Presentación
Paide es una pequeña ciudad que se esconde en el centro mismo de Estonia, en pleno corazón de este singular y desconocido país. Debe su nombre a la piedra caliza de tonalidad blanca que domina en esta región, y que ha sido tradicionalmente el material constructivo con el que se edificaban monumentos y edificios. Como el castillo de Paide, del siglo XIII, una de las atracciones más relevantes de la ciudad, también construido con esta piedra caliza. Además de visitar el castillo, de gran belleza, hay que fijarse en la gran cantidad de estatuas de piedra que se localizan diseminadas por la ciudad. Otro de los grandes alicientes para visitar Paide son sus festivales y eventos culturales, muy interesantes. Cada año se celebra, por ejemplo, el Festival Internacional de la Piedra Caliza, uno de los acontecimientos más relevantes del sector. Paide pertenece al condado de Järvamaa y cuenta con 8.711 habitantes, según datos de 2013.
La localidad de Paide pertenece (de mayor a menor) al condado Järvamaa y al cantón Paide.
La localidad de Paide tiene 64.872.001 habitantes (censo 2007).
El actual alcade de Paide es Kaido Ivask para el período 2011 - en cours.
El gentilicio para los habitantes de Paide es Païdéens. El nombre francés de la localidad es Paide, el nombre inglés de la localidad es Paide.
La página web de Paide es http://www.paide.ee
Visitas destacadas
Es, sin ninguna duda, el monumento estrella de esta ciudad estonia. Una fortaleza medieval que se empezó a construir en el año 1265 por los caballeros alemanes de la orden de los Hermanos Livonios de la Espada. Para edificar el castillo se empleó, como no podía ser de otra manera, la magnífica piedra caliza de los alrededores de Paide. Desde aquel momento en que se iniciaron las obras, y durante los siglos XIV y XV, la fortaleza experimentó numerosas ampliaciones y obras de remodelación. Se construyó una alta muralla a su alrededor, se añadieron torres y se crearon nuevos espacios. También llegaron épocas en las que el castillo quedó totalmente en ruinas, por ejemplo, durante gran parte del siglo XVII. En la actualidad, y a pesar de haber sido restaurado, solamente quedan algunas partes de las construcción original. Una de ellas es la torre Pikk Hermann, tan característica del lugar, que fue construida por la orden de Livonia en 1625. Fue restaurada en el siglo XIX, aunque fue destruida en 1941 durante la Segunda Guerra Mundial. Posteriormente se volvió a reconstruir y hoy continúa siendo una de las atracciones turísticas de Paide, donde se alberga el Museo de Historia de Järvamaa.
En el siglo XIII la ciudad de Paide era poco más que el castillo y algunas casas que se edificaron a su alrededor. De hecho, los primeros templos que existieron allí se localizaban dentro de las murallas del castillo. Eran iglesias rudimentarias, construidas principalmente con madera por lo que, con el paso del tiempo, no ha quedado ni rastro de las mismas. Ya en el siglo XVIII se empezó a construir una iglesia de piedra, que tampoco se conserva puesto que fue pasto de las llamas en el año 1845. La actual Iglesia de la Santa Cruz fue construida en el siglo XIX, concretamente en los años 1847 y 1848, por el arquitecto Johann Gottfried Mühlenhausen. Muestra un estilo clasicista con toques neobarrocos que la hacen especial, así como la disposición de su torre en el centro de la fachada. Una característica que la distingue entre todas las iglesias del país. Esta especial localización de la torre fue la solución que encontró el arquitecto para poder edificar la nueva iglesia sobre los cimientos de la antigua. Uno de los tesoros artísticos más valiosos que guarda el templo son los vitrales de las ventanas, realizados en Riga a principios del siglo XX. El horario de visita es de miércoles a viernes, de 12:00 a 15:00 h. Tel. de información: +372 5819 1414.
