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El casco antiguo de Punta del Este y la Iglesia de la Candelaria
Pasear por el barrio más antiguo de Punta del Este es uno de los placeres que pueden vivirse en esta ciudad. Se trata de la zona más cercana a Punta de la Salina, y allí hay varios monumentos y lugares de interés que merece la pena visitar. Es la parte de Punta del Este en la que se reúnen las casas más tradicionales y señoriales, decoradas con bellos jardines. Algunas de estas casas son las más antiguas de la ciudad. En este barrio se localizan también el Faro de Punta del Este y la Iglesia de la Candelaria, que se alza, pintoresca y especial, con su fachada de estilo neorrománico pintada en color azul celeste. Si bien se construyó sobre una pequeña capilla que databa de 1911, y que fue ampliada en varias ocasiones, la actual iglesia data del año 1950. Es el templo católico más relevante de Punta del Este y allí se celebran misas a diario ya que su importancia religiosa es importante. En su interior destacan algunas esculturas, en especial la imagen de la Virgen de la Candelaria que se cree que procede de España.
El Faro de Punta del Este
Es uno de los monumentos más especiales de la ciudad. Un faro que se alza en la costa de Punta del Este, sobre las aguas del Océano Atlántico (entre la calle 2 de Febrero y la Calle 5). Fue construido en el año 1860 por Tomás Libarena y para ello se emplearon materiales procedentes de Europa. Por ejemplo, se trajo de Roma una tierra de origen volcánico que es más resistente y dura que el cemento. Quizás por eso, el Faro de Punta del Este está hoy en perfectas condiciones. Se levantó para servir de orientación a los navegantes del Oceáno Atlántico y del Río de la Plata. Se trata de una torre circular de piedra dotada de una gran cúpula y que mide unos 45 metros de altura. La gran linterna y el sistema de iluminación son increíbles, con prismas de cristal traídos de Francia. Como curiosidad, tiene un alcance lumínico de 11 millas, y emite dos destellos blancos cada 8 segundos. Para llegar a la parte superior del faro, hay que subir por una escalera de caracol de 150 escalones. Frente al faro se localiza la Estación Meteorológica de Punta del Este, una torre antigua que registra los datos del clima de la zona desde hace casi un siglo.
Las increíbles playas de Punta del Este
La ciudad cuenta con maravillosas playas, siendo las más conocidas la Playa Mansa y la Playa Brava. Y se llaman como se llaman por algo: las aguas de La Mansa son tranquilas y serenas, especialmente adecuadas para nadadores y familias con niños pequeños. Esta playa se localiza hacia el lado de la Bahía de Maldonado y la Isla Gorriti. Es poco profunda y su arena es fina, por lo que es una playa bastante frecuentada. Por otro lado, La Brava es una playa de aguas agitadas y con mucho oleaje, perfectas para aquellos que quieren practicar vela o surf. En algunas zonas se dejan sentir las corrientes marinas. Otras playas de Punta del Este son la Punta del Chileno, El Emir y El Placer. La mayoría de las playas de la ciudad disponen de pequeños restaurantes en los que tomar un tentempié o comer si se desea pasar todo el día en la playa. Aunque estas playas urbanas pueden estar un poco concurridas, sobre todo durante la temporada alta de verano, son una alternativa sencilla para pasar una divertida jornada playera, y el lugar perfecto para contemplar el atardecer.
