Presentación
Morelia es la ciudad más poblada y extensa del estado de Michoacán (México) y capital del mismo. En la época colonial española recibió el nombre de Ciudad de Mechuacán, que cambió en 1545 por el de Valladolid en honor a la localidad homónima en España. En el siglo XIX modificó de nuevo el nombre por el actual, como homenaje al héroe José María Morelos y Pavón, nacido en esta ciudad considerada cuna ideológica del movimiento independentista. Morelia posee un importante patrimonio arqueológico y arquitectónico conservado desde la época colonial, por lo que su casco histórico fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1991. También su legado prehispánico es rico: en el valle de Guayangareo se encontraron los primeros vestigios humanos relacionados con la cultura teotihuacana. Hoy día también ofrece una vida cultural muy dinámica y viva: anualmente se celebra el Festival Internacional de Cine de Morelia y también tiene lugar otro acontecimiento de gran tradición: el Festival Gastronómico Morelia en Boca, donde es posible degustar los variados platos de la cocina tradicional.
La localidad de Morelia pertenece (de mayor a menor) al estado Michoacán de Ocampo y al municipio Morelia.
La localidad de Morelia cubre 1.199 km², tiene 608.049 habitantes (censo 2010) y una densidad de 507,13 habitantes por km². La altitud media es de 1.921 m.
El actual alcade de Morelia es Wilfrido Lázaro Medina.
El gentilicio para los habitantes de Morelia es Moreliano y el idioma oficial de Morelia es Spanish. El nombre francés de la localidad es Morelia, el nombre inglés de la localidad es Morelia.
La localidad de Morelia fue fundada en 1541. La página web de Morelia es http://www.morelia.gob.mx
Visitas destacadas
Morelia en una ciudad “rosa”: muchos de los 1.113 monumentos históricos con que cuenta son edificios construidos en piedra de este color. Un paseo por las calles y plazas del centro nos devuelve al pasado, como si de un escenario de película se tratara. Patrimonio de la Humanidad, en el casco viejo se concentran numerosos estilos arquitectónicos, entre los que predominan el Barroco, Prebarroco, Neoclásico… A ello se suma el encanto de sus vías y sus plazas amplias, sus verdes jardines con toronjos, limoneros, pinos, fresnos y algunas araucarias, soleados patios que mantienen antiguas fuentes y arquerías… El tesoro colonial en Morelia es inmenso y se manifiesta en un fantástico conjunto arquitectónico que reúne edificios civiles -casonas, palacios-, así como infinidad de conventos, templos y basílicas, tan espectaculares como la Catedral, o las imponentes obras públicas: véase el acueducto del siglo XVIII que canalizaba el agua hasta la ciudad. El Palacio Clavijero, el Antiguo Convento del Carmen, la alhóndiga, que en origen fue un granero y hoy es el edificio sede de la Corte, el Templo y Conservatorio de Música de Las Rosas… son algunas paradas ineludibles en la visita a esta señorial y bellísima ciudad mexicana.
La Catedral de Morelia es uno de sus tesoros más preciados. Se comenzó a construir en 1660 y se acabó en 1744, después de que el templo anterior sufriera un incendio. El estilo de su fachada es barroco sobrio con un abundante decoración ornamental, que incluye sus elevadas torres. El interior es de estilo neoclásico y en él destacan el órgano del coro y un bello manifestador (templete donde se expone el Santísimo Sacramento) de plata labrada del altar principal, datado en el siglo XVIII.
Dirección: Av. Francisco I. Madero s/n. En cuanto al monumental acueducto, es uno de los mayores emblemas de la ciudad. Fue construido en cantera y se levantó con el fin de proveer de agua a la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios y al barrio del mismo nombre. Tiene una longitud de 500 m y conserva 253 arcos. A Los Remedios se puede llegar subiendo desde el periférico norte por la avenida San Mateo hacia el poniente, vía que conduce directamente hasta el acueducto. También merece la pena visitar el magnífico templo, por su valor arquitectónico y singular historia.
