Presentación
Ciudad ubicada en la región de Moravia Meridional, en la República Checa, cerca de la frontera con Baja Austria y a 55 km al suroeste de Brno. Este maravilloso pueblo histórico está enclavado en un marco imponente sobre el río Dyje, en un acantilado rocoso en la orilla izquierda del río Dyje, y conserva buenos ejemplos de arquitectura medieval. Su centro histórico, bellísimo y muy pintoresco, tiene calles sinuosas y románticas, llenas de rincones y recovecos misteriosos. Znojmo es también el centro de una conocida región vinícola que sorprende no solo por su paisaje de viñedos que cambian de color con las estaciones, también por sus densos bosques que esconden palacios renacentistas. A la fama de sus vinos se añade la no menos merecida del pepinillo. Znojmo se conoce como la capital checa del pepinillo, preparado con una salsa condimentada, como es el caso de la Znojemský guláš, de delicioso sabor agridulce…
La localidad de Znojmo pertenece (de mayor a menor) a la región Jihomoravský kraj, al distrito Znojmo y al municipio Dobšice.
La localidad de Znojmo tiene 34.073 habitantes (censo 2012). La altitud máxima es de 290 m, la altitud media es de 290 m.
El actual alcade de Znojmo es Vlastimil Gabrhel para el período 2.011.
El nombre francés de la localidad es Znojmo, el nombre español es Znojmo.
La página web de Znojmo es http://www.znojmocity.cz
Visitas destacadas
A vista de pájaro la ciudad checa de Znojmo recuerda mucho a Praga. El río baña esta elegante localidad y su casco histórico, un mosaico de casitas de colores entre las que despuntan la torre del ayuntamiento y de las principales iglesias. Znojmo se fundó en tiempos tan remotos como el siglo VII, y esta ciudad llegó a ser dominante durante el siglo IX, cuando el Imperio de la Gran Moravia llegó al poder. El pasado de Znojmo tiene su elemento más representativo en lo que es también su construcción más antigua, el castillo y la Rotonda románica de Santa Catalina. Ambos se encuentran a las afueras de la ciudad medieval, remontándose al siglo XI. El castillo fue erigido por el príncipe Břetislav I. La ciudad real de Znojmo fue fundada poco después de 1226 por el rey Otakar I de Bohemia sobre la llanura que se extiende frente al castillo. En estos mismos terrenos, la Rotonda de Santa Catalina debe su nombre a su sencilla planta circular. Otra iglesia que merece la pena visitar es la de San Nicolás, de estilo gótico, construida por el emperador Carlos IV en 1348. El interior tiene uno de los púlpitos barrocos más bellos y originales de toda la República Checa.
La plaza principal de Znojmo es Masarykovo náměstí. Prácticamente todo está ubicado en o cerca de ella. La calle Zelenářská, que pasa por la esquina noroeste de la plaza, lleva hasta la Iglesia de San Nicolás y al castillo. La Torre del Ayuntamiento se contempla desde cualquier punto de la ciudad. Con sus 75 metros de alto data de 1446 y queda rematada con una historiada y hermosa cubierta de color verde. Se remonta también al gótico tardío. En la fachada principal, la luz entra a través de pequeños ventanucos alineados como en las torres de las iglesias, y en la parte superior luce un reloj que da las horas puntualmente. Es todo un espectáculo contemplar hasta donde la vista alcanza desde lo alto de la galería-mirador de la Casa Consistorial. Callejeando por el casco antiguo se llega a Pestsäule am Znaimer Masarykplatz, una plaza grandiosa y muy turística. Sus casas señoriales de varias alturas con fachadas pintadas en tonos pastel forman un conjunto armonioso y elegante. En el centro, sobre una columna ornamental, se erige una escultura que conmemora la plaga que sufrió la ciudad en siglos pasados. En esta plaza hay restaurantes y cafés que en verano sacan sus terrazas a la calle, convirtiendo el lugar en un animado punto de encuentro.
