Presentación
Fiumicino es una localidad de cerca de 60.500 habitantes que se encuentra en la costa del mar Tirreno, en el oeste de Italia. Se encuentra muy cerca de Roma y en ella se encuentra el aeropuerto Leonardo da Vinci, el más importante del país. Fiumicino es un pueblo de pescadores muy conocido por sus restaurantes en los que se come marisco fresco.
Las playas de Fiumicino son de color negro debido a la gran cantidad de hierro que tiene esta costa, y son el lugar ideal de descanso para los habitantes de Roma.
El clima en Fiumicino se caracteriza por tener veranos muy cálidos e inviernos fríos pero sin que las temperaturas lleguen a bajar de los 0 grados centígrados. Durante los meses de otoño se registra la mayor cantidad de precipitaciones de todo el año.
Fiumicino se encuentra en el huso horario GMT+1, la moneda de uso es el euro.
La localidad de Fiumicino pertenece (de mayor a menor) a la región Lazio, a la provincia Roma y al distrito Fiumicino.
La localidad de Fiumicino cubre 222 km², tiene 70.985 habitantes (censo 2009) y una densidad de 319,75 habitantes por km². La altitud mínima es de 4 m, la altitud máxima es de 4 m, la altitud media es de 1 m.
El actual alcade de Fiumicino es Mario Canapini.
El gentilicio para los habitantes de Fiumicino es fiumicinesi. El nombre francés de la localidad es Fiumicino, el nombre inglés de la localidad es Fiumicino.
El Patrón de la localidad de Fiumicino es San Hipólito de Roma. La página web de Fiumicino es http://www.fiumicino.net
Visitas destacadas
La isola sacra, o isla sagrada, se construyó artificialmente durante el gobierno del emperador Trajano. Se construyó un canal que unía la ciudad de Portus con el Tíber para facilitar el acceso de los barcos procedentes e Egipto y Asia hasta Ostia Antica. Fiumicino significa "río pequeño", se cree que como referencia al canal artificial construido en la época romana. Durante mucho tiempo la isla fue un importante cruce de caminos que fue creciendo gracias a los sedimentos que el Tiber ha ido dejando en sus crecidas.
Debido a la importancia de la isla durante el siglo I a.C., se construyó una necrópolis en los alrededores de las carreteras que se descubrió en la primera mitad del siglo XX. Las construcciones eran muy grandes, algunas de dos pisos, y prolijamente decoradas con pinturas, estucos y mosaicos.
Otro lugar destacado de Isola Sacra son sus antiguas termas, conocidas como Termas de Matidia. El edificio principal se construyó en el siglo II y se mantuvo en uso hasta el siglo VI. Por último, destaca la iglesia de San Hipólito, construida entre los siglos IV yV.
Dirección de la Necrópolis: Via di Monte Spinoncia 52, Fiumicino, Italia.
Horario: noviembre-febrero 9:00-16:00, marzo-octubre 9:00-17:00.
Precio: gratuito.
Teléfono: +39 06 658 3888
e-mail: sbao-osan@beniculturali.it
El Puerto de Trajano se construyó en el siglo I para modernizar el sistema portuario de la zona. El nuevo puerto se encontraba más cerca del interior, por lo que se encontraba más resguardado y menos amenazado por las tempestades que el antiguo, construido bajo el mandato del emperador Claudio. El puerto tiene forma hexagonal y una extensión de 32 hectáreas.
Durante la Edad Media el puerto se fue abandonando. De la magnífica obra de ingeniería romana quedan hoy en pie el Palacio Episcopal y un anfiteatro descubierto a principios del siglo XXI.
El coliseo de Puerto de Trajano ha ayudado a mostrar al gran público que este tipo de construcciones eran muy habituales en la época romana y que se realizaban en todos los tamaños y para fines muy diversos. A pesar de que los coliseos más conocidos son de gran tamaño y se utilizaban para espectáculos de animales salvajes y gladiadores, en otras ocasiones los coliseos tienen un tamaño pequeño y se utilizaban como teatros privados o como edificios administrativos, como es el caso del coliseo del Palacio de Trajano.