Es uno de los edificios civiles de más importancia de la ciudad. Está ubicado en un edificio del siglo XIX, en la calle Keskväljak, 14. En aquella época pertenecía a uno de los ciudadanos residentes en Paide, aunque a principios del siglo XX, concretamente en el año 1913, pasó a manos del gobierno local. Más tarde, en 1920, se iniciaron las obras de rehabilitación del edificio, al que se dotó de una nueva planta en altura y se modificó la fachada, que adoptó el estilo modernista imperante en la época. Hoy el edificio del Ayuntamiento es una de las construcciones de arquitectura civil más señaladas de la ciudad, con sus casi dos siglos de antigüedad, y merece la pena reservar un tiempo para acercarse a conocerla. A lo largo de la historia, además de ser la sede del gobierno municipal, también ha acogido una sucursal del Banco de Estonia y la oficina del Registro de la ciudad.
Horario: el Ayuntamiento permanece abierto para visitas de lunes a jueves, de 8:00 a 17:00 h. Viernes, de 8:00 a 15:45 h. Tel.: +372 383 8601. Web: www.paide.ee E-mail: paide@paide.ee
De entre las visitas culturales que el turista no puede perderse en Paide, destaca la visita al Museo de Järvamma, que trata de divulgar la historia del condado del mismo nombre, al que pertenece la ciudad de Paide. Fundado en 1905, es el museo más antiguo de la ciudad. Se encuentra en el Parque Lembitu, una zona verde muy céntrica que fue creada en el año 1936, aunque parte de la colección del museo se alberga en la torre Pikk Hermann, en el castillo, donde se organizó de forma permanente una exposición sobre la historia antigua del condado. La visita a este museo es reveladora para el turista, ya que descubre numerosos aspectos de la historia de la ciudad, de la región y también del país, uno de los grandes desconocidos de Europa. A través de las muestras y exposiciones del museo, se analiza el transcurrir del tiempo desde la antigüedad hasta la edad de hierro, y se exhiben los hallazgos arqueológicos encontrados en la zona. Una de las atracciones del museo que más llama la atención de los visitantes es la recreación de una farmacia antigua del siglo XVIII. También se pueden ver allí el taller de un artesano, o una habitación de una casa señorial del siglo XIX.
Horario: de martes a sábado, de 11:00 a 18:00 h. Tel.: + 372 3850 276 Web: http://www.jarvamaamuuseum.ee E-mail: info@jarvamaamuuseum.ee
Si hay un acontecimiento social y cultural verdaderamente importante en la ciudad, ese es, sin duda, el Festival Internacional de la Piedra Caliza, que tiene lugar cada año en Paide desde 1996. La ciudad está íntimamente ligada a este material constructivo presente en la naturaleza de la zona. Durante los diez días que dura el festival, Paide se llena de grandes artistas y escultores que realizan magníficas esculturas. Después, estas obras de arte adornan diferentes rincones de la ciudad. El festival, uno de los más célebres del mundo artístico de la piedra, se celebra cada dos años. Otro de los eventos culturales que tienen lugar en Paide, concretamente durante el mes de junio, es el Festival de Canciones y Bailes del Condado de Järvamaa. Se trata de un acontecimiento que lleva celebrándose más de 100 años, y en el que participan cerca de un centenar de artistas. También merece la pena destacar el Festival de Historia y Cultura “Vientos de la Edad”, en el que se organiza todo un repertorio de actividades lúdicas y culturales: clases de historia, ferias de artesanía, talleres, juegos al aire libre, etc. Un interesante festival que encanta a mayores y pequeños.
Más información sobre los eventos culturales en Paide en el tel.: +372 384 9130 o en www.paidekultuurikeskus.ee
A poco más de 100 kilómetros de Paide encontramos la bella ciudad de Tartu, la segunda más grande de Estonia, con 101.297 habitantes (según datos del año 2004). Es el destino perfecto para hacer una escapada desde Paide. En Tartu merece la pena visitar, sobre todo, el barrio de Supilinn, el más pequeño de la ciudad, que es célebre por su peculiar arquitectura. Se localiza en la parte norte de Tartu, limitado por el barrio de Kesklinn al sur, y por el río Emajogi. Sus calles, bautizadas con curiosos nombres de alimentos, están repletas de preciosas casas de madera pintadas de vivos y alegres colores. Así, en Supilinn se puede pasear por la calle de la Patata o del Melón, mientras se disfruta de la visión de sus bellos y coloristas edificios.
