Presentación
Los Alpes franceses encierran lugares increíbles para practicar el esquí y los deportes de invierno. Val Thorens, en el valle de Tarentaise, en Saboya, es uno de ellos. Situado a 2.300 m. de altitud es el pueblo de montaña más alto de Europa. La historia de Val Thorens está vinculada al esquí desde la década de 1960, cuando comenzó a planificarse la estación y se mejoraron los accesos que llevaban hasta allí. Hoy es su principal actividad, ya que atrae a un gran número de turistas cada temporada. Y no es extraño, puesto que forma parte del complejo de Los Tres Valles, el área esquiable más grande del mundo, con más de 600 pistas y 180 remontes.
La localidad de Val Thorens pertenece (de mayor a menor) a la región Rhône-Alpes y al departamento Savoie.
El nombre francés de la localidad es Val Thorens, el nombre inglés de la localidad es Val Thorens.
La página web de Val Thorens es http://www.valthorens.com
Visitas destacadas
Es el paraíso de los amantes del esquí. Un lugar mágico que reúne las mejores condiciones para la práctica de este deporte, con unas infraestructuras modernas y un ambiente acogedor, y al tiempo cosmopolita y elegante. Gracias a la altitud a la que se encuentra, la temporada de esquí en la estación de Val Thorens es muy amplia, de mediados de noviembre a principios de mayo. Junto con Les Menuires, Méribel, Saint Martin de Belleville y Courchevel, Val Thorens forma parte del área esquiable más grande del mundo, Los Tres Valles, que fue inaugurado en 1971. Después de saber todo esto, se comprende perfectamente que el pueblo entero esté volcado hacia la estación de esquí. Y es que cuando la temporada de invierno acaba, los esquiadores pueden seguir disfrutando de este deporte esquiando en el glaciar de Péclet, situado junto a Val de Thorens. Un coloso de roca y hielo de nada menos de 3.600 metros de altura que permite alargar el placer del esquí incluso en los meses de verano. Web: http://www.valthorens.com
Una de las montañas más altas del complejo de esquí de Val Thorens es el pico Cime de Caron, con una altitud de 3.200 metros. Desde lo más alto se asiste a un espectáculo único, con unas vistas increíbles del Mont Blanc y del resto de montañas de los Alpes franceses, italianos y suizos. Un lugar impresionante, tanto para los esquiadores como para aquellos que solamente quieren disfrutar de la maravilla del paisaje. Y, aunque parezca mentira, llegar hasta allí es sencillo con el teleférico Cime de Caron, uno de los más grandes del mundo. De hecho, tiene una capacidad de nada menos que 150 personas en cada una de sus cabinas. Otro de los remontes mecánicos más importantes de Val Thorens es el funicular de Péclet, muy cerca de la estación de esquí, y que conduce hasta los pies del glaciar de Péclet en un trayecto de apenas 45 minutos, ida y vuelta. Pero existen otros remontes que nos brindan el acceso a otras montañas de los alrededores, como el telesilla que nos acerca a la Moutière, o el de Les Cascades.
