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El castillo renacentista de Nadasdy
La historia de la fortaleza se remonta al establecimiento de los hunos en la cuenca de los Cárpatos. Aquí erigieron una primera edificación, un primitivo castillo que sufrió múltiples modificaciones y ampliaciones en los siglos posteriores, siendo ocupado por importantes personajes históricos. La familia Nádasdy le dio el nombre que ostenta ahora. Pero también fue propiedad de los reyes de Baviera; Ludwig III murió allí en 1921, tres años después de haber sido depuesto. Además otro Ludwig, nieto del príncipe Alberto de Baviera, utilizó la fortaleza para refugiarse durante la Segunda Guerra Mundial. En el tiempo que duró el conflicto bélico fue usada asimismo como centro de internamiento para los soldados polacos que llegaron a Hungría en 1939. Como dato curioso cabe destacar que el primer libro de Hungría, El Nuevo Testamento de 1541, se imprimió en el Castillo de Nádasdy, que está siendo redescubierto por historiadores y arqueólogos con fondos de la Unión Europea. Situado en un parque en el centro de la ciudad, hoy día alberga un museo, una biblioteca y un centro cultural. Un jardín botánico bien cuidado lo rodea. Nada como este lugar emblemático para conocer más de cerca cómo era Sárvár en el pasado.
Arboretum: un magnífico jardín botánico
Reúne una de las colecciones botánicas más antiguas de Hungría y más variadas: 300 especies de árboles y arbustos componen este espléndido jardín. Después de haber estado abandonado durante mucho tiempo, en 1803 Fernando de Habsburgo compró el castillo y los terrenos circundantes. Para hacer florecer de nuevo el jardín, se plantaron frutales en una parte y en otras áreas se creó un jardín Inglés, manteniendo los árboles más antiguos y los robles que habían sobrevivido al tiempo y el olvido. En 1868 el conde Ludwig de Baviera lo heredó y encargó a los mejores jardineros de la época un trabajo paisajístico que incluía los bosques y las zonas de pradera de alrededor de la ciudad. El arboretum cuenta con viejos ejemplares de robles de más de 400 años, así como fresnos, olmos más jóvenes que rodean el estanque de una hectárea junto con varias especies comunes de arbustos. Otra parte está ocupada por un jardín botánico con tejos, variedades japonesas de maderas exóticas, pinos negros… Posteriormente se plantaron magnolios, también hoy centenarios, rododendros, azaleas… No hay nada como un paseo en plena primavera para gozar de un espectáculo fascisnante.
Iglesia de San László
Situada en la plaza del mercado de la entonces villa de Sárvár, su construcción fue iniciada en 1645 por mandato del juez Ferenc Nádasdy, que se había convertido al catolicismo dos años antes. Fue consagrada a San Lászlo. Del templo original diseñado por Pietro Orsolini poco queda. Fue destruido en su gran mayoría durante la Guerra de la Independencia de Rákóczi y reconstruido en 1732. En 1830 se añadieron dos anexos abovedados y se transformó su primitiva planta de cruz griega en una iglesia de cruz latina. También la fachada occidental es de la misma época. La nueva iglesia, mucho más amplia, “estrenó” otra distribución interior, ya que el santuario se trasladó a su lado occidental y la parte oriental se completó con una fachada clasicista, además de una capilla dedicada al patrón de la iglesia. Las vidrieras que se pueden ver hoy en día son un recordatorio de las originales. En su interior está una escultura muy famosa en Sárvár, la columna de la tristeza de Jesús.
Otras iglesias interesantes
- Iglesia de San Marcos. Aparte del castillo, la iglesia de San Marcos, en Rábasömjén, es el único monumento de la época de la dinastía de Árpád en Sárvár. En el siglo XIII el templo estaba consagrado a San Pedro, cambiando su nombre por el de San Marcos en siglos posteriores. Las ventanas gemelas de su torre, su puerta de entrada ornamentada, la puerta de entrada a la sacristía y la orientación hacia el este del edificio recuerdan su origen románico. Por eso, durante su reconstrucción en 1933, se levantó una fachada neo-románica. En el interior hay frescos con escenas de la vida de Jesús y de San Marcos realizados por József Pruzdik.