Unos 30 km de galerías bajo tierra atraviesan el subsuelo de la ciudad. Pasan por debajo de casas, calles y plazas del centro histórico. Esta red laberíntica fue excavada durante años por los habitantes y era utilizada para cualquier cosa, como esconderse de los invasores, almacenar vino, municiones y pepinillos en conserva. Se ha abierto al público cerca de 1 kilómetro de la red de túneles antiguos, una de las más grandes en Europa Central y una interesantísima propuesta turística para toda la familiar. Entre sus recovecos y galerías transcurrió la historia de Znojmo. Para conocerla se puede optar por un tour guiado tradicional en el que se desgranarán todos los detalles, o un recorrido a lo largo de una ruta alternativa. La segunda opción es fascinante sobre todo para los visitantes más pequeños, ya que en ella se descubre el mundo misterioso que los pasadizos subterráneos encierran y se podrá ver en vivo personajes de cuento, hadas y fantasmas, talleres de alquimistas, celdas de bandidos… Todo acompañado de un sistema de efectos de luz especiales que aportan el ambiente necesario. Un lugar interesante es un espacio compuesto por dos naves que recrean una sala de justicia y que hoy sirve como una “bodega medieval” en la que se pueden degustar los buenos vinos de esta zona europea.
Si se visita Znojmo, es obligado hacer un recorrido por la región para conocer su importante producción de vinos y sus bodegas. En esta zona limítrofe con Austria se dan excelentes caldos de renombre, y no hay que dejar pasar la oportunidad de probarlos en algunos de los sitios más sorprendentes. Para acercarse al que es uno de los centros más importantes de toda la República Checa, el Monasterio Loucká, lo mejor es contratar una excursión. La cata de vinos en el silencio de un monasterio es casi una “experiencia religiosa”. En los sótanos de este complejo monástico se encuentra actualmente la mayor productora de vino del país, la sociedad anónima Znovín Znojmo, cool. Durante siglos el monasterio de Loucká fue uno de los más importantes de toda Europa Central. Hoy en su bodegas se pueden degustar las distintas variedades de caldos y conocer la historia al detalle en el Museo del vino. Y es posible comprarlos en la tienda del museo. Más información: spravceznovin.cz. Otra ruta que completa la anterior es la visita a el Parque Nacional Podyjí y Sobes, uno de los mejores viñedos europeos.
Y, si además de beber, se quiere comer, disfrutar del teatro y la música, no hay que perderse la feria anual Znojmo Historical Vintage: la mayor celebración del vino en la ciudad. Tiene lugar en el mes de septiembre y recuerda el año de 1327, cuando el rey checo de Luxemburgo Juan y su esposa Elisabeth de Bohemia llegaron a Znojmo con toda la corte real. El programa de actividades no solo reúne acontecimientos en torno al vino y a la gastronomía, también ofrece una serie de eventos culturales muy interesantes: obras de teatro, conciertos, fuegos artificiales, torneos de justas, mercado histórico con demostraciones de artesanía y un campamento militar. La culminación de la celebración es un desfile festivo a través de la ciudad, que por supuesto nunca se pierde el principal de los visitantes de la cosecha histórica de Znojmo, el Dios del vino Baco. El ambiente es magnífico, recreado por antorchas que acompañan el desfile del primer día, así como el resto de las propuestas, que conmemoran actos solemnes y representan farsas divertidas en torno al vino.
En el río Dyje, no lejos de Znojmo, se construyó en el siglo XIII un bellísimo molino que daba servicio al convento cisterciense en Oslavany. El molino, en perfecto estado de conservación, tiene cuatro ruedas y es un ingenio técnico único: un maravilloso ejemplo para los aficionados a la mecánica y a la historia. Los visitantes pueden verlo en funcionamiento y descubrir todo el proceso de molienda. Además, en septiembre se celebra el ”Festival del pan" , que adereza esta atracción turística con actuaciones de música folclórica.
Aunque es el más parque nacional checo más pequeño del país, está entre los sitios naturales más importantes de Europa Central. Se trata de un valle excepcionalmente bien conservado en un paisaje boscoso impresionante justo en la frontera con Austria, donde se convierte en el Parque Nacional Thayatal. La zona natural está casi intacta debido al aislamiento sufrido durante los años del “telón de acero” comunista. En este escenario el río Dyje discurre entre meandros pronunciados y en sus orillas se levantan esculturales rocas, verdes viñedos, prados florecidos y soleados huertos llenos de frutas. Un área perfecta para paseos románticos.
Visitar esta joya barroca encaramada sobre un promontorio que domina el pintoresco valle del río Dyjees es como transportarse a un escenario épico de caballeros andantes y doncellas. Diseñado por el arquitecto de la corte imperial Johann Bernhard Fischer de Erlach, el mismo autor de la Karlskirche en Viena y la fuente de Zelny trh, en Brno, el castillo Vranov es un conjunto magníficamente conservado, con preciosos jardines y ubicado en un paisaje impresionante. En el interior destaca la sala oval, que reúne imágenes de antepasados de la familia Althann en un fresco barroco.
