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El centro histórico de la ciudad
Aunque de reducidas dimensiones, el centro histórico de Grado es de una gran belleza. Se trata de un pequeño barrio de carácter medieval en el que las calles estrechas se compaginan con plazas recoletas, destilando sabor popular a raudales. El casco viejo resulta un poco laberíntico y allí es fácil perder el sentido de la orientación. Esto, al contrario de ser un inconveniente, resulta más bien un placer que merece la pena experimentar. Y es que uno no debe marcharse de Grado sin perderse entre las viejas casas de pescadores de la ciudad, y sin recorrer los enrevesados callejones haciendo algunas paradas en los restaurantes de la zona, muy acogedores. La ciudad de Grado tiene otras zonas interesantes que recorrer. Una de ellas es la zona peatonal, con calles comerciales llenas de tiendas interesantes y establecimientos repletos de glamour. Destaca la Piazza Marin, en la que se han descubierto restos arqueológicos que pertenecen a una basílica muy antigua, y que pueden visitarse ya que se encuentran al aire libre. También resulta interesante el paseo marítimo de Grado, un precioso recorrido con unas espectaculares vistas, así como el puerto de pescadores y el puerto deportivo, repletos de barcos.
Terme Marine, salud y bienestar
Todos aquellos que llegan hasta Grado buscando la paz, el relax y el bienestar del cuerpo y el alma han de hacer una visita a la Terme Marine, un increíble balneario que se localiza en la playa y en el que se puede disfrutar de increíbles tratamientos termales. Los Baños de Grado surgen a finales del siglo XIX, cuando quedan probadas las cualidades beneficiosas del agua de la zona. A partir de entonces, el balneario no ha hecho más que crecer y desarrollarse, convirtiéndose en uno de los alicientes turísticos de la ciudad. Así, si se desea pasar unas vacaciones relajantes, en las que recuperar la tranquilidad del espíritu y disfrutar de algunos de los mejores tratamientos de belleza y salud, Grado es el destino perfecto. El spa Terme Marine pone a disposición de los turistas su amplio repertorio de servicios para luchar contra los efectos del paso de los años sobre nuestro cuerpo, es decir, los mejores tratamientos antiedad. También dispone de un completo centro de fitness para que todos vuelvan a casa en plena forma. Allí se puede asistir a cursos de natación y de otras actividades acuáticas, así como disfrutar de las piscinas climatizadas de agua de mar. También es posible recibir tratamiento para las afecciones reumáticas y musculares.
Disfrutar de las maravillosas playas de la zona
Son uno de los tesoros más importantes de la ciudad, y no es extraño que atraigan a tantos turistas durante la temporada de verano. La más importante es la conocida como Playa Principal, bastante extensa, que recorre la mayor parte de la ciudad, en especial la zona turística de Grado donde se localizan los grandes hoteles. Esta playa tiene unos 3 kilómetros de longitud. Es en esta playa donde se ubica el balneario Terme Marine. En Grado hay también una playa más pequeña, la llamada Spiaggia Costa Azzurra, la playa de poniente. Se trata de un lugar especialmente frecuentado por los turistas más jóvenes que visitan la ciudad. En cualquier caso, ambas playas cuentan con el distintivo de Bandera Azul, lo que garantiza su perfecto estado de mantenimiento, y desde las dos se tienen unas vistas maravillosas del Adriático, lo que convierte el baño en toda una experiencia. Las playas de Grado cuentan con todos los servicios que los visitantes necesitan para pasar un gran día: desde cabinas para vestirse y desvestirse y duchas, hasta hamacas y sombrillas de alquiler. Hay un amplio repertorio de restaurantes y cafeterías, así como parques infantiles. Incluso hay una zona con instalaciones deportivas. Otra playa de la zona es la de Grado Pineta, perfecta para familias con niños por sus aguas tranquilas y poco profundas y sus instalaciones infantiles.
La Catedral de Santa Eufemia
La basílica de Santa Eufemia o Catedral de Grado es el monumento religioso más importante de la ciudad, por lo que merece una visita. La descubriremos en pleno centro histórico de Grado, en una plaza recoleta y especial, bastante pequeña, que lleva el nombre de Campo dei Patriarchi. Se trata de una iglesia cuyos orígenes datan del siglo VI, aunque se cree que fue edificada sobre los restos de un templo anterior. Además, la catedral ha sufrido diversos procesos de reconstrucción a lo largo de la historia. La iglesia cuenta con planta basilical y unas impresionantes columnas de mármol con capiteles bizantinos. Destacan los mosaicos del pavimento, que datan del siglo VI, e incluso se cree que algunos fragmentos pertenecen a la iglesia anterior. Otros tesoros que pueden contemplarse en el interior de la basílica de Santa Eufemia son el púlpito del siglo XI o el precioso retablo veneciano, realizado en plata dorada, que data del siglo XIV. Junto a la catedral está el Baptisterio, del siglo V. Muy cerca de la Catedral de Grado encontramos la iglesia de Santa Maria delle Grazie, del siglo IV. En los últimos tiempos se retiraron algunos de los elementos que se habían añadido posteriormente, lo que ha puesto de manifiesto la hermosa sencillez de la construcción.
