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Antiguo pueblo pesquero
El gran atractivo del Puerto de Pollensa es su bahía. En ella recalaron a lo largo de la historia fenicios, cartagineses, árabes... Si en origen este pueblo vivía de la pesca, actividad económica que todavía se practica, su elegante puerto hoy día aloja más barcos de recreo que de “faena”: yates, veleros, lanchas rápidas... embarcaciones deportivas que comparten amarres con las pequeñas barquitas tradicionales. Son reseñables las líneas de tráfico local de pasajeros, en especial la que une el puerto con el embarcadero de Formentor.
Un lugar imprescindible en Puerto de Pollensa es su paseo marítimo. Nada como una agradable caminata a lo largo del mismo y descansar después en uno de los muchos cafés y restaurantes con terrazas al aire libre que lo jalonan. ¡Qué gran placer! Otro, no menos apetecible, es perderse por el mercado con sus puestecitos llenos productos de la tierra, como la sobrasada, los quesos... En Puerto de Pollensa se instala los miércoles y en Pollensa, los domingos, día de la semana en el que el bullicio de la ciudad se concentra alrededor de la Plaza Mayor y aledaños. ¡No hay nada como acudir a un espectáculo tan animado y colorista!
Playas y calas de arena fina
Playas de fácil acceso, o pequeñas calas aisladas, donde practicar el nudismo y a las que solo se puede llegar a pie, configuran una costa de el clima es suave en invierno y cálido en verano, lo que permite disfrutar del mar muchos meses del año. Las playas más conocidas son:Albercutx y playas de Pollensa. La primera se extiende desde el norte de Marina, frente al paseo peatonal (que a veces también se conoce como la playa de Voramar) .La amplia playa de arena al sur de la Marina se llama playa de Pollensa. Formentor. Se puede llegar por carretera o en barco desde el Puerto de Pollensa. Tiene un kilómetro de longitud y es de arena blanca y fina, con aguas calmadas. Cala Murta & Cala Figuera. Dos playas pequeñas y bastante aisladas, situadas a ambos lados de la península de Formentor. En la segunda se suele practicar el nudismo. Cala Boquer. De arena y guijarros, está bastante aislada, pero el camino hasta ella es espectacular. Suele tener un fuerte oleaje. Cala San Vicente, cala Molins, Carbo, Clara y Barques. Estas cuatro atractivas playas están en la localidad de Cala de San Vicente. Cala Estremer y cala Castell. Solo accesibles por barco o a pie. Suelen estar azotadas por un fuerte oleaje.
Qué ver en el municipio
Los principales lugares de interés de la zona se encuentran localizados en la población de Pollensa o sus alrededores. La Plaza Mayor es el punto neurálgico de la vida pollensí. La preside la iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles, dedicada a la patrona de la villa. Es un templo interesante, con ornamentación barroca y cuyo campanario se construyó sobre una torre defensiva del siglo XV. El convento de Santo Domingo es otra de las joyas de Pollensa, no solo por su valor arquitectónico, sino porque aquí discurre gran parte de la vida cultural de la ciudad. El edificio, con un bello claustro barroco, es hoy la sede del Museo de Pollensa. Aquí se celebra la Feria de Arte cada año y puntualmente el prestigioso festival de música clásica de Pollensa (www.festivalpollenca.org). Para completar este paseo artístico, no hay que olvidar la torre gótica de los Jardines Joan Marc y el museo Dionís Bennàssar (www.museudionisbennassar.com), cuya sede es la casa del pintor, en la que se han reunido obras y objetos personales. El ayuntamiento de Pollensa ocupa una parte del antiguo convento jesuita Monte Sion: desde aquí se puede llegar fácilmente a El Calvario (El Calvari).
