Presentación
Esta población está situada al sur de la isla de Bali, muy cerca de la turística Kuta, llegando a ser considerada como barrio de la propia ciudad de Kuta. Sin embargo, existen muchas diferencias entre ambas. Kuta es un lugar muy conocido por los turistas y allí acuden en masa numerosos mochileros y aventureros en busca de playas, días de sol, clases de surf y hoteles y restaurantes baratos. Sin embargo, Seminyak es todo lo contrario. El tipo de turista que llega a esta localidad no busca el jaleo y la aventura de los primeros, suele ser un turista más calmado que busca la calidad y el lujo, pero sobre todo la exclusividad. Todo lo que rodea a este lugar es glamuroso o de lujo: los alojamientos, los restaurantes, incluso los salones de masajes y spas son todos de muy buena calidad. El viaje a este lugar supone tranquilidad, ocio y muy buena calidad en todo.
Visitas destacadas
Las playas en Bali están altamente codiciadas. La mayor parte de los turistas que visitan la isla están atraídos por un turismo de sol y playa así que encontrar la mejor no es fácil. Sí que es cierto que hay algunas más destinadas a la práctica de deportes acuáticos como el surf debido a la presencia de olas casi todos los días del año. El hecho de que la playa tenga olas atrae a un tipo específico de turista que suelen aprovechar para pasar el día con las tablas en el agua. Sin embargo, en Seminyak la playa no tiene nada que envidiar a otras playas de Bali y sus aguas son mucho más calmadas. Esto no quita que se pueda practicar surf, pero no es la mejor si éste es tu objetivo. Por lo tanto, esta playa es ideal para el objetivo de los turistas de Seminyak que es disfrutar de los días de sol, tomando algo en la playa, sin demasiadas olas que les molesten en el agua y dispuestos a entretenerse con otro tipo de ocio diferente al del surf. Probablemente es una de las playas más tranquilas de la zona durante el día.
Se trata de un templo balinés que se encuentra al lado de la playa Petitenget y es muy famoso por sus coloridas ceremonias junto a la playa. Este templo no es ni mucho menos, tan popular y concurrido como Tanah Lot o Uluwatu, sin embargo, es uno de los más importantes de Bali. El templo Petitenget es considerado por los hindúes como uno de los nueve pilares conocidos como “kayangan Jagat”, templos de nueve ojos de viento construido en el siglo XI por Empu Kuturan quien trajo a Bali la ley religiosa y la construcción de aldeas tradicionales. Los nueve ojos se creen que son para proteger a la isla de adversidades que puedan entrar por el sur, debido a su posición en el archipiélago de Indonesia. Otra leyenda dice que el templo Petitenget también es conocido como el templo de la caja secreta, un nombre heredado de cuando un hombre procedente de Java llegó a Bali con la intención de enseñar buenos modales a sus gentes. Este hombre trajo una caja que se olvidó al regresar a Java y la gente tenía tanto miedo a saber su contenido que decidieron crear un templo a su alrededor.
Esta localidad es muy tranquila y pequeña y no ofrece muchas alternativas culturales. Sin embargo, sí se pueden hacer cosas relacionadas con la vida de los locales y a la vez disfrutar de Seminyak sin la necesidad de depender al 100% de las ofertas turísticas. Por ejemplo, puede pasar una mañana en el mercado local. En este lugar los habitantes de Seminyak acuden a realizar sus compras diarias. Se respira un ambiente totalmente balinés, cosa que en otros destinos cercanos es prácticamente imposible de conseguir. Si le gusta regatear y comprar productos locales, aquí puede pasar un buen rato. Otra alternativa cuando acabe su visita al mercado es dar un paseo por la plaza del pueblo. A pesar de que ya no es lo que era hace unos años, todavía mantiene cierto encanto indonesio. Suelen haber locales en la plaza. Si todavía le sobra tiempo, la opción más clara es pasear por las tiendas de Seminyak y dedicarse a las compras. Las hay para todos los gustos, de todos los productos y para todos los bolsillos. Incluso puede encontrar una tienda que se dedica al comercio justo y vende recuerdos y artesanía, invirtiendo el dinero que ganan en ayudar a la comunidad.
