Visitas destacadas
Actividades para todos
En St. Moritz se pueden realizar numerosas actividades sobre todo deportivas y al aire libre. En su mano está elegir cuál le apetece más de un amplio abanico de posibilidades. Aquí le detallamos sólo algunas de todas las que puede realizar: Excursionismo: las montañas que rodean la ciudad se prestan a ser paseadas por todo tipo de personas y condiciones físicas. Con un buen equipamiento se puede ir en cualquier época del año. Puede coger ferrocarriles o teleféricos que le desplazarán hasta diversos picos desde donde comenzar las caminatas y disfrutar así de la geología, la botánica, los glaciares... Mountain bike: esta tierra también es el paraíso de aquellos a los que les gusta recorrer senderos montañosos en bicicleta. Con unos 400 kilómetros de senderos muy bine señalizados para el disfrute de los amantes de este deporte. Con bellos paisajes y numerosos retos a cada paso. Nadar en el lago: la proximidad del lago a la ciudad hace que la natación o simplemente el esparcimiento en el agua sea una de las actividades más elegidas entre los visitantes a St. Moritz. La temperatura del agua agradable hace que los numerosos lagos pequeños que hay en las cercanías sean un lugar ideal para remojarse en la época estival. Más información: http://www.stmoritz.ch/en/summer/activities/
Galerías de arte y museos
La ciudad de St. Moritz no es muy grande ni cuenta con mucha población pero siendo su principal fuente de ingresos el turismo esta población se dispara e incluso se duplica durante las épocas de temporada alta. Puesto que la ciudad está completamente dedicada al bienestar del visitante no faltan ofertas de ocio, cultura y entretenimiento y entre ellas destacamos tanto una galería de arte como el Museo Segantini. La galería es algo peculiar pues se encuentra en una pasarela que une el hotel Badrutt Palace con el lago y en ella se muestran exposiciones de carteles especialmente valiosos que cambian cada año. Están expuestas en unas vitrinas iluminadas que realzan la belleza de las imágenes y puede ser visitada por todos los amantes del arte. Por otro lado, nos encontramos con un museo construido en el año 1908 y dedicado al artista Segantini que pasó sus últimos cinco años de vida viviendo y pintando el valle de Engadina. Aunque no es este el único museo que podemos encontrar en la ciudad, la arquitectura del recinto y las pinturas de la temática del lugar que nos ocupa pueden ser muy interesantes. Más información sobre los museos de St. Mortiz: http://www.stmoritz.ch/en/summer/lifestyle/art-culture/museums.html
La casa de Heidi y otras curiosidades
En la zona de St. Moritz-Dorf podemos encontrar varios edificios curiosos que nos pueden ocupar un día de visitas en una mañana soleada. Por un lado nos encontramos con la Torre inclinada, punto de referencia del pueblo y lugar desde donde comienza todo el casco antiguo. La torre está aquí desde el siglo XII y junto con la iglesia de San Mauricio es el lugar desde donde comenzó a ampliarse el núcleo de la ciudad. Por eso ahora ha quedado bastante céntrica. Hoy en día es uno de los puntos turísticos más visitados de la ciudad y se encuentra justo enfrente del hotel Kulm. Por otra parte, todos recordamos las historias de Heidi, una entrañable niña que vivía en las montañas suizas con su abuelo. Su autora Johanna Spyri nos dejó numerosas historias sobre esta niña que luego se convirtieron en dibujos pero también en película. La cabaña utilizada para el rodaje del largometraje se encuentra muy cerca del pueblo de St. Moritz y puede ser visitada tanto por niños como por adultos. La entrada es gratuita y se encuentra en la zonas de Salastrains, un poco por encima de St. Moritz-Dorf. Más información: www.stmoritz.ch
La tradición del spa
Una de las señas de identidad de St. Moritz es su oferta de spas y tratamientos de belleza y relajación. En esta ciudad confluyen una serie de características que hacen que esto se convierta en algo casi irresistible, por un lado sus 360 días de sol (con pocas precipitaciones al año), otra es el champán espumoso, que imaginándolo en una piscina de aguas termales burbujeantes y con buena compañía se hace aún más apetitoso. Y la otra es la ciudad en sí misma: si hace un día soleado, estoy en un spa y al mirar por la ventana me encuentro en la cima del mundo, entre montañas impresionantes y con vistas espectaculares ya no voy a necesitar nada más para que mis vacaciones sean perfectas. Además, St. Moritz debe su fama mundial no sólo a estas características sino también a su amplia experiencia forjada durante más de 3.000 años. De hecho, prueba de ello es el canal de agua terapéutica más antiguo del mundo construido en madera en 1466 a.C. Así, la fama fue pasando de siglo en siglo hasta hoy en día donde también encontramos en los spas a los mejores profesionales que velarán por su salud con masajes, baños de agua, y tratamientos de belleza.
