consta de dos plantas decoradas con bellos miradores orientados al mar. Aunque se trata de uno de los edificios más destacados de la ciudad, actualmente se encuentra en estado de abandono, a la espera de ser restaurado por el Ayuntamiento local, por lo que sólo es posible admirarlo por fuera.
El Centro Cultural Pablo Ruiz Picasso
Se trata de uno de los edificios más señalados de la ciudad, que fue declarado Bien de Interés Cultural en el año 1990. Un centro que, además de llevar el nombre del destacado pintor malagueño, también es conocido como el Antiguo Colegio de Huérfanos Ferroviarios. Se trata de una construcción que data del año 1935 y que fue proyectado por el arquitecto Francisco Alonso Martos quien siguió en el diseño las pautas arquitectónicas de lo que se llamó Movimiento Moderno. Llama la atención la naturaleza de la puerta principal y de las ventanas, que hacen gala de los rasgos del estilo art decó, mientras que el resto de los elementos de la construcción no recuerdan en absoluto a esta estética. El centro cultural se emplaza en un lugar de gran belleza, sobre una colina ajardinada con espectaculares vistas del mar. El objetivo para el que fue planificado y construido fue para convertirse en un orfanato.
El Jardín Botánico Molino de Inca
En un lugar privilegiado, junto al Vivero Municipal de Torremolinos, se localiza el Jardín Botánico Molino de Inca, en el marco de un paraje natural de gran belleza en el que se encuentran los manantiales de Inca y Albercón del Rey. Recibe su nombre del molino harinero de Inca, que fue construido en ese mismo lugar en el siglo XV, concretamente en 1488. El jardín que hoy se asienta aquí se inauguró en el año 2003 y ocupa alrededor de 4 hectáreas de terreno. Posee un gran valor botánico, ya que en él se cultivan unos 300 árboles de 60 especies diferentes, además de más de 150 palmeras de 50 especies, y alrededor de 400 arbustos distintos. Además de tal variedad vegetal, el jardín posee ejemplares verdaderamente curiosos como un acebuche con más de 1.000 años de edad. Otros elementos destacados del jardín son un laberinto natural realizado con arbustos de Aligustre, y una fuente que simula un manantial que nace en el jardín y va a desembocar a un lago.
El Parque de La Batería
Al norte de la ciudad, en lo que se conoce como el barrio de Montemar, está el parque de La Batería, que toma su nombre de una antigua batería militar defensiva que existía hace años en este mismo lugar. Transformada en parque desde el año 2007, la zona ofrece hoy un espacio natural de alrededor de 74 kilómetros cuadrados por el que se extiende todo un entramado de caminos, salpicados de grandes y vistosas fuentes, que delimitan las zonas del parque. La batería de artillería, que estuvo operativa durante la Guerra Civil española y que hoy presta su nombre al parque, fue rehabilitada y sus tres emplazamientos pueden ser visitados por el público que se acerca hasta la zona. Se pueden ver algunos elementos armamentísticos, en especial cañones, y también una zona de pasadizos y bunkers subterráneos. Pero uno de los grandes encantos del parque de La Batería es el lago navegable que se incluye en sus dominios. Un estanque de cerca de 9.000 metros cuadrados en el que se puede montar en barca. En el centro se construyó una pequeña isla artificial. También resulta interesante subir a la torre mirador del parque, de cerca de 15 metros de altura, y desde la que las vistas del mar y la ciudad son realmente increíbles.
Excursión a la serranía de Mijas
Es uno de los pueblos más pintorescos de los alrededores de Torremolinos, del que lo separa una distancia de unos 22 km. Se enclava en la ladera de la sierra de Mijas y posee un casco antiguo digno de una visita. Calles estrechas, fachadas encaladas y los famosos burros de Mijas. Utilizados desde hace décadas como medio de transporte, hoy son uno de los rasgos característicos del pueblo, y uno de sus elementos más turísticos. Por la belleza de sus calles y plazas, y su maravilloso entorno natural de sierra, merece la pena acercarse a conocer Mijas y disfrutar de las espectaculares panorámicas que se observan desde allí.
La monumental e histórica Ronda
A unos 105 kilómetros de Torremolinos encontramos una de las ciudades más hermosas de toda Andalucía. Se trata de la espectacular Ronda, localizada en la serranía del mismo nombre, una urbe antigua e histórica que conserva restos de los muchos pueblos antiguos que pasaron por ella. La ciudad posee numerosos tesoros que descubrir, aunque uno de los más importantes es su propio casco antiguo. Pasear por sus callejuelas y plazas es todo un lujo. Además, conserva numerosos edificios históricos e iglesias interesantes que convierten la visita a Ronda en todo un evento cultural.
Descubrir los tesoros de Málaga
Tan solo 15 kilómetros separan Torremolinos de la capital de la provincia, la espectacular Málaga, por lo que una excursión de un día a la ciudad se hace del todo imprescindible. Declarada Conjunto Histórico, Málaga tiene tanto que ofrecer, que conviene hacer una selección previa de lo que se desea visitar. El Castillo y la Alcazaba son visitas obligatorias, así como el Teatro Romano o la Catedral de la Encarnación. Y en el centro histórico no se puede dejar de pasear por la Alameda Principal y por la calle Marqués de Larios, arterias emblemáticas de la ciudad.
El pueblo colgante de Casares
Aunque pertenece a Málaga, se sitúa en el límite con la provincia de Cádiz, muy cerca de pueblos como Gaucín o Manilva, y es una de las excursiones más especiales que pueden hacerse desde Torremolinos, que dista unos 90 km. Casares destila la esencia de los pueblos serranos de esta zona de Andalucía. Fue declarado en 1978 Conjunto Histórico-Artístico y no es para menos, pues sus calles estrechas repletas de casas encaladas conforman una pintoresca imagen que rebosa encanto y belleza. La pendiente del terreno y lo escarpado de su casco urbano le han valido la consideración de “pueblo colgante”.
Redactor :
Marion Rouillot