Si la riqueza monumental impresiona al visitante, no hay que dejar de visitar los museos de la ciudad, que guardan un legado de suma importancia tanto desde el punto de vista histórico como artístico. Estos son algunos de los más recomendables. Museo de Arte Colonial. Reúne obras de diversas procedencias, como lienzos de Miguel Cabrera y José de Ibarra, cristos de pasta de caña de maíz, madera y marfil o piezas de la Compañía de Indias, entre otras. Dirección: Benito Juárez No. 240.
Museo Regional Michoacano. Alberga objetos que acercan a la cultura michoacana, como algunos códices coloniales de épocas tempranas. El cuadro "El Traslado de las Monjas" (1738) es su mayor tesoro. Dirección: Allende No. 305, esquina con Abasolo. Museo de la Máscara. Interesante colección de máscaras y objetos procedentes de diez estados de la República. Direción: Avenida Morelos Norte Museo Casa Natal de Morelos. Exhibe diversos objetos, como monedas de las que el héroe de la Independencia mando acuñar, así como varias pinturas relativas a su vida. Dirección: Corregidora y García Obeso. Museo de Arte Contemporáneo Alfredo Zalce. Pinacoteca con obras del gran artista plástico michoacano, así como de el también pintor Efraín Vargas. En paralelo a la exposición permanente se llevan a cabo muestras temporales del arte contemporáneo más selecto en los ámbitos nacional e internacional. Dirección: Avenida Acueducto No. 18, Bosque Cuauhtémoc.
De Morelia a Pátzcuaro por la autopista hay únicamente 53 km, y está muy bien señalizado. Este pueblo se asienta a 5 kilómetros de su lago, con el mismo nombre. Es una pequeña localidad que guarda grandes tesoros arquitectónicos, palacios y finca virreinales, y magníficos edificios religiosos, como la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, construida sobre un centro ceremonial prehispánico y que cuenta con la imagen de la virgen del siglo XVI, hecha con pasta de caña de maíz y miel de orquídea. Además de su riqueza cultural, en Pátzcuaro se respira un ambiente animado y colorista, el que dan sus mercados de artesanía. En la Casa de los Once patios se puede disfrutar de un conjunto de edificios del siglo XVIII que sirven hoy día como centro de venta de objetos artesanales, y en sus talleres se muestran los distintos procesos de manufactura. El Mercado de artesanías de madera ofrece objetos hechos a mano en este material, así como colecciones de lacas. Y luego está su lago, con montañas cubiertas de pinos, abetos y juníperos. Desde el muelle general parten las lanchas que salen a las islas que lo pueblan, como la de Janitzio, localidad que celebra la popular fiesta de los muertos el 1 y 2 de noviembre con un ritual en el que los pescadores reman en el lago hasta llegar al lugar en sus canoas iluminadas con velas.
Cuitzeo está a 15 minutos de Morelia, en la ribera del lago homónimo. Ofrece magníficas panorámicas, artesanía en fibras vegetales y exquisitas especialidades lacustres, como las ancas de rana. Obligada visita merece el templo y ex convento agustino de María Magdalena, con aspecto de fortaleza medieval, y el imponente mural que muestra a un fraile crucificado.
Tlalpujahua conserva su arquitectura típica con calles empedradas y una gran oferta de decoraciones navideñas, especialmente esferas de vidrio soplado y artículos de platería. El Santuario del Carmen, el Templo de Santiago Puxtla y la antigua casa de los hermanos Rayón (insurgentes de la Independencia) son algunos de los atractivos turísticos, así como la Mina Dos Estrellas. Santa Clara del Cobre, A 75 km de Morelia, es el paradigma de pueblo artesano, dedicado a la elaboración de objetos hechos con el material del que ha tomado el apelativo. Muy cerca está el Lago de Zirahuén de aguas verdiazules. Angangueo está enclavado en el eje volcánico transversal. Es famoso por su pasado minero, que se puede “recorrer” a través del Túnel Turístico San Simón de 9.50 metros de profundidad. Buena parte de su encanto se debe a que sus alrededores albergan los santuarios que cada año elige la mariposa monarca para hibernar en tierras mexicanas.