La ventaja de estar en Seminyak es que ofrece una amplia gama de actividades que quizás en otros lugares no encuentras. Aquí tienes de todo al alcance de tu mano. Es cuestión de imaginar y casi seguro que podrás realizarlo. Aunque ya hemos mencionado que la actividad principal de este lugar es ir de compras, también están clasificadas entre las más demandadas las de ir de restaurantes y bares y darse masajes. Sin embargo la diversión no acaba aquí. Si algún visitante desea realizar ejercicio aprovechando la playa no hay más que echar un vistazo y aparecerán lugares donde recibir unas clases de surf. La ventaja frente a otros lugares es que las olas no son tan grandes y es mejor para aprender, además no hay tanta gente como en Kuta por ejemplo, y las clases están menos masificadas. Si lo que uno desea es algo de adrenalina para el cuerpo también hay disponibles lugares que te invitan a hacer puenting. Seguro que no olvidará jamás la experiencia ni el paraje sin igual desde donde vaya a saltar. Si por el contrario lo que busca es algo más relajado en Seminyak están las mejores clases de yoga Iyengar de la isla. Si es lo suyo, no lo dude, pruébelas!
Venir a Bali es casi sinónimo de masaje balinés, relajación y tratamientos de belleza. A pesar de que existen negocios de este tipo en toda la isla, Seminyak no iba a ser menos. En este caso los negocios destinados al cuidado del turista son en la misma línea que el resto de establecimientos de restauración, ocio, tiendas y alojamientos que ofrece este lugar: de muy buena calidad. Sin duda, son algo más caros que en otros sitios de Bali pero también siguen siendo mucho más baratos que en otros sitios de Europa o América del Norte. Los tratamientos de los spas de esta zona suelen estar basados en los principios de restablecer el equilibrio y la armonía del cuerpo y la mente. La oferta en estos establecimientos suele ser muy amplia entre ella encontramos, por supuesto, masaje tradicional balinés. Pero si el visitante quiere ir un poco más allá, en algunos lugares también dan clases para aprender a darlos. Otros tratamientos que se ofrecen son desintoxicaciones con ayunos, saunas, tratamientos de sanación profunda o medicina herbal. Estos negocios suelen estar abiertos casi todos los días y algunos necesitan reserva previa.
Si nos apetece un poco más de ruido y acción sólo hace falta dirigirse hacia el sur durante 15 minutos y llegaremos a Kuta. Esta pequeña aldea de pescadores ha sido tomada por numerosas tiendas, bares, alojamientos baratos y escuelas de surf. Ahora es prácticamente imposible encontrar algo de esencia, de cultura o tradición balinesa fuera de los hoteles. A ella llega gente de todo el mundo dispuesta a pasar unos días de diversión. No es la zona tranquila que es Seiminyak, más bien todo lo contrario. Venir a Kuta es venir en busca de acción.
En esta pequeña aldea de pescadores conviven tanto locales como turistas. Es el lugar ideal para contemplar el apacible día a día de sus gentes y sus visitantes. Con un ambiente tranquilo, la playa de Jimbaran sea, posiblemente, la más bonita de Bali junto con la de Nusa Dua. Sin embargo, a diferencia de esta última donde sólo hay turistas, aquí podemos compartir el espacio con indonesios de otras partes del país y locales. Sin duda el mejor momento para llegar a la playa es el atardecer y aprovechar para comer algo de pescado fresco en cualquiera de los bares de la playa.
Si le parece que Kuta y Seminyk están demasiado abarrotados, si le apetece hacer algo diferente en su estancia en Bali, es hora de visitar Sanur. Puede llegar hasta allí en taxi por unos 10USD. Se trata de un lugar tranquilo, hasta las aguas del océano parecen calmadas y se transforman en una especie de piscina. Vale la pena ver el amanecer desde Sanur pero también es muy recomendable dar un paseo por su precioso paseo marítimo que bordea la playa. Sin lugar a dudas una cena de mariscos en un restaurante puede ser la guinda de un maravilloso día.
