Visitas destacadas
La Catedral de San Nicolás, joya románica
Es, sin duda, una de las joyas arquitectónicas de la ciudad, por no decir que es su tesoro más relevante. Se trata de un magnífico edificio románico que se construyó a orillas del mar y abierta hacia el Adriático, muy cerca del puerto. Aunque comenzó a construirse en el año 1109, la última piedra se puso en el siglo XIII cuando se terminó su bello campanario de casi 60 metros de altura. Posee planta de cruz latina y tres naves, las dos laterales abovedadas. Una de las particularidades de la catedral es que está edificada con la bella piedra rosa pálido característica de Trani, que hace brillar la fachada, dominada por un gran rosetón. Aunque en su día debió estar ricamente ornamentada, hoy el interior de la catedral hace gala de gran sobriedad, lo que le dota de una belleza especial. Dentro del templo encontramos el acceso a la cripta de San Nicolás, del siglo XII, y desde esta se puede bajar a la cripta de Santa María que es realmente la iglesia primitiva sobre la que se alzó la catedral. La Catedral de San Nicolás puede visitarse todos los días desde las 8:00 hasta las 18:00 h.
Una fortaleza junto al mar
Muy cerca de la Catedral se alza el Castillo Svevo, construido por Federico II de Suabia en el siglo XIII, concretamente en el año 1233. Se trata de un gran edificio fortificado de planta cuadrangular, que se erigió con una función defensiva sobre una zona rocosa que ocupaba el centro del puerto de Trani. La concepción arquitectónica inicial del castillo constaba de torres cuadradas en las esquinas y de un gran patio central, además de un gran foso que lo rodeaba. El castillo ha sido escenario de numerosos acontecimientos históricos de gran relevancia. Se dice que en una de sus torres murió Pietro Tiepolo, alcalde de Milán e hijo del Dux veneciano Jacopo Tiepolo, ahorcado por orden de Federico II. En el castillo se celebraron en 1259 las bodas de Manfredo, hijo de Federico II, con Elena Doukas. A partir del siglo XVI el castillo comenzó a sufrir numerosas remodelaciones y cambios arquitectónicos, en parte para adaptarse a las nuevas necesidades defensivas del lugar. En torno al año 1268, bajo el gobierno de la familia Anjou, se celebraron las bodas de Carlos I de Anjou con Margarita de Borgoña. Ya en tiempos de Carlos V, en pleno dominio español, el castillo fue también remodelado. Entre los años 1586 y 1677 acogió la sede de la Corte Real de provincia de Terra de Bari. Ya en 1832 se convirtió en prisión provincial (hasta 1974). Desde 1998 está abierto al público. Abre todos los días de 8:30 a 19:30 h.
La iglesia templaria de Todos los Santos
El antiguo puerto de Trani guarda uno de los templos más visitados de la ciudad, después de la Catedral de San Nicolás. Es la Iglesia de Todos los Santos, que data de la primera mitad del siglo XII, y que fue construida por la Orden de los Caballeros Templarios. Se trata de un edificio sencillo, de planta rectangular con tres naves sin crucero. Su fachada cuenta con un bello pórtico de tres arcos. Perteneció a la Orden de los Templarios hasta el año 1312 y, después de pasar a manos de los Caballeros de San Juna de Jerusalén, terminó perteneciendo a diversas familias nobles de Trani como los De Justis, Castaldi, Lambertini, Rogadeo y Achonzaico. Bajo la entrada a la sacristía se pueden ver los escudos de todas estas ilustres sagas. Con el tiempo, a principios del siglo XIX, la iglesia acogió la sede de la Archiconfraternidad de la Virgen de los Siete Dolores. Años después, en el siglo XX, la iglesia de Todos los Santos fue sede de la Tercera Orden Franciscana. Hoy sorprende el buen estado del templo, ya que se conserva casi en perfectas condiciones. Resulta realmente especial contemplar cómo la fachada del ábside se refleja en las aguas del puerto.
El Museo Diocesano de Trani
Se trata del Museo de la Archidiócesis de Trani-Barletta-Bisceglie-Nazaret, que se fundó en el año 1975 con el fin de disponer de un lugar adecuado en el que albergar los tesoros procedentes de la Catedral y de otros templos de la zona. Poco a poco y con el paso del tiempo, su patrimonio se fue enriqueciendo hasta reunir un gran número de piezas de gran valor artístico e histórico. La sede del museo se localiza actualmente en la Plaza Duomo, donde los tesoros se exponen en dos plantas. Allí pueden verse numerosos hallazgos arqueológicos que van del siglo VI al III a.C. También se guardan algunas obras escultóricas de gran relevancia que proceden de la Catedral y de otras iglesias de la provincia. Entre las obras de arte que merece la pena destacar están un icono de San Nicolás del siglo XIV. También hay objetos de bronce, marfil, etc. El museo está en la Piazza Duomo, 5. Horario: de martes a sábado, de 9:00 a 12:30 h. y de 15:00 a 18:30 h. Domingos y festivos, de 9:00 a 13:00 h. Lunes cerrado. Una de las secciones más destacadas del museo es la dedicada al arte judío, ya que en Trani existió durante la Edad Media una importante comunidad judía que contribuyó a mejorar la economía de la zona. Aún se conserva el barrio judío de la ciudad, en el casco antiguo. La antigua sinagoga de Scola Grande, del siglo XIII, es hoy una sección del Museo Diocesano, y en ella se organizan exposiciones que pretenden divulgar la historia judía de la ciudad. Vía Judea.