Apodado el Adriático de Moravia, el embalse de Vranov es una zona de recreo muy popular en verano. En sus aguas se puede practicar la natación o alquilar barcas de remo. Una manera agradable de disfrutar del paisaje y de los palacios que se yerguen en sus orillas es hacer una excursión en alguno de los dos barcos turísticos -Valentýn y Viktorie- que realizan recorridos inolvidables. La tradición de los paseos en barco por este gran embalse se remonta a 1934, inaugurándola la primera embarcación a motor llamada Máša. En verano, hay cruceros nocturnos con cata de vino y queso.
¿Cómo llegar?
En avión: El aeropuerto internacional más cercano es el de Praga (http://www.prg.aero/en/). También se puede llegar hasta Viena, en la vecina Austria (http://www.viennaairport.com/passagiere), que está aún más cercana a la ciudad de Znojmo. En el aeropuerto de Brno llegan y salen vuelos domésticos.
En coche: A Znojmo se puede llegar fácilmente en automóvil, y es especialmente ventajoso para quienes viajan hacia Telč o Viena. Se toma la autopista D1 hacia el sur de Praga, y se sale hacia s la carretera 38 dirección Jihlava. Una vez en el pueblo, solo hay que atravesarlo y leer las señalizaciones. Desde Praga, el viaje dura unas 2.5 horas.
En autobús: Los autobuses son generalmente más baratos y rápidos que los trenes, tanto los que parten de Brno como los de Praga. Numerosas líneas de autobús conectan diariamente Praga-Znojmo desde la estación Florenc en la primera ciudad. El recorrido es de 3 horas. Desde Brno, el viaje es mucho más rápido (1 hora aproximadamente).
En tren: Desde Praga el viaje completo dura un mínimo de 5 horas pasando por Brno. Por lo general hay que transbordar en Břeclav. Desde Brno, hay gran cantidad de trenes que hacen diariamente este recorrido, aunque también en este caso es preciso transbordar en Břeclav. Este viaje dura poco más de dos horas.
Presentación
Ciudad ubicada en la región de Moravia Meridional, en la República Checa, cerca de la frontera con Baja Austria y a 55 km al suroeste de Brno. Este maravilloso pueblo histórico está enclavado en un marco imponente sobre el río Dyje, en un acantilado rocoso en la orilla izquierda del río Dyje, y conserva buenos ejemplos de arquitectura medieval. Su centro histórico, bellísimo y muy pintoresco, tiene calles sinuosas y románticas, llenas de rincones y recovecos misteriosos. Znojmo es también el centro de una conocida región vinícola que sorprende no solo por su paisaje de viñedos que cambian de color con las estaciones, también por sus densos bosques que esconden palacios renacentistas. A la fama de sus vinos se añade la no menos merecida del pepinillo. Znojmo se conoce como la capital checa del pepinillo, preparado con una salsa condimentada, como es el caso de la Znojemský guláš, de delicioso sabor agridulce…
La localidad de Znojmo pertenece (de mayor a menor) a la región Jihomoravský kraj, al distrito Znojmo y al municipio Dobšice.
La localidad de Znojmo tiene 34.073 habitantes (censo 2012). La altitud máxima es de 290 m, la altitud media es de 290 m.
El actual alcade de Znojmo es Vlastimil Gabrhel para el período 2.011.
El nombre francés de la localidad es Znojmo, el nombre español es Znojmo.
La página web de Znojmo es http://www.znojmocity.cz
Visitas destacadas
A vista de pájaro la ciudad checa de Znojmo recuerda mucho a Praga. El río baña esta elegante localidad y su casco histórico, un mosaico de casitas de colores entre las que despuntan la torre del ayuntamiento y de las principales iglesias. Znojmo se fundó en tiempos tan remotos como el siglo VII, y esta ciudad llegó a ser dominante durante el siglo IX, cuando el Imperio de la Gran Moravia llegó al poder. El pasado de Znojmo tiene su elemento más representativo en lo que es también su construcción más antigua, el castillo y la Rotonda románica de Santa Catalina. Ambos se encuentran a las afueras de la ciudad medieval, remontándose al siglo XI. El castillo fue erigido por el príncipe Břetislav I. La ciudad real de Znojmo fue fundada poco después de 1226 por el rey Otakar I de Bohemia sobre la llanura que se extiende frente al castillo. En estos mismos terrenos, la Rotonda de Santa Catalina debe su nombre a su sencilla planta circular. Otra iglesia que merece la pena visitar es la de San Nicolás, de estilo gótico, construida por el emperador Carlos IV en 1348. El interior tiene uno de los púlpitos barrocos más bellos y originales de toda la República Checa.