Este templo se encuentra a unos 12 kilómetros de Seminyak, esto significa unos 40 minutos. Se trata del templo de la Tierra en el Mar. Lo construyó un sacerdote y se lo dedicó a los espíritus guardianes del mar y se cree que está vigilado por las peligrosas serpientes marinas que habitan en sus aguas. Depende de la hora a la que decida visitar el templo se mojará un poco o no. Cuando la marea está baja se puede acceder caminando sobre la roca pero cuando sube, esa pequeña pasarela queda prácticamente cubierta por el agua. A pesar de todo, mojarse merecerá la pena.
¿Cómo llegar?
En coche: existen dos formas de llegar a esta ciudad, uno a partir de Kuta y Legian. La carretera se llama Jalan Legian y transcurre paralela a la playa. En su límite occidental se convierte en Jalan Seminyak. El inconveniente de esta carretera es que suele congestionarse, para ello le proponemos otra alternativa, la carretera del este que se llama Jalan Sunset. A pesar de ser más largo, es el camino más rápido.
En taxi: un taxi de prepago desde el aeropuerto tiene un precio fijo, que son alrededor de 60.000 RP (a consultar, porque las tarifas pueden variar con el paso del tiempo). Uno de prepago desde o hacia Kuta suelen ser alrededor de 30.000 RP y si el destino o el inicio es Legian el precio ronda las 15.000 RP.
Cómo moverse: las calles de Seminyak suelen estar bastante congestionados por lo que se recomienda moverse por la ciudad, o bien a pie, o bien en bicicleta.
Nombres de las carreteras: normalmente en Bali las carreteras tienen el nombre del destino por lo que cuando se alcanza, suele cambiar el nombre para pasar a llamarse según el destino siguiente. Además suelen tener nombres alternativos por lo que hay que estar muy atentos.
Presentación
Esta población está situada al sur de la isla de Bali, muy cerca de la turística Kuta, llegando a ser considerada como barrio de la propia ciudad de Kuta. Sin embargo, existen muchas diferencias entre ambas. Kuta es un lugar muy conocido por los turistas y allí acuden en masa numerosos mochileros y aventureros en busca de playas, días de sol, clases de surf y hoteles y restaurantes baratos. Sin embargo, Seminyak es todo lo contrario. El tipo de turista que llega a esta localidad no busca el jaleo y la aventura de los primeros, suele ser un turista más calmado que busca la calidad y el lujo, pero sobre todo la exclusividad. Todo lo que rodea a este lugar es glamuroso o de lujo: los alojamientos, los restaurantes, incluso los salones de masajes y spas son todos de muy buena calidad. El viaje a este lugar supone tranquilidad, ocio y muy buena calidad en todo.
Visitas destacadas
Las playas en Bali están altamente codiciadas. La mayor parte de los turistas que visitan la isla están atraídos por un turismo de sol y playa así que encontrar la mejor no es fácil. Sí que es cierto que hay algunas más destinadas a la práctica de deportes acuáticos como el surf debido a la presencia de olas casi todos los días del año. El hecho de que la playa tenga olas atrae a un tipo específico de turista que suelen aprovechar para pasar el día con las tablas en el agua. Sin embargo, en Seminyak la playa no tiene nada que envidiar a otras playas de Bali y sus aguas son mucho más calmadas. Esto no quita que se pueda practicar surf, pero no es la mejor si éste es tu objetivo. Por lo tanto, esta playa es ideal para el objetivo de los turistas de Seminyak que es disfrutar de los días de sol, tomando algo en la playa, sin demasiadas olas que les molesten en el agua y dispuestos a entretenerse con otro tipo de ocio diferente al del surf. Probablemente es una de las playas más tranquilas de la zona durante el día.