Pero no todo es esquiar en este mundo, ni tampoco en Val de Thorens. Aunque el pueblo esté volcado a este deporte de invierno, hay otras muchas cosas en las que emplear el tiempo libre. Una completa oferta de ocio pensada para el disfrute de los visitantes. Entre estas actividades está la de visitar el centro deportivo del pueblo (Galerie Caron), realmente impresionante. Con unas instalaciones de más de 7.500 metros cuadrados, la diversión está garantizada. En sus dominios es posible hacer ejercicio y ponerse en forma, y también buscar un rato para el relax y el descanso, ya que cuenta con completas instalaciones destinadas al bienestar: dos piscinas con zona de spa, hidromasaje, jacuzzi, sauna, solarium, etc. También se pueden practicar en el centro todo tipo de deportes y actividades como tenis, squash, volley ball. Y pensado para los más pequeños de la familia, además de las piscinas para niños, el centro dispone de un parque infantil de más de 600 metros cuadrados con camas elásticas, castillos hinchables y piscina de bolas. Tel.: +33 (0)4 79 00 00 76. http://boutique.sogevab.com/en/7-val-thorens
Una de las actividades preferidas por los turistas que llegan a Val Thorens, además del esquí, es estar en contacto directo con la naturaleza practicando, por ejemplo, senderismo. Algo que puede disfrutarse especialmente en verano, cuando el tiempo es menos riguroso y el manto blanco de la nieve ha desaparecido para dejar paso al verde de prados y bosques. Existe en la zona una completa red de rutas que ayudan al senderista a conocer los mejores paseos. Algunas de ellas son el Sendero de los Dos Lagos (de 2,1 km.), el Sendero de la Moutière (de 6,1 km.) que lleva al embalse del mismo nombre, o el Sendero de la Marine (de 5 km.), que se inicia después de subir con el telesilla de Cascades. Otra de las rutas más conocidas de la zona es el Sendero de Les Montagnettes (2 km.), que parte hacia el sur en dirección a Les Menuires, ofreciendo unas increíbles panorámicas del valle de Belleville.
La diversión del esquí no se termina con el invierno en Val Thorens. Durante los meses de verano también es posible esquiar en el glaciar de Péclet (3.600 metros de altura sobre el nivel del mar), una de las más espectaculares montañas del macizo de la Vanoise. Se trata de un circo glaciar en el que el agua fluye al oeste durante unos cientos de metros y después cae en el llamado torrente Péclet. El glaciar tiene dos grandes masas de hielo, la cara norte y el West Glacier. Es, precisamente, en la cara norte donde se puede practicar el esquí prácticamente durante todo el año. Sin embargo, no es la única actividad que se realiza en el glaciar, ya que son muchos los visitantes que deciden tomar el telesilla hasta el pie del gran pico con el objetivo de admirar el singular paisaje rocoso.
Es la zona de esquí más grande del mundo. Un área que comprende las estaciones de Val Thorens, Les Menuires, y Sant Martin de Belleville, todas en el valle de Belleville. Los otros dos valles son el de Méribel y el de Courchevel. Este complejo de esquí reúne más de 600 km. de pistas, de las cuales 50 son verdes, 90 azules, más de 100 son rojas y 40 son negras. Uno de los encantos de Los Tres Valles es que la zona puede recorrerse esquiando en el mismo día, todo un reto para los esquiadores más intrépidos.
El Parque Nacional Vanoise fue el primero que se declaró en Francia, en el año 1963. Está localizado en la región de Saboya, en plenos Alpes franceses, y la belleza del paisaje es tal, que se convierte en una más que recomendable excursión para hacer desde Val Thorens, a 44 km. Varias estaciones de esquí rodean al parque, y cerca se localizan pequeños pueblos y ciudades como Champagny-le-Haut, Chiserette, Le Bois o Friburgo. Ya en su parte italiana, la belleza de la naturaleza tiene continuidad en el Parque Nacional Gran Paradiso. Más información en el tel.: +33 4 79 62 30 54.
Cerca de Val Thorens, a 15 km., está el pueblo de Saint Martin de Belleville, situado a 1.400 metros de altitud. Esta localidad está en pleno corazón de la zona esquiable de Los Tres Valles. En el centro del pueblo, destaca la iglesia parroquial (Pza. de l'Église), un edificio no demasiado alto y de aspecto macizo. Sin embargo, sorprende la belleza de su interior, decorado con exquisita elegancia. Llama la atención de forma especial el retablo del altar mayor, que exhibe una decoración espectacular que combina la madera y el dorado. Horario: de 9:00 a 18:30 h. Tel.: +33 (0) 4 79 00 20 00. E-mail: stmartin@st-martin-belleville.com
La carretera de la Croix-de-Fer, o Cruz de Hierro, es la única vía de comunicación que existe entre diversos pueblos de montaña de la zona. Pequeñas aldeas que parecen haber quedado suspendidas en el tiempo y el espacio y que, debido a su profundo aislamiento, permanecen inalteradas a pesar del paso de los años. La carretera de la Croix-de-Fer es una maravilla que merece la pena recorrer solamente para poder admirar su grandioso paisaje. Entre las zonas más espectaculares está el puerto de Collet de Vaujany y la cañada de la Combe d’Olle.