El Palacio Episcopal se puede ver a lo largo del foso de Trajano, con planta rectangular y una entrada principal decorada con columnas clásicas.
Durante las excavaciones para la construcción del aeropuerto Leonardo da Vinci se encontraron los restos del Puerto de Claudio. La sorpresa fue muy grande cuando se desenterraron numerosas barcas, cascos de cargueros romanos que se conservaban enteros y barcas de pescadores. Los restos hallados en Fiumicino permitieron aprender muchas cosas sobre las costumbres y la vida marítima en la época romana. Uno de los descubrimientos más sorprendentes fue que los romanos utilizaban barcos tan grandes como para transportar 1.500 toneladas, barcos de un tamaño tan grande que no se volvieron a construir hasta finales del siglo XVIII.
El Museo de los Barcos Romanos presenta una amplia exposición que muestra los hallazgos descubiertos en el Puerto de Claudio. La muestra no consiste únicamente en barcos y barcas, también se pueden contemplar otros utensilios de utilidad para los marinos como ánforas y otros contenedores para el transporte de aceite y grano.
El museo también muestra cómo conseguían los pescadores romanos llegar a puerto con el pescado aún fresco. Los barcos contaban con un agujero en su interior que permitía la entrada de agua salada a una especie de acuario en el que mantenían a las piezas capturadas vivas hasta la llegada a tierra firme.
Dirección: Via A. Guidoni 35, Fiumicino, Italia.
Horario: M-D 9:00-13:00, M y J también 14:30-16:30.
A pesar de los muchos lugares de interés cultural que ofrece Fiumicino y las tentadoras ciudades de sus alrededores, merece la pena reservar al menos un día para disfrutar de las playas de Fiumicino. Playas mediterráneas en las que disfrutar del buen tiempo, aguas tranquilas y templadas, y de largos días de sol.
El acceso a las playas suele ser de pago, solo algunas de las playas son de acceso gratuito, aunque lamentablemente suelen ser las más alejadas o las más masificadas. Hay playas con precio accesible y es recomendable acceder a ellas siempre que sea posible para disfrutar sin aglomeraciones de las calas más bonitas. En estas playas es posible practicar deportes acuáticos y también pescar, siempre y cuando se tengan los permisos reglamentarios.
Las playas de Castelporziano y Capocotta son de acceso libre. Castelporziano cuenta con dunas y vegetación en los alrededores, Capocotta forma parte de una reserva natural que se ha convertido en lugar de reunión de nudistas y de aquellos que quieren disfrutar de un poco de fiesta cerca del mar.
En todas las playas de la costa romana es habitual encontrar bares y restaurantes para disfrutar de la gastronomía después de un largo día de playa.
A tan solo 9 kilómetros de distancia de Fiumicino se encuentra Ostia Antica, uno de los lugares más interesantes de los alrededores. Ostia Antica fue una de las ciudades más importantes de la costa tirrena de la época romana ya que gracias al puerto se convirtió en un importante centro comercial. Después de años de esplendor la ciudad cayó en el olvido y permaneció enterrada bajo arena durante varios siglos. Hoy en día Ostia Antica está muy bien conservada y se pueden ver muchos de los edificios tal y como se utilizaban durante la época romana.
Se debe recorrer la ciudad por la calzada principal, a los lados se mantienen en pie las fachadas de antiguos almacenes, tiendas y tabernas. En esta calzada se encuentra también el Teatro, que se ha rehabilitado y vuelve a tener su función inicial, acogiendo representaciones durante el verano. Entre los restos más significativos de Ostia Antica se encuentran las ruinas de 18 templos erigidos en honor al dios de origen persa Mitra, una sinagoga judía y una iglesia cristiana. Estos restos son muy importantes desde el punto de vista histórico porque indican que Ostia Antica fue una ciudad cosmopolita.
Horario: octubre-15 febrero 8:30-15:30, 15 febrero-15 marzo 8:30-16:00, marzo 8:30-16:30, abril-agosto 8:30-18:15, septiembre 8:30-18:00. Lunes cerrado
Precio: 11 euros.