- Iglesia evangélica. Después de la declaración de la Ley de la Tolerancia, 218 iglesias evangélicas fueron construidas en Hungría entre los años 1782-1787. El fuego destruyó la primera en 1829, reemplazada por un edificio de estilo clasicista cuyo constructor fue el arquitecto Sámuel Geschrey. Es un espléndido ejemplo de la arquitectura característica de la región húngara de Transdanubia.
Museo de Násdady
Acoge varias exposiciones interesantes: Exposición de Artes Industriales. Es una muestra de la fabricación de muebles a través de los siglos y exhibe también colecciones de objetos cotidianos usados por las clases aristocráticas que ocuparon el castillo: cubiertos de plata y vajillas pintadas de la familia Wittelsbach, objetos de cristal hechos a mano y pintados pertenecientes al emperador Francisco José, al zar Nicolás II, etc. Exposición sobre los húsares. Orígenes e historia centenaria de los soldados “húngaros por antonomasia”, los húsares. Las vitrinas muestran armas, ropa, pinturas y fotografías de los siglos XVI al XX. La colección de sables, donada por Lajos Sárvári, es particularmente interesante. Cartografía húngara. El museo reúne una bella muestra de mapas originales recopilados de los siglos XVI al XVIII de Hungría y sus estados vecinos. Además conserva un mapa de Panonia de Ptolomeo, el antiguo cartógrafo. Todos y cada uno son una pieza de arte.
Horario de apertura: Todos los días, excepto los lunes, de 9 a 5 pm. En julio y agosto de 9 am a 9 pm.
Una ciudad-balneario
Sárvár es una ciudad conocida por sus numerosos balnearios al aire libre que ofrecen todo tipo de servicios terapéuticos para dolencias musculares, de huesos, de piel… así como tratamientos de relajación para los visitantes, desde masajes a chocolaterapia, por poner solo dos ejemplos. Borgáta Thermal Bath y Mesteri Spa Bath son dos de los más conocidos. Pero si además de los servicios de un balneario se quiere disfrutar de la diversión de un parque acuático, no hay que dejar de visitar Bükfürdő, un inmenso centro de salud y ocio con toboganes gigantes, piscinas de agua caliente y fría, saunas, spas…
Adventure park
Muy cerca del spa y del wellness center, un parque de aventuras en mitad de un bosque invita a los más atrevidos a practicar deporte “extremo” al aire libre y en plena naturaleza. En este parque de aventuras se puede practicar escalada, tiro con arco, descender a toda velocidad en tirolinas sobre el lago, o cruzar entre los árboles por un puente tibetano a una altura de 8 metros. ¡Todo un reto incluso para los más valientes! Una atractiva propuesta dirigida a públicos de todas las edades.
Estaciones de la Cruz en Csénye
El bello entorno natural de la aldea, rodeada de bosques y de arroyos garantizan las condiciones perfectas para el turismo ecuestre. Uno de los lugares más interesantes de esta localidad situada a poca distancia de Sárvár son las "Estaciones de la Cruz", que se suceden a lo largo de la calle Deák Ferenc hasta la capilla situada al final de la misma, construida en el siglo XIX. También es recomendable acercarse hasta el parque Elek Benedek, en el que se expone una muestra de juguetes de madera.
Ikevár y Káld, tumbas húngaras y bosques
Uno de los monumento más famosos de Ikervár es la estatua de Ladislao Batthyány - obra del escultor Jenő Bory -. Miembro de una familia noble que se remonta a la fundación del país en el siglo IX, Ladislao Batthyány fue primer ministro de Hungría y vivió en la ciudad. El municipio guarda un valioso legado histórico y arqueológico, ya que en este lugar se encontró un cementerio de la época de la conquista de Hungría (896 dC) con 140 tumbas. También hay hallazgos de piezas de cerámica de la época romana. Ikervár-Káld: El límite de la ciudad llega al bosque Wolves, un espacio natural de cuento de hadas y hogar de robles y hayas, algunos con más de 300 años. Para visitar en Káld: la iglesia católica de San Juan Bautista, el castillo (Káldy) del barroco tardío (Farmacia) y el Castillo de Marothy (restaurante Hubertus).
Redactor :
Marion Rouillot