Es uno de los parajes naturales más bellos de Estonia, y se localiza relativamente cerca de Paide. La zona fue catalogada como Reserva Natural hace más de dos décadas, en 1994, con el fin de protegerla de cualquier tipo de agresión. Comprende un área de 34.220 hectáreas, un amplio territorio que ocupa varios municipios como Tartu o Viljandi. Allí pueden verse pantanos, bosques y llanuras por las que fluyen caudalosos ríos. Es el lugar perfecto para los amantes de la naturaleza, que podrán recorrer la zona caminando por los muchos senderos que se han habilitado.
Acercarse a esta ciudad, la segunda del condado de Järva, es una de las excursiones de interés que pueden realizarse tomando Paide como punto de partida. Se trata de la segunda urbe en tamaño del condado, y allí hay muchas cosas que ver. En especial, merece la pena recorrer sus parques y zonas verdes, que ocupan un tercio de la ciudad. Entre todos ellos, sobresale el parque de Lokuta que fue construido en el siglo XIX para disfrute de residentes y turistas. Otro lugar interesante en las inmediaciones de Türi es su lago artificial, creado en el año 1990. Y para los interesados por la cultura, el Museo de Türi es una gran alternativa. Alberga una exposición muy didáctica sobre la historia de la ciudad.
Estando tan cerca de la capital de Estonia, a unos 90 kilómetros, sería un pecado no acercarse a conocer Tallin, una de las ciudades más bonitas de Europa. Ubicada en la costa norte del país, posee un bellísimo centro histórico, repleto de torres y edificios medievales. Tan bello es que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1997. La ciudad vieja o Vanalinn consta de estrechas callejuelas que confluyen en la Raekoja Platz o Plaza del Ayuntamiento, en la que es posible contemplar la alta torre del Ayuntamiento de nada menos que 64 metros de altura. El edificio se construyó en estilo gótico tardío entre finales del siglo XIV y principios del XV.
¿Cómo llegar?
- Por carretera: dado que el estado de las carreteras es bastante bueno en Estonia, puede ser una buena idea alquilar un coche para llegar a Paide. De hecho, son muchos los turistas que recorren Estonia mientras realizan un tour por carretera visitando diferentes países europeos, por lo que conviene conocer el estado de la red viaria. A la hora de alquilar un coche, una recomendación es buscar uno provisto de GPS para evitar pérdidas y ahorrar tiempo. Por lo demás, no resulta problemático conducir por Estonia, aunque a veces se echa de menos alguna autovía o autopista. Hay que tener cuidado con los límites de velocidad, muy controlados en todas las carreteras.
- En avión: la mejor forma de llegar a Estonia, y a Paide, es por el aire, en especial si viajamos desde algún país extranjero. El aeropuerto principal del país es el de Ülemiste, situado a 4 kilómetros de Tallin y a unos 90 kilómetros de Paide. Desde España existen vuelos operados por diversas compañías aéreas desde ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao o Gerona. También se puede volar a Tallin desde Málaga y Palma de Mallorca. Otra alternativa es volar al Aeropuerto de Tartu, a unos 100 kilómetros de Paide.
- Transporte público y taxis: el centro urbano de Paide y la zona en la que se encuentran sus monumentos de interés es fácilmente accesible a pie, por lo que no necesitaremos medio de transporte alguno para movernos por la ciudad. Aunque existen autobuses que conectan las diferentes urbes del condado de Järva, lo mejor es alquilar un coche y realizar los trayectos por nuestra cuenta. Así ganaremos tiempo y viajaremos más cómodos e independientes.