¿Cómo llegar?
- En avión: los aeropuertos más cercanos a Val Thorens son los de Chambery (a 122 km.), Ginebra (155 km.), Grenoble (188 km.) y Lyon (200 km.).
- En tren: la estación de tren más cercana es la de Moutiers-Salins, a 38 km. Después se puede tomar un autobús hasta Val Thorens.
- Por carretera: es la única manera de llegar a Val Thorens, aunque antes hayamos cogido un tren hasta Moutiers o un avión hasta alguno de los aeropuertos cercanos. La red viaria en esta zona es buena, aunque cuenta con los impedimentos propios de la geografía en la que se enclava, por lo que los trayectos son lentos, sobre todo en invierno. Por ejemplo, el viaje desde Moutiers hasta Val Thorens, de 38 km., se hace en una hora aproximadamente.
- En autobús: Val Thorens dispone de una estación de autobuses situada en la Place des Arolles (tel.: +33 (0)4 79 00 06 83). Hasta allí llegan autobuses procedentes de varias ciudades de los alrededores, como Moutiers.
- Transporte público y taxis: una vez en Val Thorens, hay que saber que el tráfico está prohibido en el complejo de esquí, por lo que una vez se haya dejado el equipaje en el hotel, habrá que aparcar el coche en alguno de los aparcamientos que existen. Circular por el pueblo y la estación puede hacerse sin problemas a pie, aunque hay un autobús gratuito que recorre el complejo.
Presentación
Los Alpes franceses encierran lugares increíbles para practicar el esquí y los deportes de invierno. Val Thorens, en el valle de Tarentaise, en Saboya, es uno de ellos. Situado a 2.300 m. de altitud es el pueblo de montaña más alto de Europa. La historia de Val Thorens está vinculada al esquí desde la década de 1960, cuando comenzó a planificarse la estación y se mejoraron los accesos que llevaban hasta allí. Hoy es su principal actividad, ya que atrae a un gran número de turistas cada temporada. Y no es extraño, puesto que forma parte del complejo de Los Tres Valles, el área esquiable más grande del mundo, con más de 600 pistas y 180 remontes.
La localidad de Val Thorens pertenece (de mayor a menor) a la región Rhône-Alpes y al departamento Savoie.
El nombre francés de la localidad es Val Thorens, el nombre inglés de la localidad es Val Thorens.