A finales del mes de octubre entre 60 millones y un billón de mariposas emprenden un larguísimo viaje de cuatro mil kilómetros desde el este de Canadá para pasar los meses fríos en los bosques del centro-occidente de México. En el estado de Michoacán se encuentran dos de las más importantes Reservas de la Biosfera de Mariposa Monarca, consideradas Patrimonio de la Humanidad, que hay en todo México. Muy cerca del municipio de Angangueo se ubica el santuario de la mariposa monarca Sierra Chincua, conocido también como El llano de las Papas. En el santuario de El Rosario, en el municipio de Ocampo, hay hasta cuatro colonias de mariposas monarca concentradas en el valle de Los Conejos y las Balsitas poblados de cedros y oyameles. Los lepidópteros pintan de naranja estos bosques y se pueden ver en visitas guiadas.
Más conocido con su nombre popular, el Mercado de Dulces y Artesanías de la ciudad es uno de sus grandes atractivos y deja un grato recuerdo en el paladar, en la vista y el olfato, ya que ofrece un gran surtido de dulces y artesanías regionales. Reúne 150 puestos llenos de colorido y variedades clásicas de Morelia, como las frutas rellenas o cubiertas, o las charamuscas. Está en el centro histórico, en la parte de lo que fue el colegio de los Jesuitas (actualmente Palacio Clavijero). Para completar la visita se puede visitar también en la misma zona el Museo del Dulce.
La vinculación de Morelia al cine está firmemente asentada gracias a un certamen que es una importante plataforma para promover el trabajo de los nuevos cineastas mexicanos. Se trata del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), un escaparate que gana reputación con cada edición. Una de las tradiciones del FICM es rendir un homenaje cada año a la carrera de una figura del cine nacional nacida en Michoacán. Además, una selección de películas del renombrado Festival de Cannes se exhibe anualmente en el certamen michoacano. El festival se celebra en octubre y es un evento que congrega a muchos nombres propios de la gran industria del cine. http://moreliafilmfest.com
Los restos de esta antigua ciudad tarasca o purépecha están junto al lago Pátzcuaro, que era la fuente de provisión de agua y comida para el mantenimiento de este centro cultural, social y religioso del pueblo tarasco. El yacimiento es una ventana a las costumbres y al origen indígena de Michoacán. La importante ciudad mezoamericana cuenta con numerosos templos construidos sobre estructuras piramidales con forma de cerradura, conocidas como “yácatas”, usadas para rituales públicos y gubernamentales. Más abajo de la zona arqueológica se encuentra el convento colonial de San Francisco, donde aún se conservan los árboles de olivo que plantó el obispo Vasco de Quiroga a mediados del siglo XVI. Merece la pena detenerse en el lugar de camino al lago.
¿Cómo llegar?
Morelia se encuentra a 303 kilómetros de México DF, la capital del país, distancia que se puede cubrir sin mayores inconvenientes por vía terrestre y aérea.En avión: a 30 minutos de Morelia se encuentra el Aeropuerto Internacional Francisco J. Mújica, al que diariamente llegan y parten vuelos procedentes de las principales ciudades de México y, también, de los Estados Unidos.
El aeropuerto cuenta con tiendas, restaurante, bar, agencias de alquiler de autos (las más importantes del estado) y servicios de taxis que lo trasladarán al centro de la ciudad.
Por tierra: Morelia cuenta con una moderna red de carreteras estatales y federales que la conectan con el resto del país, incluyendo la Ciudad de México.
Si el viajero se encuentra en México DF o Guadalajara y piensa conducir hasta Morelia, debe seguir la autopista 54, una vertiginosa vía de cuatro carriles. El trayecto es de tres a cuatro horas, aproximadamente.
En la Ciudad de México los ómnibus hacia Morelia parten cada 30 minutos del Terminal de Autobuses de Observatorio (Central de Autobuses del Poniente), en la avenida Sur 122, colonia Real del Monte.