Presentación
Paide es una pequeña ciudad que se esconde en el centro mismo de Estonia, en pleno corazón de este singular y desconocido país. Debe su nombre a la piedra caliza de tonalidad blanca que domina en esta región, y que ha sido tradicionalmente el material constructivo con el que se edificaban monumentos y edificios. Como el castillo de Paide, del siglo XIII, una de las atracciones más relevantes de la ciudad, también construido con esta piedra caliza. Además de visitar el castillo, de gran belleza, hay que fijarse en la gran cantidad de estatuas de piedra que se localizan diseminadas por la ciudad. Otro de los grandes alicientes para visitar Paide son sus festivales y eventos culturales, muy interesantes. Cada año se celebra, por ejemplo, el Festival Internacional de la Piedra Caliza, uno de los acontecimientos más relevantes del sector. Paide pertenece al condado de Järvamaa y cuenta con 8.711 habitantes, según datos de 2013.
La localidad de Paide pertenece (de mayor a menor) al condado Järvamaa y al cantón Paide.
La localidad de Paide tiene 64.872.001 habitantes (censo 2007).
El actual alcade de Paide es Kaido Ivask para el período 2011 - en cours.
El gentilicio para los habitantes de Paide es Païdéens. El nombre francés de la localidad es Paide, el nombre inglés de la localidad es Paide.
La página web de Paide es http://www.paide.ee
Visitas destacadas
Es, sin ninguna duda, el monumento estrella de esta ciudad estonia. Una fortaleza medieval que se empezó a construir en el año 1265 por los caballeros alemanes de la orden de los Hermanos Livonios de la Espada. Para edificar el castillo se empleó, como no podía ser de otra manera, la magnífica piedra caliza de los alrededores de Paide. Desde aquel momento en que se iniciaron las obras, y durante los siglos XIV y XV, la fortaleza experimentó numerosas ampliaciones y obras de remodelación. Se construyó una alta muralla a su alrededor, se añadieron torres y se crearon nuevos espacios. También llegaron épocas en las que el castillo quedó totalmente en ruinas, por ejemplo, durante gran parte del siglo XVII. En la actualidad, y a pesar de haber sido restaurado, solamente quedan algunas partes de las construcción original. Una de ellas es la torre Pikk Hermann, tan característica del lugar, que fue construida por la orden de Livonia en 1625. Fue restaurada en el siglo XIX, aunque fue destruida en 1941 durante la Segunda Guerra Mundial. Posteriormente se volvió a reconstruir y hoy continúa siendo una de las atracciones turísticas de Paide, donde se alberga el Museo de Historia de Järvamaa.
En el siglo XIII la ciudad de Paide era poco más que el castillo y algunas casas que se edificaron a su alrededor. De hecho, los primeros templos que existieron allí se localizaban dentro de las murallas del castillo. Eran iglesias rudimentarias, construidas principalmente con madera por lo que, con el paso del tiempo, no ha quedado ni rastro de las mismas. Ya en el siglo XVIII se empezó a construir una iglesia de piedra, que tampoco se conserva puesto que fue pasto de las llamas en el año 1845. La actual Iglesia de la Santa Cruz fue construida en el siglo XIX, concretamente en los años 1847 y 1848, por el arquitecto Johann Gottfried Mühlenhausen. Muestra un estilo clasicista con toques neobarrocos que la hacen especial, así como la disposición de su torre en el centro de la fachada. Una característica que la distingue entre todas las iglesias del país. Esta especial localización de la torre fue la solución que encontró el arquitecto para poder edificar la nueva iglesia sobre los cimientos de la antigua. Uno de los tesoros artísticos más valiosos que guarda el templo son los vitrales de las ventanas, realizados en Riga a principios del siglo XX. El horario de visita es de miércoles a viernes, de 12:00 a 15:00 h. Tel. de información: +372 5819 1414.