La plaza principal de Znojmo es Masarykovo náměstí. Prácticamente todo está ubicado en o cerca de ella. La calle Zelenářská, que pasa por la esquina noroeste de la plaza, lleva hasta la Iglesia de San Nicolás y al castillo. La Torre del Ayuntamiento se contempla desde cualquier punto de la ciudad. Con sus 75 metros de alto data de 1446 y queda rematada con una historiada y hermosa cubierta de color verde. Se remonta también al gótico tardío. En la fachada principal, la luz entra a través de pequeños ventanucos alineados como en las torres de las iglesias, y en la parte superior luce un reloj que da las horas puntualmente. Es todo un espectáculo contemplar hasta donde la vista alcanza desde lo alto de la galería-mirador de la Casa Consistorial. Callejeando por el casco antiguo se llega a Pestsäule am Znaimer Masarykplatz, una plaza grandiosa y muy turística. Sus casas señoriales de varias alturas con fachadas pintadas en tonos pastel forman un conjunto armonioso y elegante. En el centro, sobre una columna ornamental, se erige una escultura que conmemora la plaga que sufrió la ciudad en siglos pasados. En esta plaza hay restaurantes y cafés que en verano sacan sus terrazas a la calle, convirtiendo el lugar en un animado punto de encuentro.
Unos 30 km de galerías bajo tierra atraviesan el subsuelo de la ciudad. Pasan por debajo de casas, calles y plazas del centro histórico. Esta red laberíntica fue excavada durante años por los habitantes y era utilizada para cualquier cosa, como esconderse de los invasores, almacenar vino, municiones y pepinillos en conserva. Se ha abierto al público cerca de 1 kilómetro de la red de túneles antiguos, una de las más grandes en Europa Central y una interesantísima propuesta turística para toda la familiar. Entre sus recovecos y galerías transcurrió la historia de Znojmo. Para conocerla se puede optar por un tour guiado tradicional en el que se desgranarán todos los detalles, o un recorrido a lo largo de una ruta alternativa. La segunda opción es fascinante sobre todo para los visitantes más pequeños, ya que en ella se descubre el mundo misterioso que los pasadizos subterráneos encierran y se podrá ver en vivo personajes de cuento, hadas y fantasmas, talleres de alquimistas, celdas de bandidos… Todo acompañado de un sistema de efectos de luz especiales que aportan el ambiente necesario. Un lugar interesante es un espacio compuesto por dos naves que recrean una sala de justicia y que hoy sirve como una “bodega medieval” en la que se pueden degustar los buenos vinos de esta zona europea.
Si se visita Znojmo, es obligado hacer un recorrido por la región para conocer su importante producción de vinos y sus bodegas. En esta zona limítrofe con Austria se dan excelentes caldos de renombre, y no hay que dejar pasar la oportunidad de probarlos en algunos de los sitios más sorprendentes. Para acercarse al que es uno de los centros más importantes de toda la República Checa, el Monasterio Loucká, lo mejor es contratar una excursión. La cata de vinos en el silencio de un monasterio es casi una “experiencia religiosa”. En los sótanos de este complejo monástico se encuentra actualmente la mayor productora de vino del país, la sociedad anónima Znovín Znojmo, cool. Durante siglos el monasterio de Loucká fue uno de los más importantes de toda Europa Central. Hoy en su bodegas se pueden degustar las distintas variedades de caldos y conocer la historia al detalle en el Museo del vino. Y es posible comprarlos en la tienda del museo. Más información: spravceznovin.cz. Otra ruta que completa la anterior es la visita a el Parque Nacional Podyjí y Sobes, uno de los mejores viñedos europeos.