Casa Pueblo, más que un museo o un hotel
Es más que un edificio, y más que una casa. Es una escultura en la que se puede habitar, obra del artista uruguayo Carlos Páez Vilaró. Era su antigua casa de veraneo, y hoy se ha convertido en un lugar público., que despierta el interés de todos aquellos que la visitan. La silueta de Casa Pueblo es uno de los elementos que definen el panorama turístico de Punta del Este. Y es que para construir esta joya arquitectónica fueron necesarios nada menos que 36 años. Se localiza al oeste de la ciudad, cerca de Punta Ballena, y es una construcción realmente sorprendente de fachada encalada y luminosa. Alberga un museo con diversas salas de exposiciones donde se muestran obras de arte, desde esculturas hasta pinturas. También una galería de arte, y el hotel Casa Pueblo, en el que es posible alojarse para disfrutar cada tarde de las vistas y de la increíble puesta de sol. Las instalaciones del hotel han ampliado la estructura original, eso sí, siguiendo al pie de la letra las características de la construcción original para no distorsionar ni estropear el conjunto. Más información en www.clubhotelcasapueblo.com
La Barra de Maldonado, lugar de diversión
En las inmediaciones de Punta del Este se localiza La Barra, un antiguo núcleo de pescadores que se ha convertido hoy en una zona muy turística repleta de casas de vacaciones y hoteles. El nombre de La Barra procede de su emplazamiento geográfico. Se localiza junto a la desembocadura del arroyo Maldonado, y justamente la palabra “barra” se empleaba para designar la desembocadura de un río o arroyo en el mar. En los últimos tiempos el interés de la zona ha crecido considerablemente entre los visitantes que llegan procedentes de todo el mundo, gracias a sus playas espectaculares y a la gran oferta de ocio que hay en la zona. Una de las atracciones de La Barra es el llamado Puente Ondulado o Puente de La Barra, que fue construido sobre el arroyo Maldonado por el ingeniero Leonel Viera en el año 1965. Dada su peculiar arquitectura, atravesar el puente en coche produce una sensación especial, un cosquilleo realmente divertido. En las playas de La Barra se pueden practicar un sinfín de actividades y deportes al aire libre como surf, esquí acuático, pesca, etc. En verano la zona se llena de vida, en las calles del lugar llenas de galerías de arte, tiendas de antigüedades, restaurantes, etc.
Las playas cercanas a Punta del Este
Además de las playas que se localizan en la misma ciudad, en los alrededores de Punta del Este hay muchas playas maravillosas que cuentan con la ventaja de no estar tan masificadas como las del centro urbano. En la zona oeste, por ejemplo, encontramos Punta Ballena, un lugar paradisíaco con un paisaje rocoso muy especial. También están las playas de Las Grutas, Portezuelo o Chihuahua, una playa nudista. En el este, encontramos Playa Montoya, de arena dorada, además de la playa de Manantiales y la de José Ignacio.
La bella Isla Gorriti
Es una isla del Río de La Plata que se localiza frente al puerto de Punta del Este. Tiene unas 21 hectáreas de extensión, y puede divisarse desde la playa La Mansa. Recibe su nombre del comandante español Francisco Gorriti, quien edificó en la isla un fuerte para defenderla de los portugueses. En la actualidad la isla Gorriti es una reserva natural que está catalogada como Patrimonio Histórico Nacional. Este hecho hace que no se pueda construir ningún tipo de edificación en el isla, lo que la protege de cualquier tipo de agresión urbanística. Las playas más bonitas de la isla son Playa Honda y la de Puerto Jardín.
José Ignacio, un paraíso a orillas del Atlántico
Esta antigua aldea de pescadores, perteneciente al departamento de Maldonado, se localiza en un entorno realmente espectacular al borde del Océano Atlántico, a aproximadamente 40 km. de Punta del Este. Es un lugar tranquilo, sin grandes edificaciones, que contrasta con la agitación que se vive en Punta del Este o en La Barra. En San Ignacio destacan las playas naturales y los pequeños restaurantes en los que se puede disfrutar de una excelente gastronomía, mucho menos masificados que los de las otras zonas turísticas.
La Isla de Lobos
Se trata de una isla rocosa situada en el Oceáno Atlántico frente a las costas de Punta del Este, a unos 12 kilómetros, cuya superficie ocupa unas 41 hectáreas de terreno. Es el hogar de una de las colonias más grandes de lobos marinos de América del Sur. En la isla conviven dos especies de lobo, el lobo fino o de dos pelos y el león marino o lobo de un pelo. El litoral de la isla está formado por acantilados de roca, más que por playas, que son bastante escasas, así como la vegetación que tampoco es abundante. Actualmente es una Reserva Natural que pertenece al Parque Nacional de Islas Costeras.
Redactor :
Anne Chabot