Horario: de martes a viernes, de 9:00 a 12:30 h. Sábados y domingos, de 9:00 a 12:30 h., y de 17:00 a 19:00 h. Lunes cerrado.
Los jardines de Villa Comunale
Se trata de una espectacular villa frente al mar que es uno de los lugares más visitados de Trani. Y no es para menos, ya que sus jardines, que se extienden en una terraza de la antigua muralla abriéndose al mar, son unos de los más bellos de toda Europa. Sorprende la gran riqueza de árboles de Villa Comunale. Hay robles, pinos y palmeras que delimitan sus avenidas y senderos. El espacio ajardinado se decora con bellas fuentes y con numerosos macizos de flores de gran variedad. Estos jardines fueron construidos en torno al año 1823, en un terreno que la familia Antonacci donó a la ciudad. Además de disfrutar de la belleza de los jardines, merece la pena acercarse a este lugar sólo por poder contemplar las maravillosas vistas que se tienen desde allí. Desde el lado izquierdo de la villa, junto al castillo fortificado, se divisa todo el puerto de entrada a la ciudad, la Catedral, la iglesia de Todos los Santos y la de Santa Teresa. De entre los muchos rincones especiales que esconde Villa Comunale, destacan el acuario, el aviario, la magnífica arboleda y un mirador colgado sobre el mar, desde donde se divisa todo el paseo marítimo de Trani hasta la península de Colonna. Para visitar Villa Comunale hay que acercarse a la Piazza Plebiscito.
Está abierto todos los días. Horario: de noviembre a abril, de 7:00 a 20:00 h. En mayo, de 7:00 a 21:00 h. En junio y en septiembre, de 7:00 a 23:00 h. En julio y agosto, de 7:00 a 24:00 h. En octubre, de 7:00 a 22:00 h.
Barletta y la pinacoteca Giuseppe De Nittis
La ciudad de Barletta, a unos 13 km. de Trani, es una de las mejores excursiones que pueden realizarse desde la ciudad. Allí, en el bello Palazzo della Marra se localiza una galería de arte que apasionará a los amantes de la pintura, la Pinacoteca Giuseppe De Nittis. Se trata de la mayor colección de obras de arte de este pintor nacido en Barletta en el año 1846. Además de disfrutar de la contemplación de las obras de De Nittis, se pueden admirar obras de otros pintores de la segunda mitad del siglo XIX, ya que se organizan exposiciones dedicadas a estos artistas.
El Castel del Monte, Patrimonio de la Humanidad
Es el único castillo de Italia incluido en la lista de lugares Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, a la que pertenece desde 1996. El Castel del Monte, en Andria, fue ordenado construir por Federico II en torno al año 1240, sobre lo que era la iglesia de Santa Maria del Monte, con el objetivo de ofrecer protección y control al territorio circundante. Con el tiempo el castillo se convirtió en una prisión. Fue devastado en el siglo XVIII hasta quedar en ruinas. Fue restaurado en el siglo XX.
El Parque Arqueológico de Canne della Battaglia, en Barletta
Muy cerca de la población de Barletta, a unos 26 kilómetros de Trani, se encuentra el Parque Arqueológico de Canne della Battaglia, un lugar en el que tuvo lugar una batalla épica entre los romanos y los cartagineses en el año 216 a.C. Allí pueden verse los restos de una ciudadela fortificada romana, así como el importante Antiquarium, donde se guardan restos arqueológicos desde el Neolítico hasta la Edad Media. Piezas y objetos de bronce, cerámica, ámbar, etc. Un lugar que hará las delicias de los amantes de la historia y el arte.
El Parque Nacional de Alta Murgia
La región de Murgia se conoce con el nombre del “Mar de Piedra”. Un paisaje desértico lleno de ondas y páramos escarpados que encierra, sin embargo, mucha vida. La fauna que puebla este lugar se centra, sobre todo, en aves rapaces, reptiles e insectos. Se trata de una zona kárstica en la que abundan profundos huecos y numerosas cuevas que fueron habitadas por humanos en la prehistoria. Aún quedan algunos reductos de bosques de robles. El Parque Nacional de Alta Murgia fue el primero en disfrutar de la categoría de parque rural de Italia.