La laguna de Grado
Grado se ubica en la parte más oriental de la laguna de Grado, que es la que define el paisaje de esta zona y la propia identidad de la ciudad. Se trata de una laguna natural que dibuja un paisaje especial. Una gran extensión de agua de cerca de 8.800 hectáreas que está salpicada de pequeñas islas en la que viven numerosas especies animales. Una de las actividades que pueden realizarse en Grado consiste en recorrer la laguna en barco, descubriendo el paisaje y algunas de las aldeas de pescadores que aún existen. La laguna de Grado forma parte de la Reserva Natural Región del Isonzo Boca. Se trata de un lugar muy rico en cuanto a flora y fauna, donde se tiene un contacto pleno con la naturaleza y donde se puede practicar la observación de aves. Existen zonas en la laguna que resultan especialmente fértiles desde un punto de vista agrícola, dotando a Grado y a las ciudades de los alrededores de exquisitos productos naturales como exquisitas frutas y verduras. También es posible descubrir las interesantes huellas que la historia ha dejado en la zona. Como la isla de Isola di Barbana, donde hay un santuario dedicado a la Virgen María. Este rincón de la laguna se convierte en lugar de peregrinación cada año, el primer domingo de julio, cuando acoge la procesión del Perdón.
Los restos arqueológicos de Aquileia
Grado y sus alrededores tienen mucho que ofrecer, y no todo son hermosas playas y lugares de naturaleza sorprendente. También hay lugar para la cultura y la historia en esta región italiana. La excursión a Aquileia, donde se localizan varios lugares con restos arqueológicos lo demuestra. Está muy cerca de Grado, a sólo 10 km., y es una visita imprescindible. Aquileia es hoy una pequeña ciudad que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Sin embargo, en tiempos de los romanos fue un gran asentamiento. En la actualidad pueden visitarse varias zonas arqueológicas al aire libre, en algunas de las cuales las excavaciones aún continúan. En la ciudad hay muchos lugares interesantes, como la imponente basílica de la Piazza Capitolo, que guarda, entre otros tesoros, dos criptas que merece la pena ver.
Peregrinación al santuario de Isola di Barbana
Es una de las excursiones más recomendables para los visitantes de Grado. Isola di Barbana es una pequeña isla ubicada en la laguna. Allí se alza una pequeña iglesia dedicada a la Virgen que se ha convertido en un lugar de peregrinación popular muy importante en la zona. Cada año, concretamente el primer domingo del mes de julio, se celebra un acontecimiento religioso digno de ver. Se trata de la llamada procesión del Perdón de Barbana en la que numerosas barcas engalanadas para la ocasión llegan hasta la isla. Este acto conmemora el hecho de que Grado se salvó de un brote de peste en el siglo XIII. Para viajar a Isola di Barbana existe un servicio regular de ferry con varios trayectos al día en verano (en invierno sólo funciona los domingos).
Visitar la interesante Trieste
A 64 km. de Grado está Trieste, una ciudad muy próxima a la frontera con Eslovenia, que tiene mucho que ofrecer a los turistas. Quizá por su ubicación geográfica, en Trieste se respira un aire diferente, poco italiano. Existen varios lugares de interés turístico en la ciudad entre los que destacan la Piazza Unità d’Italia, con sus elegantes edificios de estilo neoclásico y una fuente bastante especial. Tanto la plaza como las calles aledañas están repletas de restaurantes y cafeterías perfectas para hacer una parada y tomar un café. No se puede dejar de ver la Catedral de San Justo, que guarda tesoros artísticos de relevancia, como algunos mosaicos venecianos de los siglos XII y XIII, entre otros. También merece la pena dar una vuelta por el puerto, en otros tiempos uno de los más importantes del país.
La ciudad de los canales
Una buena idea para aquellos que disfrutan de unos días de vacaciones en Grado es dedicar algún tiempo a descubrir la sorprendente ciudad de Venecia, localizada a unos 135 km. La mágica ciudad de los canales no dejará a nadie indiferente. Se puede programar una excursión de un día que nos de la oportunidad de conocer la Plaza de San Marcos, con su gran basílica, el Palacio Ducal, el Puente de los Suspiros, el Puente de Rialto o el Gran Canal. Una maravillosa escapada a una de las ciudades más románticas de Italia.
Redactor :
Anne Chabot