Presentación
Morelia es la ciudad más poblada y extensa del estado de Michoacán (México) y capital del mismo. En la época colonial española recibió el nombre de Ciudad de Mechuacán, que cambió en 1545 por el de Valladolid en honor a la localidad homónima en España. En el siglo XIX modificó de nuevo el nombre por el actual, como homenaje al héroe José María Morelos y Pavón, nacido en esta ciudad considerada cuna ideológica del movimiento independentista. Morelia posee un importante patrimonio arqueológico y arquitectónico conservado desde la época colonial, por lo que su casco histórico fue declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO en 1991. También su legado prehispánico es rico: en el valle de Guayangareo se encontraron los primeros vestigios humanos relacionados con la cultura teotihuacana. Hoy día también ofrece una vida cultural muy dinámica y viva: anualmente se celebra el Festival Internacional de Cine de Morelia y también tiene lugar otro acontecimiento de gran tradición: el Festival Gastronómico Morelia en Boca, donde es posible degustar los variados platos de la cocina tradicional.
La localidad de Morelia pertenece (de mayor a menor) al estado Michoacán de Ocampo y al municipio Morelia.
La localidad de Morelia cubre 1.199 km², tiene 608.049 habitantes (censo 2010) y una densidad de 507,13 habitantes por km². La altitud media es de 1.921 m.
El actual alcade de Morelia es Wilfrido Lázaro Medina.
El gentilicio para los habitantes de Morelia es Moreliano y el idioma oficial de Morelia es Spanish. El nombre francés de la localidad es Morelia, el nombre inglés de la localidad es Morelia.
La localidad de Morelia fue fundada en 1541. La página web de Morelia es http://www.morelia.gob.mx
Visitas destacadas
Morelia en una ciudad “rosa”: muchos de los 1.113 monumentos históricos con que cuenta son edificios construidos en piedra de este color. Un paseo por las calles y plazas del centro nos devuelve al pasado, como si de un escenario de película se tratara. Patrimonio de la Humanidad, en el casco viejo se concentran numerosos estilos arquitectónicos, entre los que predominan el Barroco, Prebarroco, Neoclásico… A ello se suma el encanto de sus vías y sus plazas amplias, sus verdes jardines con toronjos, limoneros, pinos, fresnos y algunas araucarias, soleados patios que mantienen antiguas fuentes y arquerías… El tesoro colonial en Morelia es inmenso y se manifiesta en un fantástico conjunto arquitectónico que reúne edificios civiles -casonas, palacios-, así como infinidad de conventos, templos y basílicas, tan espectaculares como la Catedral, o las imponentes obras públicas: véase el acueducto del siglo XVIII que canalizaba el agua hasta la ciudad. El Palacio Clavijero, el Antiguo Convento del Carmen, la alhóndiga, que en origen fue un granero y hoy es el edificio sede de la Corte, el Templo y Conservatorio de Música de Las Rosas… son algunas paradas ineludibles en la visita a esta señorial y bellísima ciudad mexicana.
La Catedral de Morelia es uno de sus tesoros más preciados. Se comenzó a construir en 1660 y se acabó en 1744, después de que el templo anterior sufriera un incendio. El estilo de su fachada es barroco sobrio con un abundante decoración ornamental, que incluye sus elevadas torres. El interior es de estilo neoclásico y en él destacan el órgano del coro y un bello manifestador (templete donde se expone el Santísimo Sacramento) de plata labrada del altar principal, datado en el siglo XVIII.
Dirección: Av. Francisco I. Madero s/n. En cuanto al monumental acueducto, es uno de los mayores emblemas de la ciudad. Fue construido en cantera y se levantó con el fin de proveer de agua a la iglesia de Nuestra Señora de los Remedios y al barrio del mismo nombre. Tiene una longitud de 500 m y conserva 253 arcos. A Los Remedios se puede llegar subiendo desde el periférico norte por la avenida San Mateo hacia el poniente, vía que conduce directamente hasta el acueducto. También merece la pena visitar el magnífico templo, por su valor arquitectónico y singular historia.
