Visitas destacadas
El kilómetro más bello de Italia
La Plaza Independencia es el corazón de la ciudad moderna y foro donde se celebran conciertos y dan cita artistas de fama nacional e internacional; desde aquí se puede hacer un agradable recorrido hacia el Paseo Marítimo (calle Marina baja).
A principios del siglo XX la ciudad fue reconstruida siguiendo un trazado ordenado muy elegante, con avenidas largas que parten junto al mar en paralelo y son cruzadas por otras en transversal, como si de un tablero de ajedrez se tratara. La Via Marina o paseo marítimo es “el kilómetro más hermoso de Italia”, según palabras del escritor d´Annunzio, con unas vistas magníficas al Estrecho de Mesina y a Sicilia, y está escoltado por innumerables monumentos y estatuas de todas las épocas y estilos. Las casonas señoriales también son numerosas y de gran belleza. En este recorrido hallaremos la Villa Zerbi, del neogótico veneciano, que acoge exposiciones culturales internacionales. Y a mitad del recorrido, entre el mar y el paseo Falcomatà, aparece deslumbrante el anfiteatro griego sobre las aguas cristalinas del Estrecho. Durante el verano la Arena es uno de los lugares elegidos como escenario para los espectaculos de verano.
Murallas griegas y termas romanas
La muralla de piedra de Regio de Calabria se remonta a la mitad del siglo IV a.C, mientras que los tramos de ladrillo son de la mitad del siglo VI y de finales del siglo V a.C. Está bastante bien conservada. El tramo situado en el Paseo Marítimo “Italo Falcomatá” presenta doble muro paralelo y entre cada pared hay una distancia de 4,5 metros, además cada ciertos intervalos están unidos por muros ortogonales que crean espacios internos. Sobre los bloques de piedra se pueden ver marcas de cantera de varias formas: símbolos de hacha o letras griegas que daban información sobre el sistema de numeración empleado de los lotes de bloques enviados. Hacia el final del Paseo Marítimo se llega a la área arqueológica de las Termas Romanas, con ocho instalaciones pertenecientes a época romana. Se cree que podrían haber formado parte de un edificio privado. Lo que hoy se puede ver es el frigidarium (pila para inmersiones en agua fría), el caldarium (pila para inmersiones en agua caliente) y el gymnasion (gimnasio). También quedan restos del pavimento de las instalaciones, un bello mosaico blanco de caliza y negro de piedra de lava. Es de los siglos II-III dC. La decoración bicolor se limita a la parte central del suelo. Asimismo hay algunos fragmentos de revoques decorados con motivos marinos.
La Catedral y la Capilla del Santo Sacramento
Si se camina desde la calle principal de la ciudad, la Avenida Garibaldi, se podrá disfrutar de números ejemplos de arquitectura liberty. También esta vía es el centro comercial de la ciudad, lleva a la Estación Central y de ahí a la Catedral, el edificio más grande de la región. Reconstruida en numerosas ocasiones, la última en 1928, está consagrada a la Virgen de la Asunción. Preside el centro de la ciudad, frente a la plaza del Duomo. Con tres naves interrumpidas por tres transeptos que terminan con un ábside poligonal, tiene una longitud de 93 metros y una anchura de 26 metros. El edificio custodia en su interior importantes obras de arte, entre ellas el pergamino marmóreo y el bajorelieve del rostro de Cristo, obras de F. Jerace, el altar con relieves en bronce, que representan escenas del Antiguo y del Nuevo Testamento. Mención aparte merece la capilla del Santo Sacramento. Es este un monumento barroco de gran valor, y que representa uno de los pocos ejemplos de este estilo artístico en el sur de Calabria. Fue construido en 1655 por Placido Brandamonte de Messina.
El Castillo Aragonés
Ocupa el lugar donde en siglos remotos existía una fortaleza que fue modificada y ampliada a lo largo de los distintos periodos: en época bizantina, normanda, etc. Pero la construcción del castillo data de la edad sueva y el edificio anterior responde a un tipo de arquitectura militar que fue variada en el siglo XIII. Finalmente se mando restaurar por la reina Juana y también se fortificó por orden de Fernando el Católico, así como todas las construcciones defensivas del reino del Nápoles, que pertenecía entonces a la corona de Aragón. De ahí el nombre del castillo, que alcanzó en esta época su mayor esplendor. Con posterioridad la construcción pasó de mano en mano, incluso fue tomada por los turcos de Barbarroja. Ya en 1874, el edificio se adquirió por el ayuntamiento de Regio con el fin de tirarlo y construir en su lugar una plaza. Gracias a la lentitud de la burocracia, esta vez pudo salvarse. No así medio siglo después, que fue definitivamente derruido. El que hoy se levanta con total esplendor es un castillo reconstruido en el siglo XX y cuyas dependencias son utilizadas para albergar exposiciones y acontecimientos culturales.
