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Templo del Sol
El templo del sol se utilizaba para realizar las ceremonias relacionadas con el solsticio de verano, en junio. Se accede al recinto a través de una gran puerta en la que aún quedan restos de antiguos mecanismos de seguridad. El edificio principal en este templo es el torreón, formado por bloques de piedra tallados. El torreón tiene las ventanas situadas de modo que se pueda ver la salida del sol en los solsticios de verano y de invierno. Este torreón se encuentra sobre una roca que, a su vez, está sobre una cueva. El interior de la cueva está cubierto de mampostería y se cree que fue utilizado como mausoleo y que la momia de Pachacutec se encontraba aquí cuando los españoles llegaron a Perú. En esta cueva se encuentra también el altar en el que se realizaban los rituales y se presentaban las ofrendas.
Los estudios geológicos creen que este edificio tenía decoración incrustada en la piedra de granito que posteriormente fue eliminada. Estos estudios han demostrado también la existencia de un incendio en la construcción que destruyó parte de la edificación.
La entrada a la ciudadela cuesta 150 soles y permite la visita durante tres días, aunque solamente una entrada a cada recinto arqueológico.
La Plaza Sagrada
Se denomina plaza sagrada al recinto alrededor del cual se disponen algunos de los edificios más importantes de Machu Picchu. Los estudios indican que en esta plaza, la más grande de la ciudadela, se celebraban numerosos rituales religiosos ya que era el centro ceremonial. En esta plaza se encuentran el Templo de las Tres Ventanas, el Templo Principal y la Sacristía o Cámara de los Ornamentos. A pesar de la grandeza de la plaza y de los magníficos edificios que la componían, se cree que la construcción de la plaza nunca llegó a terminarse.
El Templo de las Tres Ventanas se construyó con grandes bloques de piedra con forma de polígono que se ensamblaron acoplando las piezas perfectamente entre sí. El techo, de adobe, se sujetaba por una columna. Y las cinco ventanas, de las que hoy en día solo quedan tres, indicaban por dónde salía el sol.
El Templo Principal era el de mayor significado espiritual y se puede comprobar en que las piedras con las que se construyó están más pulidas que en el resto de edificaciones. La construcción tiene, como era habitual, solamente tres paredes y posee varios sepulcros.
La Sacristía era el lugar en el que vivía el sacerdote.
La Residencia Real
La Residencia Real es la más grande de las construcciones destinadas a vivienda en la ciudadela, también la de acabado más fino. Esta residencia se compone por dos estancias con paredes construidas en piedra labrada y con decoraciones monolíticas. Se cree que una de las habitaciones disponía de servicio debido al canal de desagüe que aún se conserva en ella. Además de las dos estancias, la vivienda dispone de un corral para los animales y una terraza desde la que se puede contemplar el este de la ciudadela.
Se cree que esta vivienda estaba destinada a la residencia de los emperadores incas, en especial de Pachacutec, del que se dice que ordenó construir la ciudadela para albergar su momia, por lo que la idea sería construir una ciudad funeraria. Por este motivo se encuentra situada en la mejor localización de Machu Picchu, la puerta de acceso a la vivienda se encuentra frente a la principal fuente de la ciudadela. En paralelo a esta vivienda discurre la Gran Escalinata por la que se accede al Templo del Sol; al Acllahuasi, el recinto de las vírgenes del templo y a la plaza Sagrada.
La zona de las canteras
La zona de las canteras presentan el lugar en el que trabajaban y vivían los encargados de extraer, labrar y cortar las piedras que posteriormente se utilizarían para construir los edificios de la ciudadela. Estas canteras se encuentran a mayor altura que la ciudadela que probablemente se decidiera construir a menor altura para facilitar el traslado de las piedras de un sitio a otro. Las grandes piedras se trasladaban con el trabajo de muchos hombres y también con la ayuda de pequeñas piedras que, colocadas en el camino, servían de ruedas sobre las que deslizar las piezas más pesadas.