Si la riqueza monumental impresiona al visitante, no hay que dejar de visitar los museos de la ciudad, que guardan un legado de suma importancia tanto desde el punto de vista histórico como artístico. Estos son algunos de los más recomendables. Museo de Arte Colonial. Reúne obras de diversas procedencias, como lienzos de Miguel Cabrera y José de Ibarra, cristos de pasta de caña de maíz, madera y marfil o piezas de la Compañía de Indias, entre otras. Dirección: Benito Juárez No. 240.
Museo Regional Michoacano. Alberga objetos que acercan a la cultura michoacana, como algunos códices coloniales de épocas tempranas. El cuadro "El Traslado de las Monjas" (1738) es su mayor tesoro. Dirección: Allende No. 305, esquina con Abasolo. Museo de la Máscara. Interesante colección de máscaras y objetos procedentes de diez estados de la República. Direción: Avenida Morelos Norte Museo Casa Natal de Morelos. Exhibe diversos objetos, como monedas de las que el héroe de la Independencia mando acuñar, así como varias pinturas relativas a su vida. Dirección: Corregidora y García Obeso. Museo de Arte Contemporáneo Alfredo Zalce. Pinacoteca con obras del gran artista plástico michoacano, así como de el también pintor Efraín Vargas. En paralelo a la exposición permanente se llevan a cabo muestras temporales del arte contemporáneo más selecto en los ámbitos nacional e internacional. Dirección: Avenida Acueducto No. 18, Bosque Cuauhtémoc.
De Morelia a Pátzcuaro por la autopista hay únicamente 53 km, y está muy bien señalizado. Este pueblo se asienta a 5 kilómetros de su lago, con el mismo nombre. Es una pequeña localidad que guarda grandes tesoros arquitectónicos, palacios y finca virreinales, y magníficos edificios religiosos, como la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, construida sobre un centro ceremonial prehispánico y que cuenta con la imagen de la virgen del siglo XVI, hecha con pasta de caña de maíz y miel de orquídea. Además de su riqueza cultural, en Pátzcuaro se respira un ambiente animado y colorista, el que dan sus mercados de artesanía. En la Casa de los Once patios se puede disfrutar de un conjunto de edificios del siglo XVIII que sirven hoy día como centro de venta de objetos artesanales, y en sus talleres se muestran los distintos procesos de manufactura. El Mercado de artesanías de madera ofrece objetos hechos a mano en este material, así como colecciones de lacas. Y luego está su lago, con montañas cubiertas de pinos, abetos y juníperos. Desde el muelle general parten las lanchas que salen a las islas que lo pueblan, como la de Janitzio, localidad que celebra la popular fiesta de los muertos el 1 y 2 de noviembre con un ritual en el que los pescadores reman en el lago hasta llegar al lugar en sus canoas iluminadas con velas.
Cuitzeo está a 15 minutos de Morelia, en la ribera del lago homónimo. Ofrece magníficas panorámicas, artesanía en fibras vegetales y exquisitas especialidades lacustres, como las ancas de rana. Obligada visita merece el templo y ex convento agustino de María Magdalena, con aspecto de fortaleza medieval, y el imponente mural que muestra a un fraile crucificado.
Tlalpujahua conserva su arquitectura típica con calles empedradas y una gran oferta de decoraciones navideñas, especialmente esferas de vidrio soplado y artículos de platería. El Santuario del Carmen, el Templo de Santiago Puxtla y la antigua casa de los hermanos Rayón (insurgentes de la Independencia) son algunos de los atractivos turísticos, así como la Mina Dos Estrellas. Santa Clara del Cobre, A 75 km de Morelia, es el paradigma de pueblo artesano, dedicado a la elaboración de objetos hechos con el material del que ha tomado el apelativo. Muy cerca está el Lago de Zirahuén de aguas verdiazules. Angangueo está enclavado en el eje volcánico transversal. Es famoso por su pasado minero, que se puede “recorrer” a través del Túnel Turístico San Simón de 9.50 metros de profundidad. Buena parte de su encanto se debe a que sus alrededores albergan los santuarios que cada año elige la mariposa monarca para hibernar en tierras mexicanas.