Y, si además de beber, se quiere comer, disfrutar del teatro y la música, no hay que perderse la feria anual Znojmo Historical Vintage: la mayor celebración del vino en la ciudad. Tiene lugar en el mes de septiembre y recuerda el año de 1327, cuando el rey checo de Luxemburgo Juan y su esposa Elisabeth de Bohemia llegaron a Znojmo con toda la corte real. El programa de actividades no solo reúne acontecimientos en torno al vino y a la gastronomía, también ofrece una serie de eventos culturales muy interesantes: obras de teatro, conciertos, fuegos artificiales, torneos de justas, mercado histórico con demostraciones de artesanía y un campamento militar. La culminación de la celebración es un desfile festivo a través de la ciudad, que por supuesto nunca se pierde el principal de los visitantes de la cosecha histórica de Znojmo, el Dios del vino Baco. El ambiente es magnífico, recreado por antorchas que acompañan el desfile del primer día, así como el resto de las propuestas, que conmemoran actos solemnes y representan farsas divertidas en torno al vino.
En el río Dyje, no lejos de Znojmo, se construyó en el siglo XIII un bellísimo molino que daba servicio al convento cisterciense en Oslavany. El molino, en perfecto estado de conservación, tiene cuatro ruedas y es un ingenio técnico único: un maravilloso ejemplo para los aficionados a la mecánica y a la historia. Los visitantes pueden verlo en funcionamiento y descubrir todo el proceso de molienda. Además, en septiembre se celebra el ”Festival del pan" , que adereza esta atracción turística con actuaciones de música folclórica.
Aunque es el más parque nacional checo más pequeño del país, está entre los sitios naturales más importantes de Europa Central. Se trata de un valle excepcionalmente bien conservado en un paisaje boscoso impresionante justo en la frontera con Austria, donde se convierte en el Parque Nacional Thayatal. La zona natural está casi intacta debido al aislamiento sufrido durante los años del “telón de acero” comunista. En este escenario el río Dyje discurre entre meandros pronunciados y en sus orillas se levantan esculturales rocas, verdes viñedos, prados florecidos y soleados huertos llenos de frutas. Un área perfecta para paseos románticos.
Visitar esta joya barroca encaramada sobre un promontorio que domina el pintoresco valle del río Dyjees es como transportarse a un escenario épico de caballeros andantes y doncellas. Diseñado por el arquitecto de la corte imperial Johann Bernhard Fischer de Erlach, el mismo autor de la Karlskirche en Viena y la fuente de Zelny trh, en Brno, el castillo Vranov es un conjunto magníficamente conservado, con preciosos jardines y ubicado en un paisaje impresionante. En el interior destaca la sala oval, que reúne imágenes de antepasados de la familia Althann en un fresco barroco.
Apodado el Adriático de Moravia, el embalse de Vranov es una zona de recreo muy popular en verano. En sus aguas se puede practicar la natación o alquilar barcas de remo. Una manera agradable de disfrutar del paisaje y de los palacios que se yerguen en sus orillas es hacer una excursión en alguno de los dos barcos turísticos -Valentýn y Viktorie- que realizan recorridos inolvidables. La tradición de los paseos en barco por este gran embalse se remonta a 1934, inaugurándola la primera embarcación a motor llamada Máša. En verano, hay cruceros nocturnos con cata de vino y queso.
¿Cómo llegar?
En avión: El aeropuerto internacional más cercano es el de Praga (http://www.prg.aero/en/). También se puede llegar hasta Viena, en la vecina Austria (http://www.viennaairport.com/passagiere), que está aún más cercana a la ciudad de Znojmo. En el aeropuerto de Brno llegan y salen vuelos domésticos.
En coche: A Znojmo se puede llegar fácilmente en automóvil, y es especialmente ventajoso para quienes viajan hacia Telč o Viena. Se toma la autopista D1 hacia el sur de Praga, y se sale hacia s la carretera 38 dirección Jihlava. Una vez en el pueblo, solo hay que atravesarlo y leer las señalizaciones. Desde Praga, el viaje dura unas 2.5 horas.
En autobús: Los autobuses son generalmente más baratos y rápidos que los trenes, tanto los que parten de Brno como los de Praga. Numerosas líneas de autobús conectan diariamente Praga-Znojmo desde la estación Florenc en la primera ciudad. El recorrido es de 3 horas. Desde Brno, el viaje es mucho más rápido (1 hora aproximadamente).
En tren: Desde Praga el viaje completo dura un mínimo de 5 horas pasando por Brno. Por lo general hay que transbordar en Břeclav. Desde Brno, hay gran cantidad de trenes que hacen diariamente este recorrido, aunque también en este caso es preciso transbordar en Břeclav. Este viaje dura poco más de dos horas.