El Museo Nacional de Arqueología y sus tesoros
La maravillosa colección de piezas que recoge este museo ofrece un paseo por la prehistoria, la Magna Grecia y el periodo bizantino. Pero cabe destacar dos joyas que pueden considerarse los tesoros del museo: los Bronces de Riace. Estas dos esculturas están cargadas de enigmas. No se sabe a ciencia cierta de cuándo datan, a quienes representan, ni quién fue su autor o autores. Se cree que fueron fundidas en el siglo V aC; son figuras masculinas griegas que representan el canon de belleza helénica y podrían ser dos guerreros, uno joven y otro maduro. Esculpidas en bronce -lo que aumenta su valor, ya que hay pocas figuras de este material en el mundo-, se hallaron en las aguas de Riace en 1972. Por eso, la hipótesis más cercana a la realidad, es que fueron realizadas en Atenas rumbo a a Roma, pero el barco que las transportaba naufragó. También debajo del agua se encontró otra de las piezas emblemáticas del museo: la cabeza de El Filosófo (s IV aC). Los objetos de arqueología submarina forman parte importante de la colección permanente. Más información: http://www.archeocalabria.beniculturali.it
El Odeón
En 1920 aparecieron en la calle en la calle XXIV Maggio los restos de un teatro griego o de un odeón del siglo IV e inicio del siglo III a.C. Se trataba de un edificio público para espectáculos dividido en siete cuñas por seis escaleras intermedias y con una orquesta de unos 20 metros de diámetro, de la que no se ha encontrado resto de pavimento o decoración. Con bloques de piedra local estaban hechas las gradas y únicamente tres pequeños capiteles jónicos, que se supone ornamentaban la escena, han sido encontrados en este yacimiento en pleno centro de la ciudad.
Villa Municipal Umberto I
Es uno de los grandes espacios verdes de Regio y también está considerado como su Jardín Botánico por la riqueza de su variedad vegetal, entre los que ofrece valiosos ejemplos de flora tropical y equatorial. Pero, además, la Villa es un museo al aire libre en el que se pueden admirar importantes obras artísticas, esculturas y bustos en bronce, así como una avenida de columnas romanas -el Paseo de las Columnas-, que atraviesa el jardín hasta el Lago de los cisnes. Durante los meses estivales, la Villa Municipal Umberto I es otro de los muchos escenarios de Regio para celebrar eventos culturales, cine y teatro.
La playa escoltada por el castillo
Erguido sobre un peñasco, el castillo delimita uno de los extremos de la playa de Regio. El pueblo se descuelga por la ladera en un mosaico de casas de colores que llegan a la propia arena. También el colorido de los famosos Lidos sobre la franja de playa regala una estampa con sabor de los balnearios antiguos. En los Lidos los visitantes pueden descansar sobre cómodas tumbonas después de un baño refrescante, tomar deliciosos cócteles, practicar deportes náuticos, y, de noche, participar en fiestas, escuchar música de todo tipo… o, simplemente, saborear un delicioso helado artesanal italiano de las históricas heladerías del municipio.
La Fata Morgana
El hada Morgana, así se conoce popularmente el fenómeno meteorológico que se da en el Estrecho de Mesina, entre Calabria y Silicia: un espejismo o ilusión óptica que se debe a una inversión de temperatura. Objetos que se encuentran en el horizonte como, por ejemplo, islas, acantilados o barcos, adquieren una apariencia alargada y elevada, similar a "castillos de cuentos de hadas”. En el espectáculo sugestivo de la Hada Morgana la costa siciliana parece extraordinariamente cercana y se pueden ver las casas con un brillo especial, un hechizo un tanto fantasmagórico… que solo se da en este lugar de Italia.
Redactor :
Anne Chabot