A finales del mes de octubre entre 60 millones y un billón de mariposas emprenden un larguísimo viaje de cuatro mil kilómetros desde el este de Canadá para pasar los meses fríos en los bosques del centro-occidente de México. En el estado de Michoacán se encuentran dos de las más importantes Reservas de la Biosfera de Mariposa Monarca, consideradas Patrimonio de la Humanidad, que hay en todo México. Muy cerca del municipio de Angangueo se ubica el santuario de la mariposa monarca Sierra Chincua, conocido también como El llano de las Papas. En el santuario de El Rosario, en el municipio de Ocampo, hay hasta cuatro colonias de mariposas monarca concentradas en el valle de Los Conejos y las Balsitas poblados de cedros y oyameles. Los lepidópteros pintan de naranja estos bosques y se pueden ver en visitas guiadas.
Más conocido con su nombre popular, el Mercado de Dulces y Artesanías de la ciudad es uno de sus grandes atractivos y deja un grato recuerdo en el paladar, en la vista y el olfato, ya que ofrece un gran surtido de dulces y artesanías regionales. Reúne 150 puestos llenos de colorido y variedades clásicas de Morelia, como las frutas rellenas o cubiertas, o las charamuscas. Está en el centro histórico, en la parte de lo que fue el colegio de los Jesuitas (actualmente Palacio Clavijero). Para completar la visita se puede visitar también en la misma zona el Museo del Dulce.
La vinculación de Morelia al cine está firmemente asentada gracias a un certamen que es una importante plataforma para promover el trabajo de los nuevos cineastas mexicanos. Se trata del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), un escaparate que gana reputación con cada edición. Una de las tradiciones del FICM es rendir un homenaje cada año a la carrera de una figura del cine nacional nacida en Michoacán. Además, una selección de películas del renombrado Festival de Cannes se exhibe anualmente en el certamen michoacano. El festival se celebra en octubre y es un evento que congrega a muchos nombres propios de la gran industria del cine. http://moreliafilmfest.com
Los restos de esta antigua ciudad tarasca o purépecha están junto al lago Pátzcuaro, que era la fuente de provisión de agua y comida para el mantenimiento de este centro cultural, social y religioso del pueblo tarasco. El yacimiento es una ventana a las costumbres y al origen indígena de Michoacán. La importante ciudad mezoamericana cuenta con numerosos templos construidos sobre estructuras piramidales con forma de cerradura, conocidas como “yácatas”, usadas para rituales públicos y gubernamentales. Más abajo de la zona arqueológica se encuentra el convento colonial de San Francisco, donde aún se conservan los árboles de olivo que plantó el obispo Vasco de Quiroga a mediados del siglo XVI. Merece la pena detenerse en el lugar de camino al lago.
¿Cómo llegar?
Morelia se encuentra a 303 kilómetros de México DF, la capital del país, distancia que se puede cubrir sin mayores inconvenientes por vía terrestre y aérea.En avión: a 30 minutos de Morelia se encuentra el Aeropuerto Internacional Francisco J. Mújica, al que diariamente llegan y parten vuelos procedentes de las principales ciudades de México y, también, de los Estados Unidos.
El aeropuerto cuenta con tiendas, restaurante, bar, agencias de alquiler de autos (las más importantes del estado) y servicios de taxis que lo trasladarán al centro de la ciudad.
Por tierra: Morelia cuenta con una moderna red de carreteras estatales y federales que la conectan con el resto del país, incluyendo la Ciudad de México.
Si el viajero se encuentra en México DF o Guadalajara y piensa conducir hasta Morelia, debe seguir la autopista 54, una vertiginosa vía de cuatro carriles. El trayecto es de tres a cuatro horas, aproximadamente.
En la Ciudad de México los ómnibus hacia Morelia parten cada 30 minutos del Terminal de Autobuses de Observatorio (Central de Autobuses del Poniente), en la avenida Sur 122, colonia Real del Monte.