El Calvario, el puente romano y el castillo
Al Calvario se puede llegar en coche o subiendo los 365 escalones, uno por cada día del año, flanqueados por cipreses que llevan a un oratorio de finales del siglo XVIII. Mención merecen algunas de sus cruces centenarias, de tres metros de altura. Los “pasos del Calvari” son escenario de una procesión cada Viernes Santo en el que se asciende hasta la colina con antorchas encendidas. Arriba hay varios miradores desde los que se puede disfrutar de una vistas inmejorables de la ciudad de Pollensa y del Puig de María. El puente de piedra, a la salida de la ciudad, da fe del paso de los romanos por el norte de Mallorca. Se trata de una construcción de los primeros siglos de nuestra era diseñada para conducir el agua a la ciudad romana de Pollentia (Alcúdia). El Castillo del Rey es una edificación de origen árabe que se yergue sobre impresionantes acantilados. El horizonte divisado desde el mismo deja sin palabras y el recorrido que lleva hasta allí resulta encantador. Un camino entre huertas, vestigios de norias, canalizaciones, molinos de agua, fuentes...
Por la costa hasta el faro de Formentor
Una de las rutas clásicas desde el Puerto de Pollensa es la que lleva por la costa hasta el Cabo de Formentor (Cap de Formentor), el punto más septentrional de Mallorca. La carretera tortuosa y el maravilloso paisaje invitan a conducir despacio, sin pisar el acelerador, y disfrutando de este recorrido de poco más de 20 kilómetros. En la punta noroeste de esta península salvaje las vistas son sobrecogedoras: el mar Mediterráneo con su azul intenso, las espectaculares formaciones verticales, donde anidan cientos de aves entre las rocas, las playas de arena blanca al fondo de acantilados de 400 metros de altura...
A unos 6 km del Puerto de Pollensa se llega al Mirador des Colomer. Cerca de allí se alza una antigua torre de vigilancia desde la que se puede ver la totalidad de la península, así como las bahías de Pollensa y Alcudia. Se atraviesa un bosque de pinos con la típica vegetación mediterránea de matorral bajo y aromáticas... Queda muy poco para divisar la silueta solitaria del faro contra el horizonte... y frente a él, la isla de Menorca.
Observación de aves
Es una de las actividades más interesantes para realizar al aire libre, y el Puerto de Pollensa una magnifica zona para practicar esta afición. Por su ubicación está cerca de La Albufera (S´Albufera), uno de los más importantes humedales de España, separado del mar por un cordón de dunas: un Parque Natural de 1.708 hectáreas de marismas y dunas.
Las montañas de la Tramuntana, muy cerca de aquí, y los acantilados de Formentor son también puntos habituales de concentración de aves como la gaviota de Audouin, el buitre negro o el carrecerín real. ¡Todo un lujo para los amantes de la ornitología!
Andando o en bicicleta
Caminar junto a la costa, hacer montañismo en la Sierra de Tramuntana, darle al pedal por carreteras llenas de curvas y de paisajes... La bahía de Pollensa es un auténtico paraíso para practicar todos estos deportes. Rutas hay muchas, pero si el camino se quiere finalizar con un baño, una buena ruta es la que lleva por el valle de Bóquer hasta la cala del mismo nombre; a la izquierda se alza la sierra del Cavall Bernat. Se pasará por interesantes construcciones de la época talayótica y por un valle con vegetación de palmitos, orquídeas...
Un lugar que inspira a pintores y escritores
La belleza de su paisaje, la amabilidad de sus gentes, el ritmo pausado que invita a la creación... Todas estas virtudes han hecho de los municipios de Puerto de Pollensa y de Pollensa lugares frecuentados por pintores y escritores desde principios de este siglo. Muchos de ellos fijaron aquí su residencia buscando la inspiración, como el poeta catalán Michael Cosata Llobera, o los pintores Dionís Bennàssar, con su propio museo en la localidad, o el gran Hermenegildo Anglada Camarasa, que murió en Pollensa en 1959.
Fiesta de Moros y Cristianos
Otro de los grandes patrimonios del municipio de Pollensa es su riqueza cultural, que se manifiesta en sus costumbres y en sus arraigadas tradiciones. Las celebraciones dedicadas a la patrona son del 26 de julio al 2 de agosto y tienen su máxima expresión en la fiesta de Moros y Cristianos. Esta celebración recuerda con desfiles y batallas en las calles cómo este fue defendido la localidad de la invasión pirata en el año 1511. En la plaza de la Almoina se encuentran Joan Mas, jefe de los cristianos, y Dragur con su lugarteniente, líder de los otomanos... ¡y comienza la contienda! Una fiesta con toda la música y el color de los pueblos mediterráneos.
Redactor :
Marion Rouillot