La página web de Val Thorens es http://www.valthorens.com
Visitas destacadas
Es el paraíso de los amantes del esquí. Un lugar mágico que reúne las mejores condiciones para la práctica de este deporte, con unas infraestructuras modernas y un ambiente acogedor, y al tiempo cosmopolita y elegante. Gracias a la altitud a la que se encuentra, la temporada de esquí en la estación de Val Thorens es muy amplia, de mediados de noviembre a principios de mayo. Junto con Les Menuires, Méribel, Saint Martin de Belleville y Courchevel, Val Thorens forma parte del área esquiable más grande del mundo, Los Tres Valles, que fue inaugurado en 1971. Después de saber todo esto, se comprende perfectamente que el pueblo entero esté volcado hacia la estación de esquí. Y es que cuando la temporada de invierno acaba, los esquiadores pueden seguir disfrutando de este deporte esquiando en el glaciar de Péclet, situado junto a Val de Thorens. Un coloso de roca y hielo de nada menos de 3.600 metros de altura que permite alargar el placer del esquí incluso en los meses de verano. Web: http://www.valthorens.com
Una de las montañas más altas del complejo de esquí de Val Thorens es el pico Cime de Caron, con una altitud de 3.200 metros. Desde lo más alto se asiste a un espectáculo único, con unas vistas increíbles del Mont Blanc y del resto de montañas de los Alpes franceses, italianos y suizos. Un lugar impresionante, tanto para los esquiadores como para aquellos que solamente quieren disfrutar de la maravilla del paisaje. Y, aunque parezca mentira, llegar hasta allí es sencillo con el teleférico Cime de Caron, uno de los más grandes del mundo. De hecho, tiene una capacidad de nada menos que 150 personas en cada una de sus cabinas. Otro de los remontes mecánicos más importantes de Val Thorens es el funicular de Péclet, muy cerca de la estación de esquí, y que conduce hasta los pies del glaciar de Péclet en un trayecto de apenas 45 minutos, ida y vuelta. Pero existen otros remontes que nos brindan el acceso a otras montañas de los alrededores, como el telesilla que nos acerca a la Moutière, o el de Les Cascades.
Pero no todo es esquiar en este mundo, ni tampoco en Val de Thorens. Aunque el pueblo esté volcado a este deporte de invierno, hay otras muchas cosas en las que emplear el tiempo libre. Una completa oferta de ocio pensada para el disfrute de los visitantes. Entre estas actividades está la de visitar el centro deportivo del pueblo (Galerie Caron), realmente impresionante. Con unas instalaciones de más de 7.500 metros cuadrados, la diversión está garantizada. En sus dominios es posible hacer ejercicio y ponerse en forma, y también buscar un rato para el relax y el descanso, ya que cuenta con completas instalaciones destinadas al bienestar: dos piscinas con zona de spa, hidromasaje, jacuzzi, sauna, solarium, etc. También se pueden practicar en el centro todo tipo de deportes y actividades como tenis, squash, volley ball. Y pensado para los más pequeños de la familia, además de las piscinas para niños, el centro dispone de un parque infantil de más de 600 metros cuadrados con camas elásticas, castillos hinchables y piscina de bolas. Tel.: +33 (0)4 79 00 00 76. http://boutique.sogevab.com/en/7-val-thorens
Una de las actividades preferidas por los turistas que llegan a Val Thorens, además del esquí, es estar en contacto directo con la naturaleza practicando, por ejemplo, senderismo. Algo que puede disfrutarse especialmente en verano, cuando el tiempo es menos riguroso y el manto blanco de la nieve ha desaparecido para dejar paso al verde de prados y bosques. Existe en la zona una completa red de rutas que ayudan al senderista a conocer los mejores paseos. Algunas de ellas son el Sendero de los Dos Lagos (de 2,1 km.), el Sendero de la Moutière (de 6,1 km.) que lleva al embalse del mismo nombre, o el Sendero de la Marine (de 5 km.), que se inicia después de subir con el telesilla de Cascades. Otra de las rutas más conocidas de la zona es el Sendero de Les Montagnettes (2 km.), que parte hacia el sur en dirección a Les Menuires, ofreciendo unas increíbles panorámicas del valle de Belleville.
La diversión del esquí no se termina con el invierno en Val Thorens. Durante los meses de verano también es posible esquiar en el glaciar de Péclet (3.600 metros de altura sobre el nivel del mar), una de las más espectaculares montañas del macizo de la Vanoise. Se trata de un circo glaciar en el que el agua fluye al oeste durante unos cientos de metros y después cae en el llamado torrente Péclet. El glaciar tiene dos grandes masas de hielo, la cara norte y el West Glacier. Es, precisamente, en la cara norte donde se puede practicar el esquí prácticamente durante todo el año. Sin embargo, no es la única actividad que se realiza en el glaciar, ya que son muchos los visitantes que deciden tomar el telesilla hasta el pie del gran pico con el objetivo de admirar el singular paisaje rocoso.