Sería impensable pasar unos días en Fiumicino y no acercarse a Roma. El simple hecho de pasear por sus calles transporta al visitante a épocas remotas, gracias al excelente grado de conservación de los edificios históricos. Admirar el Coliseo, pasear por el Foro, pasear por la Plaza de España, tirar una moneda en la Fontana de Trevi, pasar un rato en la Plaza del Popolo, contemplar el Palacio de Víctor Manuel y hacer una visita al Vaticano resulta tan imprescindible como agradable cuando se visita Roma.
Roma se encuentra a 25 kilómetros de Fiumicino. El aeropuerto es la zona mejor comunicada con Roma, se puede tomar un tren que realiza el trayecto en media hora por 14 euros.
Tivoli es una preciosa ciudad antigua situada a 74 kilómetros de Fiumiccino. Sus villas y las grandes construcciones la han convertido en un destino muy turístico por el que merece la pena pasear. La villa Adriana, donde el emperador Adriano se retiraba a descansar para ser feliz fuera del Palacio Palatino y la villa Gregoriana, encargada por el Papa Gregorio, son dos de las más hermosas. Para completar la visita no deben faltar el Duomo, el Anfiteatro, la Rocca Pía construida por Pío II y el Santuario de Hércules.
Desde Fiumicino se puede coger un tren hasta Tivoli haciendo trasbordo en Roma, el precio varía entre los 11 y los 16 euros.
El lago Albano se encuentra en la localidad de Castel Gandolfo, conocida por ser el lugar elegido habitualmente por los papas para pasar el verano. El lago es de origen volcánico y está formado por dos cráteres unidos y tiene 175 metros de profundidad y se caracteriza por encontrase a 293 metros sobre el nivel del mar. El lago Albano se encuentra dentro del Parque Regional dei Castelli Romani, donde se puede disfrutar de la naturaleza a pie o en bicicleta.
Lago Albano se encuentra a 45 kilómetros de Fiumicino, el tren realiza el trayecto en 1:30 horas, el precio del billete sencillo es de 16,10 euros.
A 72 kilómetros de distancia de Fiumicino se encuentra el Lago Bracciano, un hermoso lago de origen volcánico cuyos principales atractivos son las pequeñas villas medievales que se encuentran en sus orillas. El Castillo Orsini-Odescalchi es una de las joyas de la zona, se conserva en perfecto estado y se pueden visitar algunas de las estancias decoradas con mobiliario de la época. Las ciudades de Anguillara, Bracciano y Trevignano son las más bonitas, merece la pena pasear por ellas y contemplar sus características aún medievales.
Para llegar hasta Bracciano se puede coger el tren, que realiza el trayecto en 1:30 horas, el precio del billete sencillo es de 11 euros.
¿Cómo llegar?
En avión: como ya hemos comentado anteriormente, el aeropuerto más importante de Italia se encuentra en Fiumicino, por lo que se puede llegar hasta la ciudad desde prácticamente cualquier rincón del mundo. En este aeropuerto operan numerosas compañías aéreas entre las que se encuentran Aer Lingus, Aerolíneas Argentinas, Aeromexico, Air Canada, Air China, Air France, Air Berlin, Alitalia, American Airlines, British Airways, EasyJet, Iberia, KLM, Lufthansa, Qatar Airways, Ryanair y Swiss.
Desplazarse desde el aeropuerto hasta Fiumicino es más complicado de lo que pueda parecer, ya que los servicios están orientados al traslado de pasajeros hasta Roma. Hay taxis especiales que solamente realizan el trayecto hasta Fiumicino, el precio cerrado es de 20 euros más el suplemento por maleta o por más de un pasajero.
Por carretera: la SS296 comunica Fiumicino hacia el interior, directamente con Roma. La A12 y E 80 parten desde el aeropuerto. La SP601 comunica hacia el sur bordeando la costa.
En tren: Trenitalia gestiona los traslados en tren de todo el país. Fiumicino está bien comunicado con cualquier punto de Italia, pero la estación se encuentra en el aeropuerto.
Trenitalia: http://www.trenitalia.com/
En la ciudad: Fiumicino es una ciudad pequeña en la que no es necesario el transporte público.