Es uno de los edificios civiles de más importancia de la ciudad. Está ubicado en un edificio del siglo XIX, en la calle Keskväljak, 14. En aquella época pertenecía a uno de los ciudadanos residentes en Paide, aunque a principios del siglo XX, concretamente en el año 1913, pasó a manos del gobierno local. Más tarde, en 1920, se iniciaron las obras de rehabilitación del edificio, al que se dotó de una nueva planta en altura y se modificó la fachada, que adoptó el estilo modernista imperante en la época. Hoy el edificio del Ayuntamiento es una de las construcciones de arquitectura civil más señaladas de la ciudad, con sus casi dos siglos de antigüedad, y merece la pena reservar un tiempo para acercarse a conocerla. A lo largo de la historia, además de ser la sede del gobierno municipal, también ha acogido una sucursal del Banco de Estonia y la oficina del Registro de la ciudad.
Horario: el Ayuntamiento permanece abierto para visitas de lunes a jueves, de 8:00 a 17:00 h. Viernes, de 8:00 a 15:45 h. Tel.: +372 383 8601. Web: www.paide.ee E-mail: paide@paide.ee
De entre las visitas culturales que el turista no puede perderse en Paide, destaca la visita al Museo de Järvamma, que trata de divulgar la historia del condado del mismo nombre, al que pertenece la ciudad de Paide. Fundado en 1905, es el museo más antiguo de la ciudad. Se encuentra en el Parque Lembitu, una zona verde muy céntrica que fue creada en el año 1936, aunque parte de la colección del museo se alberga en la torre Pikk Hermann, en el castillo, donde se organizó de forma permanente una exposición sobre la historia antigua del condado. La visita a este museo es reveladora para el turista, ya que descubre numerosos aspectos de la historia de la ciudad, de la región y también del país, uno de los grandes desconocidos de Europa. A través de las muestras y exposiciones del museo, se analiza el transcurrir del tiempo desde la antigüedad hasta la edad de hierro, y se exhiben los hallazgos arqueológicos encontrados en la zona. Una de las atracciones del museo que más llama la atención de los visitantes es la recreación de una farmacia antigua del siglo XVIII. También se pueden ver allí el taller de un artesano, o una habitación de una casa señorial del siglo XIX.
Horario: de martes a sábado, de 11:00 a 18:00 h. Tel.: + 372 3850 276 Web: http://www.jarvamaamuuseum.ee E-mail: info@jarvamaamuuseum.ee
Si hay un acontecimiento social y cultural verdaderamente importante en la ciudad, ese es, sin duda, el Festival Internacional de la Piedra Caliza, que tiene lugar cada año en Paide desde 1996. La ciudad está íntimamente ligada a este material constructivo presente en la naturaleza de la zona. Durante los diez días que dura el festival, Paide se llena de grandes artistas y escultores que realizan magníficas esculturas. Después, estas obras de arte adornan diferentes rincones de la ciudad. El festival, uno de los más célebres del mundo artístico de la piedra, se celebra cada dos años. Otro de los eventos culturales que tienen lugar en Paide, concretamente durante el mes de junio, es el Festival de Canciones y Bailes del Condado de Järvamaa. Se trata de un acontecimiento que lleva celebrándose más de 100 años, y en el que participan cerca de un centenar de artistas. También merece la pena destacar el Festival de Historia y Cultura “Vientos de la Edad”, en el que se organiza todo un repertorio de actividades lúdicas y culturales: clases de historia, ferias de artesanía, talleres, juegos al aire libre, etc. Un interesante festival que encanta a mayores y pequeños.
Más información sobre los eventos culturales en Paide en el tel.: +372 384 9130 o en www.paidekultuurikeskus.ee
A poco más de 100 kilómetros de Paide encontramos la bella ciudad de Tartu, la segunda más grande de Estonia, con 101.297 habitantes (según datos del año 2004). Es el destino perfecto para hacer una escapada desde Paide. En Tartu merece la pena visitar, sobre todo, el barrio de Supilinn, el más pequeño de la ciudad, que es célebre por su peculiar arquitectura. Se localiza en la parte norte de Tartu, limitado por el barrio de Kesklinn al sur, y por el río Emajogi. Sus calles, bautizadas con curiosos nombres de alimentos, están repletas de preciosas casas de madera pintadas de vivos y alegres colores. Así, en Supilinn se puede pasear por la calle de la Patata o del Melón, mientras se disfruta de la visión de sus bellos y coloristas edificios.