En la entrada del recinto destacan seis áreas comunicadas entre sí que sirvieron de alojamiento a los trabajadores de la cantera. En las excavaciones realizadas en esta zona se han descubierto utensilios domésticos como ollas y platos, y también herramientas de trabajo como moledores de piedra y rampas para mover las rocas más grandes. En las canteras se han encontrado también piedras ya cortadas y talladas, preparadas para la construcción de los edificios que nunca llegaron a utilizarse.
Esta zona de canteras es habitualmente conocida por los geólogos como "el caos de granito" debido a la gran cantidad de piedra, rocas y tallas a medio hacer que se encuentran en este lugar.
Intihuatana
En la colina de Intihuatana, cercana a la ciudadela de Machu Picchu, se construyeron terrazasa distintos niveles que conformaron una pirámide. El significado de la palabra Intihuatana es "el que ata el sol", y este fue el motivo por el que construyeron la pirámide, ya que los rituales de los incas estaban siempre enfocados a evitar la desaparición del sol. El día más importante en esta pirámide era el día del solsticio de invierno, durante la noche más larga del año, en la que se intentaba evitar que el sol desapareciera para siempre.
Durante mucho tiempo se ha creído que Intihuatana era un reloj de sol pero no es así, o al menos no exactamente. Intihuatana no es un reloj de sol al uso que marque las horas del día. Sin embargo sí es cierto que los incas utilizaban la pirámide para saber cuándo se acercaba el solsticio y para calcular los plazos de siembra y recolección.
Se puede acceder a lo alto de la pirámide por dos grandes escaleras, una situada al norte y otra al sur. La escalera situada en el sur es la más visitada ya que está tallada en una sola roca.
Wayna Picchu
El Wayna Picchu, o cerro joven, es la montaña más cercana a Machu Picchu, la que siempre está presente durante la visita a la ciudadela. Desde lo alto de la montaña se puede disfrutar del valle, de las montañas cercanas y de la ciudadela desde lo alto. Además en Wayna Picchu se puede visitar el Templo de la Luna y el Puente Inca.
Hay dos turnos para ascender a la montaña, uno a las 7:00 para 200 personas y el segundo a las 10:00 para otras 200 personas. El recorrido suele durar unas 2 horas aproximadamente estando en buen estado de forma.
Las cataratas Mandor
Merece la pena realizar una excursión desde Machu Picchu hasta las cataratas Mandor, que puede durar aproximadamente 3 horas disfrutando del camino, los alrededores y el paisaje. Para llegar hasta las cataratas basta con seguir la ribera del río Vilcanota. Las cataratas tienen una caída desde 30 metros y forman un río de agua de origen glaciar, que es desde donde deshiela el caudal de la catarata. La flora es muy rica en esta zona y destacan las orquídeas que crecen de forma natural en la orilla del río.
El precio de entrada al recinto de la catarata, privado, es de 10 soles.
Aguas Calientes
Aguas Calientes es la localidad que se encuentra junto a Machu Picchu, el lugar en el que los visitantes de la ciudad inca se deben alojar si pasan más de un día en la zona. La mayoría de los visitantes que llegan a la localidad están interesados en la ciudadela, pero Aguas Calientes, como su propio nombre indica, también ofrece unos maravillosos baños termales en los que relajarse. Esta localidad es muy curiosa, ya que solamente está compuesta de una calle en la que se encuentran los hoteles y las tiendas y por la que pasa la vía del tren.
Intipuncu
Intipuncu era el punto defensivo de Machu Picchu, se encuentra a dos kilómetros de la ciudadela y los incas lo llamaban la Puerta del Sol. A pesar de ser un lugar defensivo, en Intipuncu no faltan los altares religiosos para hacer las ofrendas o celebrar las liturgias. En este asentamiento se encuentran también calzadas flotantes, muy interesantes para los arqueólogos. La construcción principal en Intipuncu es el puesto de control por el que debían pasar todos los viajeros.
Intipuncu se encuentra a solo 1 kilómetro de distancia de Machu Picchu, por lo que se suele acceder caminando.
Redactor :
Marion Rouillot