Presentación
Fiumicino es una localidad de cerca de 60.500 habitantes que se encuentra en la costa del mar Tirreno, en el oeste de Italia. Se encuentra muy cerca de Roma y en ella se encuentra el aeropuerto Leonardo da Vinci, el más importante del país. Fiumicino es un pueblo de pescadores muy conocido por sus restaurantes en los que se come marisco fresco.
Las playas de Fiumicino son de color negro debido a la gran cantidad de hierro que tiene esta costa, y son el lugar ideal de descanso para los habitantes de Roma.
El clima en Fiumicino se caracteriza por tener veranos muy cálidos e inviernos fríos pero sin que las temperaturas lleguen a bajar de los 0 grados centígrados. Durante los meses de otoño se registra la mayor cantidad de precipitaciones de todo el año.
Fiumicino se encuentra en el huso horario GMT+1, la moneda de uso es el euro.
La localidad de Fiumicino pertenece (de mayor a menor) a la región Lazio, a la provincia Roma y al distrito Fiumicino.
La localidad de Fiumicino cubre 222 km², tiene 70.985 habitantes (censo 2009) y una densidad de 319,75 habitantes por km². La altitud mínima es de 4 m, la altitud máxima es de 4 m, la altitud media es de 1 m.
El actual alcade de Fiumicino es Mario Canapini.
El gentilicio para los habitantes de Fiumicino es fiumicinesi. El nombre francés de la localidad es Fiumicino, el nombre inglés de la localidad es Fiumicino.
El Patrón de la localidad de Fiumicino es San Hipólito de Roma. La página web de Fiumicino es http://www.fiumicino.net
Visitas destacadas
La isola sacra, o isla sagrada, se construyó artificialmente durante el gobierno del emperador Trajano. Se construyó un canal que unía la ciudad de Portus con el Tíber para facilitar el acceso de los barcos procedentes e Egipto y Asia hasta Ostia Antica. Fiumicino significa "río pequeño", se cree que como referencia al canal artificial construido en la época romana. Durante mucho tiempo la isla fue un importante cruce de caminos que fue creciendo gracias a los sedimentos que el Tiber ha ido dejando en sus crecidas.
Debido a la importancia de la isla durante el siglo I a.C., se construyó una necrópolis en los alrededores de las carreteras que se descubrió en la primera mitad del siglo XX. Las construcciones eran muy grandes, algunas de dos pisos, y prolijamente decoradas con pinturas, estucos y mosaicos.
Otro lugar destacado de Isola Sacra son sus antiguas termas, conocidas como Termas de Matidia. El edificio principal se construyó en el siglo II y se mantuvo en uso hasta el siglo VI. Por último, destaca la iglesia de San Hipólito, construida entre los siglos IV yV.
Dirección de la Necrópolis: Via di Monte Spinoncia 52, Fiumicino, Italia.
Horario: noviembre-febrero 9:00-16:00, marzo-octubre 9:00-17:00.
Precio: gratuito.
Teléfono: +39 06 658 3888
e-mail: sbao-osan@beniculturali.it
El Puerto de Trajano se construyó en el siglo I para modernizar el sistema portuario de la zona. El nuevo puerto se encontraba más cerca del interior, por lo que se encontraba más resguardado y menos amenazado por las tempestades que el antiguo, construido bajo el mandato del emperador Claudio. El puerto tiene forma hexagonal y una extensión de 32 hectáreas.
Durante la Edad Media el puerto se fue abandonando. De la magnífica obra de ingeniería romana quedan hoy en pie el Palacio Episcopal y un anfiteatro descubierto a principios del siglo XXI.
El coliseo de Puerto de Trajano ha ayudado a mostrar al gran público que este tipo de construcciones eran muy habituales en la época romana y que se realizaban en todos los tamaños y para fines muy diversos. A pesar de que los coliseos más conocidos son de gran tamaño y se utilizaban para espectáculos de animales salvajes y gladiadores, en otras ocasiones los coliseos tienen un tamaño pequeño y se utilizaban como teatros privados o como edificios administrativos, como es el caso del coliseo del Palacio de Trajano.