Se trata de un templo balinés que se encuentra al lado de la playa Petitenget y es muy famoso por sus coloridas ceremonias junto a la playa. Este templo no es ni mucho menos, tan popular y concurrido como Tanah Lot o Uluwatu, sin embargo, es uno de los más importantes de Bali. El templo Petitenget es considerado por los hindúes como uno de los nueve pilares conocidos como “kayangan Jagat”, templos de nueve ojos de viento construido en el siglo XI por Empu Kuturan quien trajo a Bali la ley religiosa y la construcción de aldeas tradicionales. Los nueve ojos se creen que son para proteger a la isla de adversidades que puedan entrar por el sur, debido a su posición en el archipiélago de Indonesia. Otra leyenda dice que el templo Petitenget también es conocido como el templo de la caja secreta, un nombre heredado de cuando un hombre procedente de Java llegó a Bali con la intención de enseñar buenos modales a sus gentes. Este hombre trajo una caja que se olvidó al regresar a Java y la gente tenía tanto miedo a saber su contenido que decidieron crear un templo a su alrededor.
Esta localidad es muy tranquila y pequeña y no ofrece muchas alternativas culturales. Sin embargo, sí se pueden hacer cosas relacionadas con la vida de los locales y a la vez disfrutar de Seminyak sin la necesidad de depender al 100% de las ofertas turísticas. Por ejemplo, puede pasar una mañana en el mercado local. En este lugar los habitantes de Seminyak acuden a realizar sus compras diarias. Se respira un ambiente totalmente balinés, cosa que en otros destinos cercanos es prácticamente imposible de conseguir. Si le gusta regatear y comprar productos locales, aquí puede pasar un buen rato. Otra alternativa cuando acabe su visita al mercado es dar un paseo por la plaza del pueblo. A pesar de que ya no es lo que era hace unos años, todavía mantiene cierto encanto indonesio. Suelen haber locales en la plaza. Si todavía le sobra tiempo, la opción más clara es pasear por las tiendas de Seminyak y dedicarse a las compras. Las hay para todos los gustos, de todos los productos y para todos los bolsillos. Incluso puede encontrar una tienda que se dedica al comercio justo y vende recuerdos y artesanía, invirtiendo el dinero que ganan en ayudar a la comunidad.
La ventaja de estar en Seminyak es que ofrece una amplia gama de actividades que quizás en otros lugares no encuentras. Aquí tienes de todo al alcance de tu mano. Es cuestión de imaginar y casi seguro que podrás realizarlo. Aunque ya hemos mencionado que la actividad principal de este lugar es ir de compras, también están clasificadas entre las más demandadas las de ir de restaurantes y bares y darse masajes. Sin embargo la diversión no acaba aquí. Si algún visitante desea realizar ejercicio aprovechando la playa no hay más que echar un vistazo y aparecerán lugares donde recibir unas clases de surf. La ventaja frente a otros lugares es que las olas no son tan grandes y es mejor para aprender, además no hay tanta gente como en Kuta por ejemplo, y las clases están menos masificadas. Si lo que uno desea es algo de adrenalina para el cuerpo también hay disponibles lugares que te invitan a hacer puenting. Seguro que no olvidará jamás la experiencia ni el paraje sin igual desde donde vaya a saltar. Si por el contrario lo que busca es algo más relajado en Seminyak están las mejores clases de yoga Iyengar de la isla. Si es lo suyo, no lo dude, pruébelas!
Venir a Bali es casi sinónimo de masaje balinés, relajación y tratamientos de belleza. A pesar de que existen negocios de este tipo en toda la isla, Seminyak no iba a ser menos. En este caso los negocios destinados al cuidado del turista son en la misma línea que el resto de establecimientos de restauración, ocio, tiendas y alojamientos que ofrece este lugar: de muy buena calidad. Sin duda, son algo más caros que en otros sitios de Bali pero también siguen siendo mucho más baratos que en otros sitios de Europa o América del Norte. Los tratamientos de los spas de esta zona suelen estar basados en los principios de restablecer el equilibrio y la armonía del cuerpo y la mente. La oferta en estos establecimientos suele ser muy amplia entre ella encontramos, por supuesto, masaje tradicional balinés. Pero si el visitante quiere ir un poco más allá, en algunos lugares también dan clases para aprender a darlos. Otros tratamientos que se ofrecen son desintoxicaciones con ayunos, saunas, tratamientos de sanación profunda o medicina herbal. Estos negocios suelen estar abiertos casi todos los días y algunos necesitan reserva previa.