St. Moritz y la música
Durante todo el año se celebran distintos festivales de música en la ciudad de St. Mortiz haciendo que el maravilloso enclave donde se encuentra se una a músicas estremecedoras que harán que su estancia se acerque al cuento de hadas. Por un lado tenemos el festival de jazz de mayor altitud de Europa que se celebra aquí cada verano. Con un aforo limitado a 150 personas en cada concierto se convierten en conciertos privados y cercanos con un ambiente y una atmósfera de lo más exclusivo. También encontramos en la ciudad su ópera con sus espectáculos de conjuntos internacionales que nos ofrecen voces excepcionales y cercanas. Tampoco falta la música de cámara en este ambiente de relajación y entretenimiento. En verano los visitantes de St. Moritz podrán disfrutar de hasta 200 conciertos de este tipo de música en el parque, en el bosque o en la plaza del pueblo, pero siempre con salas cubiertas alternativas por si sale mal tiempo. La entrada a todos los conciertos es gratuita. Más información sobre el festival de Jazz: www.festivaldajazz.ch Más información sobre la ópera: www.opera-stmoritz.ch Más información sobre la música de cámara: www.salonorchester-stmoritz.ch
El Glacier Express
Se trata de uno de los trenes más famosos del mundo. El Glacier Express es el tren de montaña suizo que recorre desde St. Mortiz hasta Zermatt o bien en la otra dirección con un recorrido máximo de siete horas y media, a través de más de 290 puentes y más de 90 túneles. Realizará un viaje panorámico de los altos Alpes, en el corazón de Suiza. Una experiencia inolvidable en cualquier época del año, atravesando lugares de belleza incomparable, acomodado en un cómodo tren con todos sus servicios como comidas preparadas por el chef que sirven el vagón restaurante. Más información: www.glacierexpress.ch
El Parque Nacional
Aunque parezca increíble, en los alrededores de St. Mortiz todavía queda un área que permanece intacta a la mano del hombre. Que sigue de la misma forma que nuestros antepasados la encontraron. Es una reserva natural protegida donde no se puede alterar nada, de hecho también está siendo investigado científicamente. Desde 1914 es área protegida por lo que es un paraíso para la flora y la fauna del lugar, un verdadero espectáculo de la naturaleza en su máximo esplendor. Se pueden realizar algunas rutas con o sin guía. Más información: www.nationalpark.ch
Viaje a Venecia
Un nuevo recorrido en tren y autobús unen ahora las ciudades de St. Mortiz y Venecia. Desde los Alpes hasta el Adriático en unas 8 horas pasando por lugares nombrados Patrimonio Mundial por la UNESCO. Puede realizar este viaje en cualquiera de los dos sentidos y en cualquier época del año y disfrutar de la joya entre las joyas del Patrimonio Mundial como es Venecia, con sus lagunas, sus paseos en góndola y los reflejos del sol sobre sus aguas. Pero por el camino también puede realizar otras paradas como Padua, Vizenza, Verona, Bolzano, Meran y muchas otras.
Visitas olímpicas
Se puede realizar por la propia ciudad y los alrededores, visitas a los emplazamientos que albergaron los Juegos Olímpicos de invierno en St. Moritz. Puede ser interesante acercarse al lugar desde donde se realizan los saltos olímpicos. La plataforma de 90 metros desde donde vuelan los atletas o también el canal de hielo por donde se deslizan con sus bólidos los participantes de la disciplina de bob. También se puede visitar el antiguo Estadio Olímpico que permaneció sin uso durante varios años pero luego fue reconvertido en edificio residencial. Está situado detrás del Hotel Carlton.
Redactor :
Anne Chabot