El Palacio Episcopal se puede ver a lo largo del foso de Trajano, con planta rectangular y una entrada principal decorada con columnas clásicas.
Durante las excavaciones para la construcción del aeropuerto Leonardo da Vinci se encontraron los restos del Puerto de Claudio. La sorpresa fue muy grande cuando se desenterraron numerosas barcas, cascos de cargueros romanos que se conservaban enteros y barcas de pescadores. Los restos hallados en Fiumicino permitieron aprender muchas cosas sobre las costumbres y la vida marítima en la época romana. Uno de los descubrimientos más sorprendentes fue que los romanos utilizaban barcos tan grandes como para transportar 1.500 toneladas, barcos de un tamaño tan grande que no se volvieron a construir hasta finales del siglo XVIII.
El Museo de los Barcos Romanos presenta una amplia exposición que muestra los hallazgos descubiertos en el Puerto de Claudio. La muestra no consiste únicamente en barcos y barcas, también se pueden contemplar otros utensilios de utilidad para los marinos como ánforas y otros contenedores para el transporte de aceite y grano.
El museo también muestra cómo conseguían los pescadores romanos llegar a puerto con el pescado aún fresco. Los barcos contaban con un agujero en su interior que permitía la entrada de agua salada a una especie de acuario en el que mantenían a las piezas capturadas vivas hasta la llegada a tierra firme.
Dirección: Via A. Guidoni 35, Fiumicino, Italia.
Horario: M-D 9:00-13:00, M y J también 14:30-16:30.
A pesar de los muchos lugares de interés cultural que ofrece Fiumicino y las tentadoras ciudades de sus alrededores, merece la pena reservar al menos un día para disfrutar de las playas de Fiumicino. Playas mediterráneas en las que disfrutar del buen tiempo, aguas tranquilas y templadas, y de largos días de sol.
El acceso a las playas suele ser de pago, solo algunas de las playas son de acceso gratuito, aunque lamentablemente suelen ser las más alejadas o las más masificadas. Hay playas con precio accesible y es recomendable acceder a ellas siempre que sea posible para disfrutar sin aglomeraciones de las calas más bonitas. En estas playas es posible practicar deportes acuáticos y también pescar, siempre y cuando se tengan los permisos reglamentarios.
Las playas de Castelporziano y Capocotta son de acceso libre. Castelporziano cuenta con dunas y vegetación en los alrededores, Capocotta forma parte de una reserva natural que se ha convertido en lugar de reunión de nudistas y de aquellos que quieren disfrutar de un poco de fiesta cerca del mar.
En todas las playas de la costa romana es habitual encontrar bares y restaurantes para disfrutar de la gastronomía después de un largo día de playa.
A tan solo 9 kilómetros de distancia de Fiumicino se encuentra Ostia Antica, uno de los lugares más interesantes de los alrededores. Ostia Antica fue una de las ciudades más importantes de la costa tirrena de la época romana ya que gracias al puerto se convirtió en un importante centro comercial. Después de años de esplendor la ciudad cayó en el olvido y permaneció enterrada bajo arena durante varios siglos. Hoy en día Ostia Antica está muy bien conservada y se pueden ver muchos de los edificios tal y como se utilizaban durante la época romana.
Se debe recorrer la ciudad por la calzada principal, a los lados se mantienen en pie las fachadas de antiguos almacenes, tiendas y tabernas. En esta calzada se encuentra también el Teatro, que se ha rehabilitado y vuelve a tener su función inicial, acogiendo representaciones durante el verano. Entre los restos más significativos de Ostia Antica se encuentran las ruinas de 18 templos erigidos en honor al dios de origen persa Mitra, una sinagoga judía y una iglesia cristiana. Estos restos son muy importantes desde el punto de vista histórico porque indican que Ostia Antica fue una ciudad cosmopolita.
Horario: octubre-15 febrero 8:30-15:30, 15 febrero-15 marzo 8:30-16:00, marzo 8:30-16:30, abril-agosto 8:30-18:15, septiembre 8:30-18:00. Lunes cerrado
Precio: 11 euros.