Es uno de los parajes naturales más bellos de Estonia, y se localiza relativamente cerca de Paide. La zona fue catalogada como Reserva Natural hace más de dos décadas, en 1994, con el fin de protegerla de cualquier tipo de agresión. Comprende un área de 34.220 hectáreas, un amplio territorio que ocupa varios municipios como Tartu o Viljandi. Allí pueden verse pantanos, bosques y llanuras por las que fluyen caudalosos ríos. Es el lugar perfecto para los amantes de la naturaleza, que podrán recorrer la zona caminando por los muchos senderos que se han habilitado.
Acercarse a esta ciudad, la segunda del condado de Järva, es una de las excursiones de interés que pueden realizarse tomando Paide como punto de partida. Se trata de la segunda urbe en tamaño del condado, y allí hay muchas cosas que ver. En especial, merece la pena recorrer sus parques y zonas verdes, que ocupan un tercio de la ciudad. Entre todos ellos, sobresale el parque de Lokuta que fue construido en el siglo XIX para disfrute de residentes y turistas. Otro lugar interesante en las inmediaciones de Türi es su lago artificial, creado en el año 1990. Y para los interesados por la cultura, el Museo de Türi es una gran alternativa. Alberga una exposición muy didáctica sobre la historia de la ciudad.
Estando tan cerca de la capital de Estonia, a unos 90 kilómetros, sería un pecado no acercarse a conocer Tallin, una de las ciudades más bonitas de Europa. Ubicada en la costa norte del país, posee un bellísimo centro histórico, repleto de torres y edificios medievales. Tan bello es que fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1997. La ciudad vieja o Vanalinn consta de estrechas callejuelas que confluyen en la Raekoja Platz o Plaza del Ayuntamiento, en la que es posible contemplar la alta torre del Ayuntamiento de nada menos que 64 metros de altura. El edificio se construyó en estilo gótico tardío entre finales del siglo XIV y principios del XV.
¿Cómo llegar?
- Por carretera: dado que el estado de las carreteras es bastante bueno en Estonia, puede ser una buena idea alquilar un coche para llegar a Paide. De hecho, son muchos los turistas que recorren Estonia mientras realizan un tour por carretera visitando diferentes países europeos, por lo que conviene conocer el estado de la red viaria. A la hora de alquilar un coche, una recomendación es buscar uno provisto de GPS para evitar pérdidas y ahorrar tiempo. Por lo demás, no resulta problemático conducir por Estonia, aunque a veces se echa de menos alguna autovía o autopista. Hay que tener cuidado con los límites de velocidad, muy controlados en todas las carreteras.
- En avión: la mejor forma de llegar a Estonia, y a Paide, es por el aire, en especial si viajamos desde algún país extranjero. El aeropuerto principal del país es el de Ülemiste, situado a 4 kilómetros de Tallin y a unos 90 kilómetros de Paide. Desde España existen vuelos operados por diversas compañías aéreas desde ciudades como Madrid, Barcelona, Bilbao o Gerona. También se puede volar a Tallin desde Málaga y Palma de Mallorca. Otra alternativa es volar al Aeropuerto de Tartu, a unos 100 kilómetros de Paide.
- Transporte público y taxis: el centro urbano de Paide y la zona en la que se encuentran sus monumentos de interés es fácilmente accesible a pie, por lo que no necesitaremos medio de transporte alguno para movernos por la ciudad. Aunque existen autobuses que conectan las diferentes urbes del condado de Järva, lo mejor es alquilar un coche y realizar los trayectos por nuestra cuenta. Así ganaremos tiempo y viajaremos más cómodos e independientes.