Es la zona de esquí más grande del mundo. Un área que comprende las estaciones de Val Thorens, Les Menuires, y Sant Martin de Belleville, todas en el valle de Belleville. Los otros dos valles son el de Méribel y el de Courchevel. Este complejo de esquí reúne más de 600 km. de pistas, de las cuales 50 son verdes, 90 azules, más de 100 son rojas y 40 son negras. Uno de los encantos de Los Tres Valles es que la zona puede recorrerse esquiando en el mismo día, todo un reto para los esquiadores más intrépidos.
El Parque Nacional Vanoise fue el primero que se declaró en Francia, en el año 1963. Está localizado en la región de Saboya, en plenos Alpes franceses, y la belleza del paisaje es tal, que se convierte en una más que recomendable excursión para hacer desde Val Thorens, a 44 km. Varias estaciones de esquí rodean al parque, y cerca se localizan pequeños pueblos y ciudades como Champagny-le-Haut, Chiserette, Le Bois o Friburgo. Ya en su parte italiana, la belleza de la naturaleza tiene continuidad en el Parque Nacional Gran Paradiso. Más información en el tel.: +33 4 79 62 30 54.
Cerca de Val Thorens, a 15 km., está el pueblo de Saint Martin de Belleville, situado a 1.400 metros de altitud. Esta localidad está en pleno corazón de la zona esquiable de Los Tres Valles. En el centro del pueblo, destaca la iglesia parroquial (Pza. de l'Église), un edificio no demasiado alto y de aspecto macizo. Sin embargo, sorprende la belleza de su interior, decorado con exquisita elegancia. Llama la atención de forma especial el retablo del altar mayor, que exhibe una decoración espectacular que combina la madera y el dorado. Horario: de 9:00 a 18:30 h. Tel.: +33 (0) 4 79 00 20 00. E-mail: stmartin@st-martin-belleville.com
La carretera de la Croix-de-Fer, o Cruz de Hierro, es la única vía de comunicación que existe entre diversos pueblos de montaña de la zona. Pequeñas aldeas que parecen haber quedado suspendidas en el tiempo y el espacio y que, debido a su profundo aislamiento, permanecen inalteradas a pesar del paso de los años. La carretera de la Croix-de-Fer es una maravilla que merece la pena recorrer solamente para poder admirar su grandioso paisaje. Entre las zonas más espectaculares está el puerto de Collet de Vaujany y la cañada de la Combe d’Olle.
¿Cómo llegar?
- En avión: los aeropuertos más cercanos a Val Thorens son los de Chambery (a 122 km.), Ginebra (155 km.), Grenoble (188 km.) y Lyon (200 km.).
- En tren: la estación de tren más cercana es la de Moutiers-Salins, a 38 km. Después se puede tomar un autobús hasta Val Thorens.
- Por carretera: es la única manera de llegar a Val Thorens, aunque antes hayamos cogido un tren hasta Moutiers o un avión hasta alguno de los aeropuertos cercanos. La red viaria en esta zona es buena, aunque cuenta con los impedimentos propios de la geografía en la que se enclava, por lo que los trayectos son lentos, sobre todo en invierno. Por ejemplo, el viaje desde Moutiers hasta Val Thorens, de 38 km., se hace en una hora aproximadamente.
- En autobús: Val Thorens dispone de una estación de autobuses situada en la Place des Arolles (tel.: +33 (0)4 79 00 06 83). Hasta allí llegan autobuses procedentes de varias ciudades de los alrededores, como Moutiers.
- Transporte público y taxis: una vez en Val Thorens, hay que saber que el tráfico está prohibido en el complejo de esquí, por lo que una vez se haya dejado el equipaje en el hotel, habrá que aparcar el coche en alguno de los aparcamientos que existen. Circular por el pueblo y la estación puede hacerse sin problemas a pie, aunque hay un autobús gratuito que recorre el complejo.