Sería impensable pasar unos días en Fiumicino y no acercarse a Roma. El simple hecho de pasear por sus calles transporta al visitante a épocas remotas, gracias al excelente grado de conservación de los edificios históricos. Admirar el Coliseo, pasear por el Foro, pasear por la Plaza de España, tirar una moneda en la Fontana de Trevi, pasar un rato en la Plaza del Popolo, contemplar el Palacio de Víctor Manuel y hacer una visita al Vaticano resulta tan imprescindible como agradable cuando se visita Roma.
Roma se encuentra a 25 kilómetros de Fiumicino. El aeropuerto es la zona mejor comunicada con Roma, se puede tomar un tren que realiza el trayecto en media hora por 14 euros.
Tivoli es una preciosa ciudad antigua situada a 74 kilómetros de Fiumiccino. Sus villas y las grandes construcciones la han convertido en un destino muy turístico por el que merece la pena pasear. La villa Adriana, donde el emperador Adriano se retiraba a descansar para ser feliz fuera del Palacio Palatino y la villa Gregoriana, encargada por el Papa Gregorio, son dos de las más hermosas. Para completar la visita no deben faltar el Duomo, el Anfiteatro, la Rocca Pía construida por Pío II y el Santuario de Hércules.
Desde Fiumicino se puede coger un tren hasta Tivoli haciendo trasbordo en Roma, el precio varía entre los 11 y los 16 euros.
El lago Albano se encuentra en la localidad de Castel Gandolfo, conocida por ser el lugar elegido habitualmente por los papas para pasar el verano. El lago es de origen volcánico y está formado por dos cráteres unidos y tiene 175 metros de profundidad y se caracteriza por encontrase a 293 metros sobre el nivel del mar. El lago Albano se encuentra dentro del Parque Regional dei Castelli Romani, donde se puede disfrutar de la naturaleza a pie o en bicicleta.
Lago Albano se encuentra a 45 kilómetros de Fiumicino, el tren realiza el trayecto en 1:30 horas, el precio del billete sencillo es de 16,10 euros.
A 72 kilómetros de distancia de Fiumicino se encuentra el Lago Bracciano, un hermoso lago de origen volcánico cuyos principales atractivos son las pequeñas villas medievales que se encuentran en sus orillas. El Castillo Orsini-Odescalchi es una de las joyas de la zona, se conserva en perfecto estado y se pueden visitar algunas de las estancias decoradas con mobiliario de la época. Las ciudades de Anguillara, Bracciano y Trevignano son las más bonitas, merece la pena pasear por ellas y contemplar sus características aún medievales.
Para llegar hasta Bracciano se puede coger el tren, que realiza el trayecto en 1:30 horas, el precio del billete sencillo es de 11 euros.
¿Cómo llegar?
En avión: como ya hemos comentado anteriormente, el aeropuerto más importante de Italia se encuentra en Fiumicino, por lo que se puede llegar hasta la ciudad desde prácticamente cualquier rincón del mundo. En este aeropuerto operan numerosas compañías aéreas entre las que se encuentran Aer Lingus, Aerolíneas Argentinas, Aeromexico, Air Canada, Air China, Air France, Air Berlin, Alitalia, American Airlines, British Airways, EasyJet, Iberia, KLM, Lufthansa, Qatar Airways, Ryanair y Swiss.
Desplazarse desde el aeropuerto hasta Fiumicino es más complicado de lo que pueda parecer, ya que los servicios están orientados al traslado de pasajeros hasta Roma. Hay taxis especiales que solamente realizan el trayecto hasta Fiumicino, el precio cerrado es de 20 euros más el suplemento por maleta o por más de un pasajero.
Por carretera: la SS296 comunica Fiumicino hacia el interior, directamente con Roma. La A12 y E 80 parten desde el aeropuerto. La SP601 comunica hacia el sur bordeando la costa.
En tren: Trenitalia gestiona los traslados en tren de todo el país. Fiumicino está bien comunicado con cualquier punto de Italia, pero la estación se encuentra en el aeropuerto.
Trenitalia: http://www.trenitalia.com/
En la ciudad: Fiumicino es una ciudad pequeña en la que no es necesario el transporte público.