Visitas destacadas
Iglesia de San Policarpo
San Policarpo es el padre apostólico de la iglesia católica en Izmir, bautizado por San Juan Bautista, que murió quemado en la hoguera alrededor del año 155. Por este motivo no de extrañar que este santo tenga una iglesia consagrada en su honor y que, además, sea una de las más bellas de la ciudad. Se cree que esta iglesia es una de las siete iglesias que San Juan menciona en el Apocalipsis. Las otras seis se encontrarían en Éfeso, Pérgamo, Thyatira, Sart, Alasehir y Eskihisar.
A pesar de que sus orígenes se remontan a hace miles de años, el edificio que se puede contemplar hoy en día es fruto de la restauración realizada en 1620.
La minoría católica de Izmir continúa acudiendo a esta iglesia para celebrar la misa. El exterior de la iglesia es sobrio, sin elementos que destaquen y llamen la atención. Sin embargo el interior es muy rico en decoración, con pinturas que recuerdan a las iglesias ortodoxas, entre las que destaca la pintura que representa a San Juan Bautista.
Muy cerca de la iglesia se encuentra la estación de metro Çankaya, a la que se puede llegar tomando la línea roja.
Dirección: Akdeniz Mh, Izmir, Turquía.
Mezquita de Hisar
La mezquita de Hisar es la más grande de Izmir. Construida en el siglo XVI por Aydınoğlu Yakup Bey, la última restauración se llevó a cabo en el siglo XIX. En el exterior la principal característica de la mezquita es su gran cúpula, situada en el medio, rodeada de otras tres cúpulas más pequeñas y sustentada por ocho columnas. Como es habitual en las mezquitas, la mezquita de Hisar tiene un patio exterior en el que se encuentra una fuente, que recibe el nombre de şadırvanı, que se utiliza para el ritual de purificación islámico. Los edificios situados a los lados del patio están coronados por otras siete cúpulas similares a las de la estructura central. Cuando se conserva la mezquita desde el exterior, da la sensación de estar contemplando una fortaleza, no obstante, se encuentra construida sobre los restos bizantinos del castillo de San Pedro.
En el interior de la mezquita se puede disfrutar de un claro ejemplo del arte islámico otomano que no deja a nadie indiferente. Entre todos los elementos destacan el púlpito y el mirab, que marca la situación de la meca.
La parada de autobús más cercana es Hisar Önü, también está muy cerca la estación de metro Çankaya, de la línea roja.
Dirección: Konak Mh, Izmir, Turquía.
Torre del Reloj
La torre del reloj, conocida como saat kulesi, se construyó en 1901 como conmemoración del 25 aniversario del ascenso al trono del sultán Abdülhamid II que se ha convertido en el símbolo de la ciudad. Este monumento fue un regalo de el emperador Guillermo II de Alemania al sultán. El arquitecto francés Raymond Charles Père se encargó de realizar el diseño en estilo otomano, con 25 metros de altura y forma circular. En la base de la torre se encuentran cuatro fuentes sobre las que se sostiene el monumento.
La belleza de la torre destaca aún más por encontrarse en una plaza abierta, con mucho espacio libre alrededor que permite observarla en perspectiva. En la plaza hay palmeras y jardines y se puede ver, también, el mar de fondo. La torre del reloj atrae a los turistas pero también a los habitantes de Izmir, ya que suele ser el punto de encuentro social. Como su propio nombre indica, en lo alto de la torre hay un reloj marcando la hora.
Para desplazarse hasta la torre se puede coger el autobús hasta la parada İskele, o la línea roja del metro hasta la estación de
Konak.
Dirección: Plaza Konak, Izmir, Turquía.
Museo Arqueológico
En el Museo Arqueológico de Izmir se encuentra una amplia colección de objetos encontrados en las excavaciones realizadas en la ciudad. Debido al gran terremoto que asoló Izmir, muchos de los edificios se destruyeron y no se pueden contemplar hoy en día, sin embargo, fue mucho más sencillo conservar los objetos que hoy en día se exponen en el museo. La colección se compone de vasijas, bustos, estatuas, utensilios de cocina y otras herramientas tanto de la edad de bronce como de las épocas romana y griega.