Si nos apetece un poco más de ruido y acción sólo hace falta dirigirse hacia el sur durante 15 minutos y llegaremos a Kuta. Esta pequeña aldea de pescadores ha sido tomada por numerosas tiendas, bares, alojamientos baratos y escuelas de surf. Ahora es prácticamente imposible encontrar algo de esencia, de cultura o tradición balinesa fuera de los hoteles. A ella llega gente de todo el mundo dispuesta a pasar unos días de diversión. No es la zona tranquila que es Seiminyak, más bien todo lo contrario. Venir a Kuta es venir en busca de acción.
En esta pequeña aldea de pescadores conviven tanto locales como turistas. Es el lugar ideal para contemplar el apacible día a día de sus gentes y sus visitantes. Con un ambiente tranquilo, la playa de Jimbaran sea, posiblemente, la más bonita de Bali junto con la de Nusa Dua. Sin embargo, a diferencia de esta última donde sólo hay turistas, aquí podemos compartir el espacio con indonesios de otras partes del país y locales. Sin duda el mejor momento para llegar a la playa es el atardecer y aprovechar para comer algo de pescado fresco en cualquiera de los bares de la playa.
Si le parece que Kuta y Seminyk están demasiado abarrotados, si le apetece hacer algo diferente en su estancia en Bali, es hora de visitar Sanur. Puede llegar hasta allí en taxi por unos 10USD. Se trata de un lugar tranquilo, hasta las aguas del océano parecen calmadas y se transforman en una especie de piscina. Vale la pena ver el amanecer desde Sanur pero también es muy recomendable dar un paseo por su precioso paseo marítimo que bordea la playa. Sin lugar a dudas una cena de mariscos en un restaurante puede ser la guinda de un maravilloso día.
Este templo se encuentra a unos 12 kilómetros de Seminyak, esto significa unos 40 minutos. Se trata del templo de la Tierra en el Mar. Lo construyó un sacerdote y se lo dedicó a los espíritus guardianes del mar y se cree que está vigilado por las peligrosas serpientes marinas que habitan en sus aguas. Depende de la hora a la que decida visitar el templo se mojará un poco o no. Cuando la marea está baja se puede acceder caminando sobre la roca pero cuando sube, esa pequeña pasarela queda prácticamente cubierta por el agua. A pesar de todo, mojarse merecerá la pena.
¿Cómo llegar?
En coche: existen dos formas de llegar a esta ciudad, uno a partir de Kuta y Legian. La carretera se llama Jalan Legian y transcurre paralela a la playa. En su límite occidental se convierte en Jalan Seminyak. El inconveniente de esta carretera es que suele congestionarse, para ello le proponemos otra alternativa, la carretera del este que se llama Jalan Sunset. A pesar de ser más largo, es el camino más rápido.
En taxi: un taxi de prepago desde el aeropuerto tiene un precio fijo, que son alrededor de 60.000 RP (a consultar, porque las tarifas pueden variar con el paso del tiempo). Uno de prepago desde o hacia Kuta suelen ser alrededor de 30.000 RP y si el destino o el inicio es Legian el precio ronda las 15.000 RP.
Cómo moverse: las calles de Seminyak suelen estar bastante congestionados por lo que se recomienda moverse por la ciudad, o bien a pie, o bien en bicicleta.
Nombres de las carreteras: normalmente en Bali las carreteras tienen el nombre del destino por lo que cuando se alcanza, suele cambiar el nombre para pasar a llamarse según el destino siguiente. Además suelen tener nombres alternativos por lo que hay que estar muy atentos.