El museo abrió sus puertas en 1927 en antigua iglesia de Ayavukla, aunque en 1951 se trasladó a uno de los pabellones del Parque Cultural. Este museo se amplió en 1984 con la llegada de las piezas encontradas en Éfeso, Pérgamo, Mileto y otras ciudades de los alrededores. Algunas de las piezas como sarcófagos, grandes frisos, estatuas y estelas se exponen en los jardines del museo.
Una de las colecciones más importantes del museo es la serie de piezas perteneciente al Egeo
Es muy sencillo desplazarse hasta el museo, se puede coger un autobús hasta Kız Yurdu, o la línea roja de metro hasta
Konak y caminar hacia el sur.
Dirección: Halil Rıfat Paşa Caddesi 4, Izmir, Turquía.
Castillo de Kadifekale
El castillo de Kadifekale, que significa Castillo de Terciopelo, se encuentra en el monte Pagos, la zona más alta de la ciudad de Izmir por lo que la visita combina la belleza del castillo junto con las maravillosas vistas de la ciudad y del golfo y el mar. La altura contribuye a que el castillo se vea desde casi cualquier punto de la ciudad, por lo que la visita se vuelve ineludible. Hoy en día se conservan únicamente las ruinas de las murallas y el castillo de Kadifekale, que Lisímaco construyó en el siglo IV a.C. durante el reinado de Alejandro Magno. La construcción de esta defensa se relaciona siempre con la refundación de Izmir, ya que se trasladó a su situación actual debido a que la ubicación anterior era muy pequeña.
Las murallas que rodean el recinto son de la época medieval, mientras que los edificios del interior como el castillo, el teatro y las cisternas pertenecen a la época romana. La mayor peculiaridad del castillo es que está construido en piedra negra.
Los autobuses turísticos y urbanos acceden hasta el castillo, si se decide realizar el ascenso a pie hay que tener en cuenta que las cuestas son muy empinadas y hay que estar en forma.
Dirección: Pagos, Izmir, Turquía.
Precio: gratuito.
Ruinas de Éfeso
Las ruinas de la antigua ciudad de Éfeso, de visita obligada, se encuentran a 84 kilómetros de Izmir. En Éfeso se visita un museo al aire libre, con la colección más grande de ruinas romanas situadas al este del Mediterráneo. Los monumentos más importanes de la ciudad son la Biblioteca de Celso, que contenía una gran colección de libros y, además, la tumba del senador Tiberio Julio Celso, el Templo de Adrián, del siglo II y el Anfiteatro de Éfeso, uno de los más grandes del imperio con capacidad para 25.000 personas.
Desde Izmir se debe coger la carretera E87.
Ruinas de Pérgamo
Las ruinas de Pérgamo son otra de las visitas obligadas desde Izmir. La ciudad se encuentra en lo alto de una colina y, a pesar de que algunos de los allazgos más importantes se encuentran en Berlín, aún hay mucho que visitar en estas ruinas. En la Acrópolis se puede visitar el teatro más inclinado del mundo, ya que se encuentra en la ladera de una montaña. Uno de los edificios mejor restaurados en el Templo de Trajano, también en la Ácropolis, al igual que el gimnasio y los baños.
Desde Izmir se debe coger la carretera E87 y recorrer 105 kilómetros.
Las playas de Izmir
Como ciudad mediterránea que es, Izmir ofrece bellas playas y muchas oportunidades de disfrutarlas gracias al buen tiempo y a que están bien cuidadas. Las playas más conocidas de la zona son Urla, Gülbahce, Çesme, Gümüldür, Çandarli, Foça. Esta zona de la costa presenta playas amplias de arena fina bañadas por aguas limpias y transparentes. La presencia de olivos o pinos tras la arena les da un toque diferente y algo exótico. Merece la pena recorrer las playas y los pueblos a los que pertenecen, ya que muchos de ellos son pequeños pueblos pesqueros con mucho encanto.
Kuşadası
A 100 kilómetros de distancia de Izmir se encuentra la ciudad balneario de Kuşadası, una ciudad perfecta para descansar y disfrutar del mar, la playa y el buen tiempo sin olvidar la oferta cultural. En la ciudad se pueden visitar los restos de la muralla, que aún conserva una de sus tres puertas, Kaleiçi Camii, una mezquita construida en 1618 y Guvercin Adası, la península que cierra la bahía y en la que se puede disfrutar del castillo y de locales de ocio con playa privada.
Desde Izmir se debe coger la carretera E87, el trayecto dura una hora y media aproximadamente.
Redactor :
Anne Chabot
